Nacionales /

Los millones de Taiwán recorrieron cinco ciudades

Desde una cuenta en un banco de Nueva York, la embajada de Taiwán en El Salvador giró cheques para ministerios y funcionarios salvadoreños. Algunos de esos cheques quedaron registrados como cooperación internacional, pero de otros, como los donativos que recibió el presidente Flores, no quedó registro oficial. A continuación una lista de bancos, y holdings, por los cuales se movió ese dinero.


Lunes, 17 de agosto de 2015
Efren Lemus

Quizás a usted, quizás a alguno de sus conocidos, el partido Arena le regaló Pollo Campero o botellas con agua después de un mitin en la campaña presidencial de 2004. Quizás a su casa o a su colonia llegó el entonces candidato, Antonio Saca, a explicar su plan “País Seguro”. Aquel Pollo Campero, aquellas botellas con agua, algunas actividades de la campaña presidencial fueron financiadas, en parte, por cuatro cheques que Taiwán giró a nombre del expresidente Francisco Flores y la Presidencia de la República.

Antes de que esos 10 millones se convirtieran en una vitamina clave para la maquinaria financiera de Arena, ese dinero circuló por bancos en Bahamas, Costa Rica, Estados Unidos y El Salvador. ¿Cómo es el camino que siguió ese dinero? ¿Cómo se relacionan esos conglomerados financieros que movieron 10 millones de dólares y que terminaron en dinero disponible para que un partido pudiera comprar pollo y agua para sus simpatizantes?

El Faro tuvo acceso al informe del Departamento de Supervisión del Banco Central de Bahamas; a la respuesta que dio el Departamento de Justicia de los Estados Unidos sobre el caso del desvío de los donativos de Taiwán. Además, consultó en el registro público de empresas de Costa Rica y en el de Panamá para establecer las relaciones entre los bancos y las corporaciones a las que pertenecen, que gestionaron la apertura de la cuenta y posterior transferencia del dinero hacia San Salvador.

Nueva York, Estados Unidos: la cuna de los cheques

En la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, funcionaba una agencia del The International Commercial Bank of China. Ese banco tenía entre sus clientes a la “Embassy of The Republic of China San Salvador” (Embajada de la República de Taiwán en San Salvador). El cliente, gracias a la cuenta 026009085-34546, tenía una chequera desde la cual giró cheques a funcionarios salvadoreños. Algunos de esos desembolsos quedaron registrados como cooperación internacional, pero otros no.

El 9 de enero de 2000, por ejemplo, la Embajada de Taiwán en San Salvador giró desde The International Commercial Bank of China el cheque 1255 para el proyecto de reconstrucción de un tramo de la carretera Panamericana (CA1). La nota confidencial EC-89-008 dice: “La embajada tiene el agrado de anexar a la presente un cheque por $5,000,0000 para que el gobierno salvadoreño lo utilice en ejecutar el proyecto antes mencionado”. El cheque tenía estas leyendas: 'Pay to order of: Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador Five Million Only'.

Esos 5 millones de dólares quedaron registrados como cooperación internacional. Cancillería los depositó en una cuenta del Banco Cuscatlán, en San Salvador; luego lo reportó a la Secretaría Técnica del Financiamiento Externo (Setefe), y así el dinero pasó a un presupuesto especial que ejecutó el Ministerio de Obras Públicas.

En 2003, de la cuenta de la embajada de Taiwán en San Salvador también se giraron otros cuatro cheques que no se registraron como cooperación internacional, pese a que se incluyó a la Presidencia de la República como destinataria del dinero.

The International Commercial Bank of China giró el cheque 2036 por 4 millones de dólares y el cheque 2037 por un millón de dólares, el 22 de octubre de 2003. 40 días más tarde, el 31 de diciembre de 2003, el mismo banco giró otros dos cheques a nombre del presidente Francisco Flores y de la Presidencia de la República: el cheque 2066 por 2 millones de dólares y el cheque 2067 por 3 millones. En estos, la leyenda común que se veía era esta: 'Pay to order of: Excmo. Sr Francisco Guillermo Flores Pérez Presidencia de la República de El Salvador'.

