{"code":"24710","sect":"EF Acad\u00e9mico","sect_slug":"ef-academico","hits":"4129","link":"https:\/\/elfaro.net\/es\/202008\/ef_academico\/24710","link_edit":"","name":"La P\u00e1jara Pinta, \u00edcono de la radicalizaci\u00f3n intelectual en El Salvador","slug":"la-pajara-pinta-icono-de-la-radicalizacion-intelectual-en-el-salvador","info":"Durante siete a\u00f1os, La P\u00e1jara Pinta fue el veh\u00edculo de los escritores y poetas de la \u00e9poca para canalizar sus reclamos hacia el orden conservador salvadore\u00f1o. Desde sus p\u00e1ginas se reivindicaron hechos hist\u00f3ricos como la matanza ind\u00edgena de 1932 y se hizo un llamado a la revoluci\u00f3n.","mtag":"Cultura","noun":{"html":"Roger Atwood","data":{"roger-atwood":{"sort":"","slug":"roger-atwood","path":"roger_atwood","name":"Roger Atwood","edge":"0","init":"0"}}},"view":"4129","pict":{"cms-image-000034207-jpg":{"feat":"0","sort":"34207","name":"cms-image-000034207.jpg","link":"https:\/\/elfaro.net\/images\/cms-image-000034207.jpg","path":"https:\/\/elfaro.net\/images\/cms-image-000034207.jpg","back":"","slug":"cms-image-000034207-jpg","text":"<p>Este editorial, publicado en\u00a0diciembre de 1968,\u00a0marc\u00f3 hito en la radicalizaci\u00f3n de los intelectuales salvadore\u00f1os.<\/p>","capt":"\u003Cp\u003EEste editorial, publicado en\u00a0diciembre de 1968,\u00a0marc\u00f3 hito en la radicalizaci\u00f3n de los intelectuales salvadore\u00f1os.\u003C\/p\u003E"},"cms-image-000034208-jpg":{"feat":"1","sort":"34208","name":"cms-image-000034208.jpg","link":"https:\/\/elfaro.net\/images\/cms-image-000034208.jpg","path":"https:\/\/elfaro.net\/images\/cms-image-000034208.jpg","back":"","slug":"cms-image-000034208-jpg","text":"<p>Portada de <em>La P\u00e1jara Pinta<\/em> con una ilustraci\u00f3n del pintor salvadore\u00f1o Carlos Ca\u00f1as.<\/p>","capt":"\u003Cp\u003EPortada de \u003Cem\u003ELa P\u00e1jara Pinta\u003C\/em\u003E con una ilustraci\u00f3n del pintor salvadore\u00f1o Carlos Ca\u00f1as.\u003C\/p\u003E"}},"pict_main__sort":34208,"date":{"live":"2020\/08\/07"},"data_post_dateLive_YY":"2020","data_post_dateLive_MM":"08","data_post_dateLive_DD":"07","text":"\u003Cp\u003EDe 1966 a 1972, cuando el conflicto social en El Salvador estaba en r\u00e1pido desarrollo, la tribuna m\u00e1s influyente de escritores y artistas de vanguardia era una revista llamada \u003Cem\u003ELa P\u00e1jara Pinta\u003C\/em\u003E. Impresa en la UES, esta publicaci\u00f3n expresaba y fomentaba, como ninguna otra, los reclamos de la intelectualidad salvadore\u00f1a hacia los cambios radicales del orden conservador del pa\u00eds.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003EEn diciembre de 1968, al final de un a\u00f1o de huelgas e intensas presiones populares en El Salvador, y de sublevaci\u00f3n cultural y pol\u00edtica en todo el mundo, la revista public\u00f3 un editorial que marc\u00f3 hito en la radicalizaci\u00f3n de los intelectuales salvadore\u00f1os. Oficialmente era un texto en apoyo a la huelga de los profesores de ese a\u00f1o. Pero en verdad era un mensaje de advertencia a toda la sociedad de que los poetas, ensayistas y pintores que antes amenizaban sus salones y suplementos literarios ya no soportaban la represi\u00f3n militar y la hipocres\u00eda social, y se declaraban revolucionarios. No necesariamente con las armas en las manos a\u00fan, pero revolucionarios, en fin.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003E\u003Cbr\/\u003E \u003Cfigure class=\"pict pict_land pict_move_posc 0 cs_img cs_img--curr rule--ss_c\" data-shot=\"pict\" data-hint=\"pict\"\u003E \u003Cdiv class=\"pict__pobj text-overflow\"\u003E\u003Cimg src=https:\/\/elfaro.net\/get_img?ImageWidth=1773&ImageHeight=2415&ImageId=34208 class=\"pobj\" style=\"max-width: 100%\" rel=\"resizable\" alt=\"Portada de La P\u00e1jara Pinta con una ilustraci\u00f3n del pintor salvadore\u00f1o Carlos Ca\u00f1as.