La tormenta 12-E, que durante 10 días lanzó más de metro y medio de lluvia sobre algunos puntos de El Salvador, dejó bajo agua o lodo unos 2,000 kilómetros cuadrados, mató a 34 personas, perjudicó directamente a uno de cada 22 habitantes y obligó a dejar sus casas a más de 55 mil salvadoreños. Las aguas se fueron y fue hora de volver... excepto para quienes, como las familias de esta historia, lo perdieron todo.
Lunes, 7 de noviembre de 2011
Frederick Meza
CAMINEMOS JUNTOS, OTROS 25 AÑOS
Si te parece valioso el trabajo de El Faro, apóyanos para seguir. Únete a nuestra comunidad de lectores y lectoras que con su membresía mensual, trimestral o anual garantizan nuestra sostenibilidad y hacen posible que nuestro equipo de periodistas continúen haciendo periodismo transparente, confiable y ético.