El presidente de la república Mauricio Funes acusó al partido Arena de librar una campaña política difamatoria contra su gobierno a través de una organización denominada Arena Cinco e insinuó que el centro de escuchas telefónicas de la Fiscalía General de la República está a su servicio. Tanto el partido de derechas como la Fiscalía calificaron de “infundadas” las declaraciones del mandatario.
“Tenemos información en la Presidencia de la existencia de un grupo denominado Arena Cinco donde hay dirigentes, columnistas y periodistas trabajando en campaña negra en contra de dirigentes políticos”, dijo Funes en la decimocuarta versión del programa radiofónico “Conversando con el presidente”, al mediodía de este sábado.
Debido una de las preguntas pregrabadas que se suelen escuchar cada programa, Funes habló sobre el combate del Ejecutivo a las extorsiones que se ordenan desde los centros penales. En su alocución incluyó la intervención de las llamadas telefónicas la cual es una estrategia con la que el país cuenta desde hace más de un año que se aprobó una ley para permitir la intervención de llamadas. Sin embargo, Funes asegura que dicha herramienta no se está utilizando de la mejor manera. El presidente recriminó que el centro de escuchas debe trabajar “de manera más eficiente” y que no debe utilizarse con fines políticos.
Funes rechazó que el Organismo de Inteligencia del Estado (OIE), una entidad que depende del ministerio de Justicia y Seguridad Pública, se dedique a investigar a sus adversarios políticos porque dice que no cuenta con el equipo necesario para ello. Por el contrario, Funes insinuó que el centro de escuchas de la Fiscalía está siendo utilizado por Arena Cinco, al cual definió como un grupo que difama a funcionarios y políticos afines a su gobierno. “Ojalá el centro de escuchas de la Fiscalía no se ponga al servicio de este grupo criminal”, dijo.
Según el mandatario, ahora que El Salvador está a las puertas de un año preelectoral ya surgieron grupos anónimos que se dedican a librar campañas negras de este tipo. “Invito a todos los sectores políticos a que vigilen el funcionamiento del centro de escuchas de la Fiscalía”, dijo.
El partido Arena y la Fiscalía descalificaron las palabras de Funes. “No sé a qué se refiere el presidente, pero si lo que dice es que todas y cada una de las personas que se expresan de cualquier manera, diciendo o publicando algo que no le gusta a él, es parte de Arena Cinco estamos hablando de que más de la mitad del país es de Arena Cinco y participa en Arena”, dijo Ernesto Muyshondt, director de información del partido.
El Faro cuestionó a Muyshondt sobre la existencia o no de este supuesto grupo denominado Arena Cinco a lo que el vocero respondió: “Arena Cinco solo existe en la mente del presidente. Nuestro partido no tiene ninguna organización que se dedique a guerra sucia. Si dice que lo criticamos a él y a su pésimo gobierno y manera de dirigir el país, tiene razón”.
Una organización con un nombre parecido al que dice Funes es el de la agencia de publicidad Grupo Cinco de Comunicación Estratégica, la empresa que impulsó mediáticamente la candidatura de Quijano a partir de enero de 2008 y que le permitió a Arena recuperar la alcaldía capitalina que había estado en manos del FMLN desde 1997. Grupo Cinco fue la creadora de la gira con alcaldes del país con la que Quijano, siendo candidato a la reelección en la alcaldía de San Salvador, se robó la salida en los tiempos de su partido y que al final le permitieron ser el candidato oficial de Arena.
Sobre Grupo Cinco Quijano dijo a El Faro en junio pasado: “Más que una agencia de publicidad, es un staff de ejecutivos cercanos a mí con los que permanentemente hago análisis político, hago encuestas y me mido cada dos meses en todo el país”, dice el edil. La agencia la dirige Manuel Meléndez, el mismo estratega que impulsó las campañas de Cristiani (1989) y Armando Calderón Sol (1994) y que a raíz del éxito en 2009 en San Salvador escribió “Contra viento y marea”, un libro en el que se recoge la estrategia que usaron para conquistar la capital.
Antes de que Quijano fuera nombrado candidato en septiembre, algunos mandos medios del partido se quejaron de que Grupo Cinco, siendo la agencia de imagen del partido, había centrado su trabajo alrededor del alcalde capitalino. Sin embargo, ahora que Quijano es ya el candidato oficial de la bandera tricolor, la agencia tiene libre el camino para impulsarlo mediáticamente.
En marzo pasado, el ministro de Justicia y Seguridad David Munguía Payés dijo que el Ejecutivo estaba pensando en impulsar una ley que persiguiera los delitos cibernéticos. Desde el último año, las redes sociales y el internet han servido de plataforma para la creación de cuentas anónimas que critican la labor del gobierno.
Arena actualmente libra una batalla legislativa para que en la Fiscalía se reelija a Romeo Benjamín Barahona como su titular. La institución, desde que a Barahona se le terminó su mandato en septiembre, ha quedado en manos del fiscal adjunto Ovidio Portillo y está a la espera de que los diputados designen al nuevo encargado. La discordia en el nombramiento está servida porque el bloque político del FMLN, Gana, Cn y Pes hasta ahora siguen pujando por la candidatura de Astor Escalante, exviceministro de Seguridad en el gobierno de Antonio Saca. El bloque necesita de seis votos más para poder nombrar a Escalante como fiscal general y la tensión ha sido tal que en la Asamblea las acusaciones de compra de diputados de Arena han ido subiendo de tono con el pasar de las semanas.
Barahona no fue capaz de implementar el centro de escuchas telefónicas en el tiempo debido. El financiador del proyecto, el gobierno de Estados Unidos, tuvo que reprochar en varias ocasiones todos los retrasos para la inauguración del centro. Fue hasta casi 30 meses después de que El Salvador contara con una ley para las intervenciones telefónicas que el proyecto contó con los primeros policías encargados de operar el centro. Según la Fiscalía, el centro de escuchas comenzó sus operaciones en mayo, 27 meses después de la entrada en vigencia de la ley pero tardó tres meses en nombrar a los primeros operativos.
“Los partidos que tienen blogs y periodistas que atacan políticamente están a la vista de todos. Hay grupos encargados y patrocinados por el gobierno, FMLN y Gana que se dedican a estar haciendo este tipo de difamaciones y esta guerra sucia de calumnias. Ahí participa un alcalde del FMLN, un exdiputdo de Gana, el director general de una autónoma de Gobierno”, dijo Muyshondt sin detallar nombres.
La Fiscalía, a través de la unidad de comunicaciones, reclamó lo que considera son señalamientos infundados. “ Solo alguien que no tiene idea de lo que es un Centro de Intervención de las Telecomunicaciones puede realizar señalamientos infundados. Mientras el Centro de Intervenciones esté bajo la dirección y control de la Fiscalía, nunca se va a prestar a situaciones que estén fuera de lo que establece la Constitución y la ley especial”, reza un comunicado autorizado por el fiscal adjunto.
La ley especial para la intervención de llamadas telefónicas establece que para ejecutar una intervención debe existir una investigación previa y debe contarse con el aval del fiscal general o del director del centro de escuchas, para luego ser sometida la solicitud a la autorización de un juez. La ley también establece que la Fiscalía informará a la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales de la Asamblea de los procesos de intervenciones.