Los cuatro cheques, por un monto de 10 millones de dólares, se depositaron en un banco de Bahamas, país considerado como un paraíso fiscal, que formaba parte de un holding costarricense. Al expresidente Francisco Flores se le investiga por el desvío de ese dinero y, como parte de la investigación, la Fiscalía pidió al Departamento de Justicia de los Estados Unidos que solicitara los cuatro cheques originales a The International Commercial Bank of China.

The International Commercial Bank of China ya no existe; ese banco ahora se llama Mega International Commercial Bank. Angela Chen, la ejecutiva de cumplimiento de ese banco, recibió la solicitud de la División Criminal del Departamento de Justicia de Estados Unidos. El 30 de septiembre de 2014, Chen respondió: “Mega International Commercial Bank, sucursal Nueva York, no tiene copia de los registros solicitados”.

El 31 de octubre de 2014, la Oficina de Asuntos Internacionales del Departamento de Justicia informó a las autoridades salvadoreñas que no podía proporcionar los cheques originales que Taiwán libró a nombre del expresidente Flores. “Mega International Commercial Bank no pudo proporcionar el material solicitado, debido a que no se localizó ningún registro”.

Nassau, Bahamas: la casa del banco receptor

Los cuatro cheques que Taiwán giró a nombre del presidente Flores se depositaron en un banco de Bahamas. Según el Departamento de Supervisión del Banco Central de Reserva de ese país, ese banco es el Cuscatlán International Bank & Trust Ltd., e inició operaciones el 24 de octubre de 1991.

El 20 de marzo de 2014, la Oficina del Fiscal General de Bahamas envió a la Fiscalía salvadoreña un informe sobre el Cuscatlán International Bank & Trust Ltd. El documento dice que ese banco tiene “una licencia bancaria fiduciaria sin restricción” y que formalmente se llama Commercial International Bank and Trust Co Ltd. Los registros del Banco Central de Reserva de Bahamas consignan que esa licencia fue revocada el 9 de enero de 2009.

Entre octubre de 2003 y enero de 2004, período en que fueron depositados los cheques de Taiwán en una cuenta bancaria en Costa Rica, el Cuscatlán International Bank & Trust Ltd., era una de las siete compañías subsidiarias del Grupo Financiero Cuscatlán de Costa Rica, S.A., un conglomerado financiero creado el 5 de octubre de 1998, en cual tenía un gran poder de decisión un banquero salvadoreño, Mauricio Samayoa.

En el año 2009, cuando las autoridades de Bahamas revocaron la licencia del Cuscatlán International Bank & Trust Ltd., ese banco presentó una solicitud para continuar operando como una “empresa” amparada en “the IBC Act” (International Business Company) utilizando el nombre de Cuscatlán International Ltd., para fusionarse en Costa Rica con el banco Citibank.

San José, Costa Rica: la puerta de ingreso del dinero

Cuscatlán International Bank and Trust Ltd., el banco creado en Bahamas y subsidiario de un conglomerado financiero costarricense, tenía una agencia en Uraca, Costa Rica. En esa agencia se abrió una cuenta, la 102002000589-5, a nombre del Centro de Estudios Políticos Dr. José Antonio Rodríguez Porth (CEP). Ahí se depositaron los 10 millones de dólares que Taiwán libró, por medio de cuatro cheques, a nombre del presidente Flores.

En el contrato de apertura de cuenta aparecen como responsables Gerardo Balzaretti Kriete, Antonio Salaverría, Guillermo Ávila Qüehl y Eduardo Zablah. Salaverría era el presidente del partido Arena, entonces, cuando ya era candidato presidencial Antonio Saca. Ellos, empero, no viajaron a Costa Rica para abrir la cuenta. El analista del Cuscatlán International Bank and Trust Ltd. José María Cambronero declaró que el trámite y la verificación de documentos “la realizaron los compañeros de Banco Cuscatlán El Salvador (...) La cuenta fue referida directamente por el ingeniero Mauricio Samayoa, presidente de la Unión de Banco Cuscatlán”.

