El fin de Wil Salgado dentro de las filas verdes inició el martes y terminó este miércoles, después de dos entrevistas en las que se quejó del poder que ostenta la dirigente Ana Guadalupe Martínez en las filas democristianas y denunció que esta pretendía imponer directivas departamentales pasando por sobre los líderes actuales, particularmente, pasando por sobre él mismo.
A esta denuncia habrá que añadir el hecho de que Salgado lo expresó con su propio estilo: 'Mire qué divertido: después que Guadalupe mataba a alcaldes del PDC hoy es la jefa de los alcaldes', dijo durante la entrevista matutina del canal 21, haciendo referencia al pasado guerrillero de Martínez.
La gracia le salió cara al alcalde, pues se ha quedado -nuevamente- sin partido. Salgado ha recorrido la mayor parte de instituciones del sistema de partidos salvadoreño, de las que es sistemáticamente expulsado por problemas disciplinarios. Otra manera de decirlo es que ha sido candidato con todos los partidos que se autoproclaman de derecha (Arena, PCN y PDC) y hasta se ha dado el lujo de repetirse. Hasta este miércoles en la mañana estaba cobijado bajo la bandera de un PDC al que había vuelto como hijo pródigo hace poco más de un año, luego de que lo dejara para irse con Arena en 2003.
Salgado espera poder repetir en el penúltimo partido del que fue expulsado: el PCN. El alcalde le comentó a El Faro que ha sido él quien ha buscado de nuevo el respaldo de su ex partido: previendo su expulsión, le llamó el martes al caudillo pecenista, Ciro Cruz Zepeda quien, asegura, le respondió con evasivas. 'No me dijo que no ni que sí', comentó.
El alcalde migueleño, quien lleva hilados cuatro triunfos electorales consecutivos, denunció que detrás de su expulsión está el intento de Martínez por conseguirle candidaturas a sus ex compañeros de armas del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP). 'El asunto es que ella quería poner como candidato de Santa Ana a Francisco Mena Sandoval y a Joaquín Villalobos como candidato por San Miguel', aseguró.
El Faro intentó confirmar esta información con los dirigentes pedecistas, pero no fue posible localizarlos, puesto que se encontraban reunidos como fracción legislativa intentando que su representación de cinco escaños en el parlamento no se desgranara. A la televisión, sin embargo, el secretario general, Rodolfo Parker, dijo que la decisión del directorio nacional ampliado fue unánime, y bajo el argumento de que el alcalde 'dijo ofensas hacia la mujer salvadoreña'.
La posibilidad de que la bancada legislativa del PDC se erosione es real, tomando que, para el PDC, Wil Salgado es un combo: él retornó al partido a condición de que su hermana, Sandra Salgado, compitiera como la primera de la lista para San Miguel. Ahora ella es diputada y miembro de la junta directiva de la Asamblea, por lo que se da por hecho su renuncia al PDC, aunque al respecto el alcalde ha dicho que aún tiene que valorar qué decisión deberá tomar su hermana.
Con la expulsión del alcalde también se pone en duda la permanencia de dos diputados más dentro de las filas democristianas: Francis Zablah, diputado por La Libertad, y Juan Carlos Mendoza, por Santa Ana, que son cercanos al alcalde migueleño, especialmente en esta coyuntura, porque también denunciaron maniobras
Salgado tiene un gran atractivo para los partidos políticos, porque ha probado su éxito ante los electores. Cuatro veces alcalde con cuatro banderas distintas, ganó en 2000 con la Democracia Cristiana; en 2003 con Arena, en 2006 con el PCN y en 2009 de nuevo con el PDC. Pero, además, Salgado ha probado capacidad para mover bases no solo en su municipio, sino también en todo el departamento. Asimismo, podría llevarse consigo a tres diputados.
Gana, el partido de los disidentes de Arena, parece haber hecho ya sus cuentas y le lanzó una invitación en boca de Silvia Aguilar, quien comentó, durante una entrevista televisiva, el interés de su partido en incluir al alcalde migueleño en sus filas. Gana tiene, por ahora, 14 legisladores salidos de la bancada arenera. Tres diputados más la llevarían a tener solo uno menos que Arena.
Sobre la posibilidad de emigrar a Gana, Salgado se limitó a decir: “En política no se puede decir de esta agua no beberé”.
