Población: 5,8 millones
Ranking FIFA: 10
Mundiales jugados: 5
Mundiales ganados: 0
La Selección de Dinamarca ocupó buena parte de las noticas previas a Qatar 2022 por sus posiciones de denuncia de las violaciones de derechos humanos en el país sede y confrontaciones con la cúpula de FIFA, pero deberá responder también en el terreno de juego a la altura de las expectativas que genera.
Solo en una ocasión (Francia 1998) logró acceder a cuartos de final, en tres mundiales se ha quedado en octavos de final y en uno se despidió apenas al terminar la fase de grupos. En Rusia 2018 se quedaron sin jugar un quinto partido y quedó el sinsabor de que los daneses estaban para más, pero ahora prometen quedarse en suelo qatarí hasta diciembre.
Es un cuadro parejo dirigido por el seleccionador Kasper Hjulmand, un hombre de acotada experiencia pero buen entendimiento con el grupo en el que destaca un apellido que los aficionados sabrán reconocer: Schmeichel. No es Peter, el porterazo de los años 90, sino su hijo Kasper, que parece ir encaminado a superar al padre.
El otro nombre al que conviene seguir es Christian Eriksen, el maduro volante ofensivo que para suerte del fútbol logró recuperarse de un padecimiento cardiaco que se le conoció en la Euro 2020 y llegar a Qatar con banderilla de estrella, con la calidad que despliega en Manchester United.
Posee un estilo de juego fluido, de presión intensa al rival y admirable capacidad de rotación en las líneas ofensivas, lo quer se suma al buen físico promedio de los jugadores y a la habilidad de de Hjulmand de plantear estrategias difíciles de leer para los rivales.