\" \/\u003E\u003C\/div\u003E \u003Cfigcaption class=\"pict__text cs_img_caption folk_content typo_buttons line--ss_s0c line--ss_s0c--auto block full-width text-overflow rule--ss_l relative\"\u003E \u003Cdiv class=\"__content block-inline full-width align-top tint-text--idle relative\"\u003E Portada de La P\u00e1jara Pinta con una ilustraci\u00f3n del pintor salvadore\u00f1o Carlos Ca\u00f1as. \u003C\/div\u003E \u003C\/figcaption\u003E \u003C\/figure\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003EParad\u00f3jicamente, \u003Cem\u003ELa P\u00e1jara Pinta\u003C\/em\u003E no comenz\u00f3 como una revista pol\u00edtica ni mucho menos revolucionaria. Fue fundada por el ensayista Italo \u003Ca href=\"http:\/\/rogeratwood.georgetown.domains\/\"\u003EL\u00f3pez Vallecillos\u003C\/a\u003E y el novelista Manlio \u003Ca href=\"https:\/\/www.loc.gov\/item\/89740474\/\"\u003EArgueta\u003C\/a\u003E, con el fin de enriquecer el nivel cultural del pa\u00eds y difundir textos de figuras literarias mundiales que eran poco conocidas en El Salvador, como Samuel Becket, Allen Ginsberg y Julio Cort\u00e1zar. El nombre, que ven\u00eda de un c\u00e1ntico infantil, adem\u00e1s de transmitir el rechazo a la pomposidad hac\u00eda honor al hecho de que la revista estaba impresa a colores. Tambi\u00e9n suger\u00eda vuelo, un toque intencional, ya que se enviaba al exterior como veh\u00edculo de difusi\u00f3n de escritores salvadore\u00f1os. El primer n\u00famero, publicado en enero de 1966, inclu\u00eda una traducci\u00f3n del \u201cManifiesto Po\u00e9tico\u201d de Dylan Thomas, un cuento de Mario Vargas Llosa y unos poemas del salvadore\u00f1o Jos\u00e9 Roberto Cea.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003ECea, nacido en 1939, \u00a0hab\u00eda sido una figura tard\u00eda para el grupo de poetas y ensayistas conocidos como la Generaci\u00f3n Comprometida. Su presencia indicaba otro de los prop\u00f3sitos de la revista: publicar nuevamente a un grupo de escritores que hab\u00eda surgido durante el breve florecimiento cultural en San Salvador a finales de los a\u00f1os 50. En el clima m\u00e1s represivo de los 60, casi todos estos escritores hab\u00edan sufrido el encarcelamiento o exilio, o ambos. Los suplementos literarios de los peri\u00f3dicos ya casi no los publicaban.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003ENinguno de los miembros de esta generaci\u00f3n sufri\u00f3 esa combinaci\u00f3n de boicot y asedio policial despu\u00e9s de 1960 como Roque Dalton, poeta detenido por la Polic\u00eda, al menos cuatro veces entre 1959 y 1964, y cuya voz po\u00e9tica pas\u00f3 a ser la m\u00e1s constante y caracter\u00edstica de \u003Cem\u003ELa P\u00e1jara Pinta\u003C\/em\u003E. Desde su exilio en Checoslovaquia, Dalton mand\u00f3 una serie de siete poemas que fueron publicados en \u003Cem\u003ELa P\u00e1jara Pinta\u003C\/em\u003E en diciembre de 1966 y que result\u00f3 ser el comienzo de un flujo constante de ensayos, cartas y poemas. Entre ellos su famoso \u003Cem\u003E\u003Ca href=\"https:\/\/www.poeticous.com\/roque-dalton-garcia\/buscandome-lios\"\u003EBusc\u00e1ndome l\u00edos\u003C\/a\u003E\u003C\/em\u003E, que apareci\u00f3 en el n\u00famero correspondiente a febrero de 1969, mes en que el libro del cual form\u00f3 parte, \u003Cem\u003ETaberna\u003C\/em\u003E, gan\u00f3 el premio Casa de las Am\u00e9ricas en Cuba.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003EAs\u00ed, se convirti\u00f3 en el \u00f3rgano, casi el \u00fanico, a trav\u00e9s del cual Dalton se comunicaba con los lectores salvadore\u00f1os durante sus a\u00f1os de m\u00e1s f\u00e9rtil producci\u00f3n. En una carta, L\u00f3pez Vallecillos incluso invit\u00f3 a Dalton a que se encargara de la edici\u00f3n de uno de los n\u00fameros de la revista desde su exilio praguense.