¿Con quiénes se ven ustedes más afines y con quiénes no?
Por ser un partido con pensamiento de derecha nos vemos más afines votando con el bloque de derecha. Ya hemos votado acompañando al FMLN, cuando hemos visto que son temas que benefician a la mayoría de la población o en aquellos que creemos en que deben de recomponerse ciertas situaciones.
Después de la separación de 14 diputados, ¿sigue siendo Arena una pieza importante dentro del bloque de derecha o ya se ha relevado esa posición?
Creemos que sigue siendo un grupo muy importante, pero ya no es el que lleva la batuta ni el control de las decisiones del bloque de derecha.
¿Y ahora quién lo lleva? ¿Ustedes ven algún líder?
No hablemos sobre un líder en particular o de forma individual, sino que veámoslo bajo la perspectiva de partido. Como Gana tenemos la ventaja de sumarnos o no a las decisiones del bloque de derecha. Nos sentimos más cómodos y es natural esta comodidad partiendo de que somos un partido con pensamiento de derecha, pero ya no somos un partido con un pensamiento de derecha estrictamente mercantilista, sino de corte, llamémosle, social.
¿Qué significa esto, ser un partido de derecha con corte social.
Pensamos que debe existir mucho más acercamiento a las necesidades de la población y debemos volver a ver hacia esos estratos más necesitados de la población. En Gana no estamos salvaguardando intereses de grupos económicamente poderosos.
Bueno, si usted me dice 'estamos por velar por las necesidades de las mayorías', eso también lo dicen FMLN, CD, o sea...
Si, pero no somos de izquierda, ¿significa entonces que un partido de derecha no puede velar por el interés de las mayorías?
No, pero en términos prácticos qué significa ser de derecha con corte social.
Tradicionalmente la derecha ha salvaguardado los intereses de pequeños grupos, ha desarrollado políticas para beneficiar a esos grupos. Nosotros estamos bastante claros que debe de haber un equilibrio entre el beneficio a las mayorías y debe haber una concientización de que el empresariado también vuelva su mirada hacia estas personas.
Ya dentro del quehacer legislativo, ¿cómo se reflejaría esto? ¿Qué iniciativas podría tener Gana…?
Fuimos prácticamente los catalizadores para que esta Ley de Tarjetas de Crédito surgiera. En la primera semana dijimos “estamos dispuestos a revisar Ley de Medicamentos, Ley de Tarjetas de Crédito”. Ya se discutió una y ya se está discutiendo fuertemente la otra. Queremos ver voto de los salvadoreños en el exterior.
¿Cuáles son los principios de Gana?
Creemos en los principios que conlleven a fomentar o a fortalecer el estado de derecho y la consolidación democrática en el país. Los principios que conlleven al respeto de la constitución para salvaguardar el estado de derecho y el respeto a la constitución para tener una más fortalecida democracia en el país.
Pero estos principios también los tiene Arena. Entonces qué es lo que los diferencia.
Ya le dije. Si yo voy a defender la creación de una Ley de Tarjetas de Crédito, a la que Arena se oponía, desde ese momento yo me estoy distanciando de Arena y puedo tener los mismos principios de Arena, ¿me entiende?
Entonces la diferencia es más práctica que ideológica.
Quizá no más práctica, sino que tenemos más fibra y más sentido social.
Porque el gobierno pasado, del presidente Saca, se autodenominaba un gobierno con sentido humano.
Y fue precisamente el gobierno del presidente Saca quién comenzó a volver la mirada hacia estas necesidades sociales que en un momento pasaron totalmente desapercibidas. En gobiernos anteriores no se tenía la oportunidad de ver eso.
Entonces, ¿qué es lo que diferencia a un gobierno de izquierda, actual, al gobierno anterior?
Es que depende de la óptica con que se vea. Si este gobierno es de izquierda solo porque lo llevó el FMLN, allá la apreciación de cada quién.
¿Usted cómo lo ve?
Lo veo a este gobierno como un gobierno de amplia participación democrática y lo veo como un gobierno bastante, bastante moderado.
¿A usted qué le parece el presidente Funes, qué le parece su gestión?
Como todo gobierno tiene sus falencias. La gestión del presidente Funes ha tenido cosas muy positivas como, por ejemplo, la apertura al diálogo, pero también hay que ser bastante claros que la tarea pendiente y que peor calificada está en este momento es con relación al grave problema de la delincuencia y a la crisis económica
Entonces dentro de qué espectro pone usted al presidente Funes. ¿A la par del FMLN, en una posición más de centro o a la derecha?
Siempre hemos dicho que, con esta situación, hay un presidente sin partido y hay un partido sin presidente.
¿A qué se refiere con esto?
Concretamente a que el grupo más radical del FMLN no se siente representado por Mauricio Funes como presidente.
¿Y Mauricio Funes?
Así como están las cosas siento que no tiene partido.
¿Qué son las cosas que a ustedes les hacen…?
Hay alguna falta de claridad en esos entendimientos y por lo tanto ahí no ha existido esa buena comunicación, como le llaman algunos.
Una diputada del FMLN dice que ellos no son un partido de borregos, que es una relación sana en la que hay diferencias, pero igual están juntos. ¿Usted cree que no debería ser así?
Cuando hay distanciamientos profundos y cuando las diferencias son cotidianas no es esa la forma lógica de conducirse. Está bien, pero cuando esto se vuelve cotidiano y cuando esto es el común denominador de una relación, ya es porque en realidad no hay entendimiento.
¿Cómo afecta esto al escenario dentro de la Asamblea Legislativa?
Lo afecta y lo fortalece. Al no encontrar apoyos el presidente Funes en su partido, entre comillas, ha buscado los entendimientos y los diálogos con los partidos de derecha. Se beneficia porque hay más apertura al diálogo, pero también preocupa no tenga una buena relación con su partido.
¿Para ustedes es más fácil hacer acuerdos o tener diálogos con el presidente que con el FMLN, o con el presidente que con Arena?
Por la situación que ha sucedido con Arena no hemos tenido la mejor relación. Cuando el presidente ha requerido del diálogo con Gana hemos estado prestos a escucharlo y cuando el FMLN también ha requerido apoyo a los puntos, si lo consideramos convenientes, también lo hemos hecho.
Pero, ¿se sienten cómodos con el presidente?
Pues, en realidad, no es que nosotros nos sintamos cómodos, sino que es lo que le beneficia a la población. Desde el momento que el ofrece una apertura, nosotros nos sentimos cómodos.
Y en el sentido más ideológico. ¿La comodidad también está ahí o esto hace un poco de ruido?
Yo entiendo que, lógicamente, somos distintos al presidente Funes porque por lo que él planteó en su campaña política no concuerda con muchas de nuestras apreciaciones o nuestra ideología.
¿Cómo en qué?
Él al principio manifestaba que iba a focalizar subsidios. Y nosotros pensamos que esa situación, en este momento, no es la más conveniente para el país. Y desde el momento en el que él se declara un hombre de izquierda y nosotros somos un partido de derecha, desde ahí hay diferencia.
Pero qué es lo que lo hace a él un hombre de izquierda.
Él lo ha manifestado.
¿Pero en la práctica qué es lo que los diferencia?
Nos pueden diferenciar muchas cosas, nos pueden… él lo ha dicho muchas veces, que él es un hombre de izquierda. Podría ser un hombre de izquierda, a mi juicio, moderado y no radical.
¿Ustedes se ven como un partido de derecha moderado, también?
Nosotros nos vemos como un partido de derecha con mucha proyección social y con mucha proyección humana.
