El gabinete económico anunció este viernes que a partir de mayo se dejará en suspenso el cobro del impuesto a la gasolina conocido como FEFE, con lo que los consumidores obtendrán una descarga de casi 16 centavos por cada galón de combustible que compren.
La decisión es que la cuenta del fondo de estabilización y fomento económico (FEFE), que sirve para financiar el presupuesto, deje de percibir ingresos entre mayo y diciembre, lo que implicaría para el fisco dejar de percibir unos 16 millones de dólares.
El viceministro de Hacienda, Roberto Solórzano, explicó que el gobierno tiene fondos para solventar esta que fue posiblemente la medida más novedosa de las anunciadas esta mañana para ayudar a aliviar el costo de la vida de los salvadoreños por causa del alza en los precios de los combustibles y de los alimentos. 'Tenemos que hasta abril los ingresos tributarios son 40 millones de dólares superiores a los que se obtenían para el mismo mes el año pasado', respondió Solórzano, cuando los periodistas le preguntaron cómo iba a hacer la administración para compensar la pérdida de ingresos por la suspensión del FEFE.
El FEFE es un impuesto creado por la Asamblea Legislativa en 1981 con el propósito de financiar los gastos generados por la guerra civil. El decreto 762 estableció un cargo de 1.3921 colones (0.159097242857 dólares) por cada galón de gasolina -el diésel no es afectado-. En 1992 se modificó para adaptarlo a la situación posguerra y la contribución sigue viva.
En los últimos siete años (de 2004 a 2010) el FEFE ha supuesto para el Estado un ingreso de entre 23 y 24.7 millones de dólares. Aunque el impuesto es de un poco menos de 16 centavos por galón de gasolina, los miembros del gabinete económico hablaron de 18 centavos de dólar.
La conferencia de prensa fue presidida por el secretario técnico de la Presidencia, Álex Segovia. Estuvieron también, aparte del viceministro Solórzano, el ministro de Economía, Héctor Dada, y el de Agricultura, Guillermo López Suárez. Los funcionarios anunciaron también un cambio en el 'precio de referencia' para los combustibles y el fortalecimiento de un programa de créditos para la agricultura en pequeño. El día anterior, el jueves, la Presidencia de la República anunció que el gobierno, la empresa privada y el sector de trabajadores habían logrado un acuerdo para incrementar el salario mínimo en un 8%.
El precio de referencia de los combustibles es una guía que elabora el Ministerio de Economía sobre el precio al consumidor final que sería razonable esperar en las estaciones de servicio. La fórmula incluye estimaciones de costos por transporte y por impuestos, aparte de un margen de ganancia que garantice la rentabilidad de los negocios. Cualquier precio muy alejado del precio de referencia que dicta el Ministerio periódicamente, permitiría concluir -según el Ministerio- que la empresa vendedora es muy ineficiente o se procura ganancias exorbitantes.
Dada estimó que con el cambio en el cálculo del precio de referencia los combustibles, estos bajarían en promedio unos siete centavos por galón. Estos, sumados a los 16 centavos por la eliminación temporal del FEFE, totalizan 23 centavos menos por cada galón de gasolina, en momentos en que el precio de la variedad más cara raya en los 5 dólares en varios puntos del país.
El gobierno estima que gracias a ambas medidas los salvadoreños pagarían en un plazo de un año unos 20 millones de dólares menos en concepto de compra de combustibles.
Además, el ministro de Agricultura anunció un incremento en una línea de créditos orientados a la agricultura familiar. El gobierno cree que facilitando capital a las familias puede lograr que muchos campesinos produzcan no solo productos agrícolas para su propia alimentación, sino un exceso que pueda abastecer el mercado nacional. El techo de los créditos se subió de 3 mil a 6 mil dólares, y el monto disponible creció de 20 a 40 millones de dólares.
El anuncio del gobierno de suspender el FEFE se produjo un día después de que el partido Arena lanzara una propuesta parecida.
