Óscar Ortiz, exitoso alcalde de Santa Tecla y veterano miembro del FMLN, acaba de ser aceptado – y de aceptar – para formar parte de la fórmula presidencial del partido para el 2014. Óscar forma parte de los renovadores del partido, razón principal por la cual la cúpula del mismo no lo aceptó como su candidato presidencial, seleccionando a Salvador Sánchez Cerén, del grupo más ortodoxo.
Después de la experiencia con el gobierno de Funes, el FMLN tiene claro que desea un candidato del partido, alguien en quien tenga plena confianza; Sánchez Cerén logra mayor confianza de la cúpula del partido y de un grupo de sus miembros. Pero también la experiencia con Funes y las encuestas le enseñan al FMLN que para ganar las elecciones deben abrirse más; que su proyecto político debe incluir opciones que satisfagan a un electorado más amplio que el del partido. También, la experiencia en el Ejecutivo y en el Legislativo le enseña al FMLN que para gobernar debe construir alianzas políticas y que su proyecto político, más que enfatizar modelos teóricos o un marxismo utópico, debe proponer medidas reales y viables para transformaciones sociales y económicas concretas.
Después de seleccionar a Sánchez Cerén las encuestas indicaron una preferencia del electorado por partido, cercana entre ARENA y el FMLN; sin embargo, cuando se midió la preferencia por candidatos la diferencia era mucho mayor a favor del candidato Quijano de ARENA. Algo debía hacer el partido al respecto. En ocasiones anteriores, ante disyuntivas similares, el FMLN optó por opciones radicales; cuando en las elecciones internas ganó un candidato de una tendencia u otra, el partido no se movilizó unido y ni el candidato, ni el partido, movió los votos necesarios para ganar la elección.
Esta vez, con la selección de Ortiz después de mucho debate y análisis interno, el FMLN parece haber tomado una ruta diferente. Es un líder respetado en el partido, un líder que según sus propias palabras no será “solo una figura” en la fórmula presidencial. Su selección busca sin duda la unificación del partido.
Con Ortiz el FMLN busca también atraer el voto independiente, el voto agregado que necesita para ganar. Pero, para atraer el caudal de voto independiente que el FMLN necesita, la inclusión de Ortiz en la fórmula presidencial no basta. El partido debe consolidar un proyecto político basado en las transformaciones económicas y sociales que ya empezó. Para poder ganar, y luego para poder gobernar, debe tener claro sus prioridades. El electorado debe comprender qué es lo que el Frente quiere hacer, debe ver ejemplos claros de acciones concretas en las cuales el partido sobrepone los intereses de nación, debe alejarse de pronunciamientos radicales y hablar con una sola voz.
La selección de Ortiz también ayuda en ese sentido si él, con Sánchez Cerén, llevan al partido a mayores definiciones, que aunque no fáciles, se deben dar. Medidas que van o irían en ese sentido son el recién logrado acuerdo fiscal con ARENA para la aprobación de los bonos nacionales, una propuesta a la nación para un pacto pre electoral con vista al futuro gobierno, la elección de un fiscal general que asegure integridad e independencia, una definición de que no se va a desdolarizar, la necesidad de continuar y profundizar los programas sociales, un mayor acercamiento del gobierno al pueblo a través de una descentralización participativa, búsqueda de unas relaciones estrechas con EUA basadas en un respeto mutuo, etc.
Otro signo importante que un FMLN unido puede dar, pero quizás el más difícil, para reflejar su política futura son las alianzas políticas que hará. ¿Cómo va a definir su relación con GANA? La primera prueba de ello se presenta en la elección del fiscal general. Apoyar la elección de Astor Escalante Arce no iría en la dirección de un FMLN más abierto, más transparente. ¿Cómo manejará el FMLN su relación con la fuerza política representada en el Presidente Funes? Un FMLN más abierto debería poder continuar trabajando con ese grupo y aprovechar la popularidad del Presidente. ¿Puede el FMLN dar más signos de un entendimiento con ARENA, como el recién acordado pacto fiscal, basados en los intereses de nación?