¿Por qué Samayoa podía abrir cuentas bancarias en Costa Rica desde su oficina en San Salvador? ¿Cuál es el hilo que une al Cuscatlán International Bank and Trust Ltd. con el banquero salvadoreño?

Una parte de esa respuesta está en los registros de empresas que El Faro consultó en Costa Rica, El Salvador y Panamá. La conexión entre las compañías se puede resumir así: el banco de Bahamas, el Cuscatlan International Bank & Trust Ltd., era una de las siete empresas manejadas por el Grupo Financiero Cuscatlán de Costa Rica SA, una compañía costarricense fundada el 5 de octubre de 1998.

La tenedora de las acciones del Grupo Financiero Cuscatlán de Costa Rica SA es otra compañía, fundada el 1 de marzo de 1984, la Corporación Accionaria UBC S.A. Esta compañía costarricense es el holding de una empresa panameña. Un holding es una organización de empresas en la que una compañía adquiere todas o la mayor parte de las acciones de otra empresa para tener el control de la misma.

En este caso, la costarricense Corporación Accionaria UBC S.A. era la compañía holding de la panameña Corporación UBC Internacional S.A. Según el Registro Público de Panamá, esa empresa que se dedica a invertir acciones en conglomerados financieros, bancos, empresas de seguros y bolsa de valores, fue creada el 23 de enero de 2001. En la primera Junta Directiva estaban los salvadoreños Mauricio Samayoa Rivas, Elías Jorge Bahaia, Roberto Ortiz, Leopoldo Weill, Rafael Castellanos, Antonio Cristiani; los costarricenses Ernesto Rohrmoser, Francisco Jiménez; y los guatemaltecos Cristian Minondo y Sergio Paiz.

Es así como el nombre de Mauricio Samayoa Rivas, el banquero salvadoreño, está en el inicio y en el final de la cadena de empresas bancarias. Samayoa Rivas era presidente del Banco Cuscatlán, en El Salvador; era, además, vicepresidente de la costarricense Corporación Accionaria UBC, SA; y también era el presidente de Corporación UBC Internacional, SA. con sede en Panamá.

En un peritaje financiero, ordenado por el Juzgado Séptimo de Instrucción de San Salvador, instancia que investiga al expresidente Flores por el desvío de los donativos de Taiwán, se ha ordenado establecer si la panameña Corporación UBC Internacional, S.A. tenía la propiedad accionaria del Cuscatlan International Bank & Trust Ltd., el banco de Bahamas.

Miami, Estados Unidos: ahí inicia el problema del expresidente

¿Depositó el expresidente Flores los cheques de Taiwán en Miami, Estados Unidos?

La respuesta es no. La razón por la cual los cheques de Taiwán llegaron hasta Miami, Estados Unidos, es por un contrato que el banco de Bahamas, The Cuscatlán International Bank &Trust Ltd., tenía con The International Bank of Miami.

El numeral 23 del contrato de cuenta corriente que firmó el Centro de Estudios Políticos dice: 'Yo (nosotros) entiendo y estoy de acuerdo en que los cheques emitidos de mi (nuestra) cuenta con Cuscatlán International Bank & Trust Ltd. NA pueden ser pagados por medio de una cuenta que el banco mantiene con The International Bank of Miami NA. Sin embargo, yo (nosotros) entiendo que mi (nuestra) relación bancaria de la cuenta es con el banco y no con The International Bank of Miami NA. The International Bank of Miami NA ha llegado a un acuerdo con el banco solamente para actuar como agente de pago de cheques emitidios por ciertos clientes del banco'. 

La madeja de estas transacciones financieras, entonces, se alarga así: el banco que nació en Bahamas pertenecía a un holding costarricense. Los cheques llegaron a la agencia de Costa Rica, pero fueron cobrados en compensación en una cuenta que el banco de Bahamas tenía en Miami. En el anverso de los cheques que Taiwán giró a nombre del expresidente Flores se puede leer: “To deposit only in account 990002032-06 of Cuscatlan International Bank with the International Bank of Miami”.

