Después de un interrogatorio de tres horas de la Fiscalía, Ernesto Muyshondt atendió a los medios de comunicación que esperaron a que atendiera el citatorio que le hizo un equipo de la Unidad Antipandillas, en la mañana del 16 de marzo. El diputado de Arena está en el epicentro de un terremoto que ha sacudido a su partido, después de que El Faro revelara un video en el que Muyshondt, junto con el alcalde de Ilopango Salvador Ruano se reúnen con al menos cinco pandilleros, en el contexto de la campaña presidencial de 2014.
Arena ha hecho gala de una posición hostil al diálogo con pandillas y ese debate interno ha crecido al ver a dos de sus funcionarios en el papel que tanto han criticado al FMLN, el partido que hizo una tregua con las pandillas en marzo de 2012, que contribuyó a un sensible descenso de los homicidios por alrededor de 18 meses.
Muyshondt justificó nuevamente la reunión. 'Esto contribuyó de alguna manera a que las pandillas dejaran de hostigar tanto, de amedrentar tanto, de decomisar DUI, de impedir entrada a centros de votación, de impedir a comunidades enteras que fueran a votar y eso permitió que una enorme cantidad de salvadoreños pudieran ejercer el voto libremente en la segunda vuelta', dijo el diputado que ejercía como vicepresidente de su partido, que casi empató la desventaja que el partido oficial le había sacado en la primera vuelta de la elección.
Pese a peticiones de investigaciones del Tribunal de Ética arenera por parte de algunos miembros del partido tricolor, Muyshondt dijo sentirse halagado por el apoyo que ha recibido de 'más de 80 alcaldes y la inmensa mayoría de mi bancada legislativa'. Cuestionado por la división de su estructura política dijo: 'En Arena lo que hay es diferencias de opiniones y nos unen muchas más cosas que las diferencias o las diferencias de criterio que puedan existir entre los areneros'.