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003E\u003Cem\u003ELa P\u00e1jara Pinta \u003C\/em\u003Etuvo adem\u00e1s un papel importante en el desarrollo de una conciencia sobre los acontecimientos de 1932. En la revista se publicaron algunos de los primeros ensayos, cuentos y poemas que rompieron con el silencio que a\u00fan reinaba sobre la brutal represi\u00f3n que hab\u00eda librado la dictadura de Mart\u00ednez al levantamiento campesino. En 1967 se public\u00f3 un trecho de la novela \u003Cem\u003ECenizas de Izalco\u003C\/em\u003E, de Claribel Alegr\u00eda y Darwin Flakoll, en forma simult\u00e1nea con la \u003Ca href=\"https:\/\/www.scribd.com\/document\/437575881\/Cenizas-de-Izalco\"\u003Eemisi\u00f3n\u003C\/a\u003E de la novela en Espa\u00f1a, y un cuento de Ricardo Castro Rivas que relataba una historia muy parecida a la Miguel M\u00e1rmol, a\u00f1os\u003Ca href=\"file:\/\/\/C:\/Users\/MaLu%20N%C3%B3chez\/Desktop\/Roger%20Atwood%20EFA.docx#_msocom_1\"\u003E[MN1]\u003C\/a\u003E\u00a0 antes de la publicaci\u00f3n de su testimonio por Roque Dalton. Esto es muestra, quiz\u00e1, de c\u00f3mo la historia de resistencia de M\u00e1rmol fue parte de la tradici\u00f3n oral mucho antes de pasar a la imprenta.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003EEl tiraje nunca super\u00f3 los mil ejemplares. Se distribuy\u00f3 en forma gratuita en los quioscos de revistas y librer\u00edas de San Salvador. A muchos lectores les atrajo, seguramente, la imagen a la moda de los a\u00f1os sesenta \u2013con colores sicod\u00e9licos y dise\u00f1os que recordaban los \u00e1lbumes de los Beatles\u2013 que le dio el pintor Carlos Ca\u00f1as,\u00a0 principal ilustrador de la revista.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003EA lo largo de sus siete a\u00f1os de existencia, pas\u00f3 de ser una apacible revista literaria a una publicaci\u00f3n que desafiaba de manera frontal el orden conservador que reinaba en El Salvador. Los editores y colaboradores incluyeron a j\u00f3venes de izquierda que pronto integrar\u00edan las filas de los grupos guerrilleros, como Salvador Silis, Jos\u00e9 Mar\u00eda Cu\u00e9llar y Eduardo Sancho. Este \u00faltimo fue uno de los fundadores del Ej\u00e9rcito Revolucionario del Pueblo y, posteriormente, firmante de los Acuerdos de Paz de 1992.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003EEl lenguaje que se desarroll\u00f3 en la revista fue otro de sus sellos caracter\u00edsticos: combinaba un anhelo de modernizar la poes\u00eda con un deseo ferviente de destronar el aplastante poder de la derecha. Los dos procesos iban de la mano. La poes\u00eda ya no era el pasatiempo de damas de sociedad y j\u00f3venes apol\u00edticos. La poes\u00eda era subversi\u00f3n.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003E\u201cPoes\u00eda en estos tiempos es para que te rompan el cr\u00e1neo. Hoy quieres pan, luego vas a pedir poes\u00eda. Poes\u00eda es subversi\u00f3n, es un \u00e1rbol con sus ra\u00edces desintegrando la piedra\u201d, escribi\u00f3 Sancho a finales de 1969, pocas semanas antes de integrarse a una c\u00e9lula clandestina. En los \u00faltimos n\u00fameros, Sancho trajo a un grupo de j\u00f3venes poetas-activistas de San Vicente, integrantes de la Brigada la Masacuata, quienes publicaron p\u00e1ginas enteras de poes\u00eda que expresaba el despertar revolucionario y la impaciencia ardiente de muchos j\u00f3venes salvadore\u00f1os. Estudiantes en Par\u00eds, Chicago y M\u00e9xico hablaban de revoluci\u00f3n, pero en El Salvador se trataba de una revoluci\u00f3n de verdad. Con tono casi mesi\u00e1nico, los poetas de \u003Cem\u003ELa P\u00e1jara Pinta\u003C\/em\u003E anunciaban que ven\u00eda algo nuevo. \u201cSostengo que a partir de este momento se empieza a gestar la nueva Poes\u00eda Revolucionaria en El Salvador. Se acabaron las improvisaciones. Los falsos quedar\u00e1n mentalmente encallejonados\u201d, escribi\u00f3 Silis en 1972. \u201cQue nadie diga que no est\u00e9 percatado del nuevo rumbo que va tomando\u201d.