Gana abrió fuego. Empezó con los primeros disparos por la mañana, tres piezas de correspondencia, y agregó el último disparo por la tarde, el más fuerte: parar la muerte cotidiana aprobando la pena de muerte.
Gana admite que su propuesta de reforma constitucional no necesariamente tiene asidero técnico o lógico, pero dado que el clamor popular así lo demanda, el partido hace la propuesta.
'Estamos haciéndolo con base en el clamor de la gente. ¿Para qué quiere más argumento técnico jurídico? Los criterios técnicos y jurídicos los aplican los jueces', comentó Nelson Guardado, diputado de Gana. Esta, dice, es una justificación lo suficientemente fuerte como para proponer este tipo de medidas.
El primer disparo fue una reforma a
El segundo es una iniciativa para establecer régimen de excepción en los municipios más violentos del país y el tercero es un recomendable para que los excedentes de las diferentes carteras del estado sean redireccionados al Ministerio de Seguridad Pública.
El último golpe es el más fuerte, pero no necesariamente el más rápido. Esto lo reconoce el diputado Guardado, quien dice que la población pide soluciones a corto plazo. De ser aprobada por el pleno, la pena de muerte tomaría años en aplicarse. Gana propone modificar el artículo 27 de la Constitución, en el que se establece que solo se podrá imponer la pena de muerte en caso de guerra internacional.
Una reforma a la Constitución tiene que ser aprobada con mayoría simple en una legislatura y ratificada con mayoría calificada en la siguiente. Esto significa que de ser aprobada y ratificada la reforma al artículo 27, la pena de muerte se empezaría a aplicar, como mínimo, en 2012.
Guardado, además, no puede asegurar que el fuego sea la solución, no puede asegurar que la pena de muerte resuelva o no, no se sabe. Pero afirma que es algo que la gente pide y por eso tiene que ser aprobado. 'Esto la gente lo está pidiendo, pero no es una solución, en ningún país lo ha sido, pero la gente lo está pidiendo', comentó.
Después de la conferencia de prensa en el vestíbulo de la Asamblea, Guillermo Gallegos, diputado de Gana y miembro de la junta directiva, le comentó a El Faro sobre su propuesta. Al igual que Guardado, dice que la razón para impulsar la pena capital es que la gente lo está pidiendo.
Gallegos dice que más muerte es la alternativa que hay ante el salvajismo que han demostrado los grupos ilegales. 'Va a ayudar quitando a los delincuentes de la calle y no dejándolos transitar libremente', comentó antes de rehusarse a responder más preguntas.
La iniciativa de Gana no encontró demasiado eco en la Asamblea. En Arena están divididos. Hay unos que dicen que hay que reaccionar e impulsar la pena de muerte. Sin embargo, la balanza aún no se ha inclinado. Ernesto Angulo, acepta que reaccionar ante la violencia con más violencia es un acto más pasional que racional. Mire, ¿no le parece que la reacción ante esto es como cuando a uno lo asaltan y el otro quiere responder con disparos? 'Sí, cierto, o como irse a comprar un arma después de que lo asalten e ir a buscar al ladrón', dice Angulo.
Sin embargo, luego sostiene que él desde siempre ha apoyado la pena de muerte: 'Es que hay que mandar un mensaje a los delincuentes de que serán castigados a la medida de sus delitos'.
¿Y reforma fiscal para más policías, para más capacitación, para más fiscales, para un instituto forense? 'Eso también, eso también, eso se ha ido haciendo poco a poco, si hay avances', añade.
Otro miembro del partido tricolor, el diputado Reyes Dehming, plantea que Gana está disparando la idea de la pena de muerte con fines populistas. Primero, dice, se tiene que solucionar problemas porque de ser aprobada se va a tener una gran carga en lista de espera.
'¿Cuántos hay que matar y cada cuanto tiempo para medio salvequear a la delincuencia?', comentó Dehming. Además el legislador dice que difícilmente la pena capital amedrentaría a los delincuentes.
Otro diputado que ha sido un fuerte defensor de la pena de muerte se muestra ahora frío ante la posibilidad de utilizar este último cartucho. El pecenista Antonio Almendáriz dice que no hay que acalorarse a la hora de tomar decisiones, mientras recuerda cómo se aumentaron las penas a menores, pero no se ha visto si esta medida ha dado algún resultado.
Almendáriz dice que antes de pensar en una reforma a la Constitución para permitir la pena capital habría que ver si las herramientas que se tienen ahora se están utilizando bien. 'El problema no es de más leyes, es que se cumplan', aseguró.
La iniciativa impulsada por Gana no es nueva. De hecho ya ha habido dos decretos legislativos que se convirtieron en ley y pasaron el primer filtro. Angulo recuerda que Arena y PCN han aprobado en 1991 y 1996 decretos que avalan la pena de muerte.
Es decir, que hay dos decretos aprobados con mayoría simple y sancionados por la presidencia que autorizan la pena de muerte. Sin embargo, la iniciativa requiere una segunda aprobación en el pleno con mayoría calificada, es decir, 56 votos. Este último paso es el que ha ahogado las iniciativas de Arena, ya que el FMLN tuvo la llave en ambos casos y freno avalar la pena de muerte.
El FMLN parece que mantendrá su postura de años anteriores: no a la pena de muerte. Lorena Peña, diputada del FMLN, asegura que mañana discutirán la postura oficial, pero adelanta qué ya tienen adelantado el debate: 'Es que mire, parece que no es por ahí la solución. Lo que hay que hacer es reforzar la investigación de los casos. Como es que se va a aprobar la pena de muerte si aquí con este sistema judicial podrían empezar a matar a los que no son'.