El banco de Miami, The International Bank of Miami, con sede en Coral Gables, Florida, cobró los cheques al banco de Nueva York, The International Commercial Bank of China. Antes de ejecutar ese cobro, sin embargo, el banco de Miami emitió una alerta que, nueve años después, significó el inicio de los problemas legales por desvío de fondos contra el expresidente Flores.

Antes de depositar los 10 millones de dólares en la cuenta del banco de Bahamas, el banco de Miami emitió un Reporte de Operación Sospechosa (ROS) porque el cliente de su cliente (el expresidente Flores), en su calidad de Presidente de El Salvador, era una Persona Políticamente Expuesta (PPE) y los controles contra el lavado de dinero exigían atención especial sobre el origen de los fondos.

The International Bank of Miami ya no existe. Según un informe de la Oficina del Controlador de la Moneda de los Estados Unidos (OCC, por sus siglas en inglés), las cuentas de depósitos de ese banco fueron transferidas por un acuerdo de compra al 1st United Bank, en Boca Ratón, Florida. La compra data del 17 de diciembre de 2010.

San Salvador, El Salvador: finaliza el maquillaje

Luego del cobro de los cheques por compensación en Miami, los 10 millones de dólares fueron depositados en la cuenta bancaria que el Centro de Estudios Políticos Dr. José Antonio Rodríguez Porth tenía en el Cuscatlán International Bank & Trust Ltd. Este banco usó una cuenta de su banco 'hermano', el Banco Cuscatlán de Costa Rica S.A., para depositar los millones de dólares en una cuenta puente, la 117-105-002-001130-1-6, a nombre del Banco Cuscatlán de El Salvador, el cual la usaba para clientes que realizaban operaciones en ambos países.

El primer destino de las transferencias cablegráficas que ordenó el CEP desde Costa Rica fue la cuenta puente que tenía como dirección la Torre Cuscatlán, Unidad de Control Interno, nivel 12, en San Salvador. Una vez que el dinero llegó a esa cuenta, el dinero pasó a una cuenta especial que el Consejo Ejecutivo Nacional del partido Arena (Coena) tenía en el Banco Cuscatlán de El Salvador, sin que se cumpliera el procedimiento para acreditar el ingreso de los recursos.

Aquí sucedió el maquillaje de los dólares. Cuando el dinero salió de la cuenta puente hacia la 'Cuenta especial Coena', la plantilla de la transferencia cablegráfica consignaba que el dinero provenía de una cuenta de Arena en Costa Rica. Sin embargo, el partido Arena nunca tuvo cuenta bancaria en el Cuscatlan International Trust & Ltd.  

Cuando el dinero llegó a la 'cuenta puente', la presidencia del Banco Cuscatlán ordenó que el dinero se depositara en la cuenta 201-03200, conocida también como 'Cuenta especial Coena'. Ahí llegaron los 10 millones de dólares que Taiwán entregó al expresidente Flores y que, luego, se transfirieron a otra veintena de cuentas, en el Banco Agrícola y Cuscatlán, para financiar la campaña de Elías Antonio Saca González, candidato que en aquellos días prometía acabar con la fiesta de todos “los malacates”... Una vez que el dinero llegó a la veintena de cuentas bancarias del partido, hubo dinero para la compra del Pollo Campero o de agua envasada que usted o alguno de sus conocidos pudo haber recibido después de un mitin.

logo-undefined
CAMINEMOS JUNTOS, OTROS 25 AÑOS
Si te parece valioso el trabajo de El Faro, apóyanos para seguir. Únete a nuestra comunidad de lectores y lectoras que con su membresía mensual, trimestral o anual garantizan nuestra sostenibilidad y hacen posible que nuestro equipo de periodistas continúen haciendo periodismo transparente, confiable y ético.
Apóyanos desde $3.75/mes. Cancela cuando quieras.

Edificio Centro Colón, 5to Piso, Oficina 5-7, San José, Costa Rica.
El Faro es apoyado por:
logo_footer
logo_footer
logo_footer
logo_footer
logo_footer
FUNDACIÓN PERIÓDICA (San José, Costa Rica). Todos los Derechos Reservados. Copyright© 1998 - 2023. Fundado el 25 de abril de 1998.