El presidente Francisco Flores y el partido Arena maniobraron entre 2003 y 2004 para desviar hacia la campaña presidencial de Antonio Saca un donativo de Taiwán por 10 millones de dólares destinados a apoyar a las víctimas de los terremotos de 2001 y a programas sociales. La Fiscalía solo llevó el caso a los tribunales hasta 2014 y aún no está resuelto.