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003ELa evoluci\u00f3n de revista a tribuna de oposici\u00f3n se anunci\u00f3 en diciembre de 1968 con el \u003Ca href=\"http:\/\/rogeratwood.georgetown.domains\/files\/original\/81e543a0da6891a92c355a3617bab287.pdf\"\u003Eeditorial\u003C\/a\u003E ya mencionado en apoyo al magisterio en huelga. Pese a que no lleva firma, emplea t\u00e9rminos daltonianos para expresar desconformidad y la convicci\u00f3n de que el artista tiene que primero ser \u201caut\u00e9ntico\u201d para ser despu\u00e9s un revolucionario aut\u00e9ntico. Resalta una clara divisi\u00f3n entre escritores \u201creaccionarios\u201d y \u201cprogresistas\u201d, pero tambi\u00e9n critica al \u201cmecanismo seudo revolucionario\u201d, en referencia a los izquierdistas m\u00e1s sectarios. Dice:\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp style=\"padding-left: 60px; text-align: justify;\"\u003E\u003Cem\u003EEl intelectual salvadore\u00f1o est\u00e1 consciente de la injusta estructura social del pa\u00eds. Sabe que el \u00fanico camino para solucionar los problemas del pueblo es la revoluci\u00f3n popular y antiimperialista. Como ente pol\u00edtico, inmerso en la sociedad de la cual forma parte, est\u00e1 sujeto a influencias de toda naturaleza. El mismo no es sino producto del medio que trata de ahogarlo, de destruirlo; acaso porque el escritor es lengua viva de esa sociedad, y su palabra es fuego, y por qu\u00e9 no decirlo de una vez: su condici\u00f3n de hombre-artista, hombre-escritor conlleva la de ser la mala conciencia de su tiempo.\u003C\/em\u003E\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp style=\"padding-left: 60px; text-align: justify;\"\u003E\u003Cem\u003ECon su obra, testimonio y denuncia, el escritor, el artista aut\u00e9ntico coopera con la revoluci\u00f3n. Es ah\u00ed donde se muestra reaccionario o progresista. Ello, desde luego, si responde a una conducta honesta, a una visi\u00f3n del hombre y del mundo, m\u00e1s all\u00e1 del mecanismo seudo revolucionario.\u00a0\u00a0\u003C\/em\u003E\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003E\u003Cem\u003ELa P\u00e1jara Pinta \u003C\/em\u003E\u2013pionera, irreverente, por momentos brillante, e incre\u00edblemente longeva para una revista literaria\u2013 muri\u00f3 en la invasi\u00f3n del Ej\u00e9rcito a la ciudad universitaria de 1972. Manlio Argueta, su principal editor, evit\u00f3 por minutos ser detenido en el operativo y pas\u00f3 tres meses en la clandestinidad antes de lograr huir a Costa Rica, donde ya viv\u00eda L\u00f3pez Vallecillos como fundador de la editorial Educa desde 1970. Con la muerte de \u003Cem\u003ELa P\u00e1jara Pinta\u003C\/em\u003E y el asesinato de Roque Dalton casi tres a\u00f1os despu\u00e9s, se puede decir que termin\u00f3 la fase po\u00e9tica de la revoluci\u00f3n salvadore\u00f1a y se inici\u00f3 la etapa militar, que dur\u00f3 hasta la conclusi\u00f3n de la guerra en 1992.\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003E\u003Cbr\/\u003E \u003Cfigure class=\"pict pict_land pict_move_posc 0 cs_img cs_img--curr rule--ss_c\" data-shot=\"pict\" data-hint=\"pict\"\u003E \u003Cdiv class=\"pict__pobj text-overflow\"\u003E\u003Cimg src=https:\/\/elfaro.net\/get_img?ImageWidth=1757&ImageHeight=2387&ImageId=34207 class=\"pobj\" style=\"max-width: 100%\" rel=\"resizable\" alt=\"Este editorial, publicado en\u00a0diciembre de 1968,\u00a0marc\u00f3 hito en la radicalizaci\u00f3n de los intelectuales salvadore\u00f1os.\" \/\u003E\u003C\/div\u003E \u003Cfigcaption class=\"pict__text cs_img_caption folk_content typo_buttons line--ss_s0c line--ss_s0c--auto block full-width text-overflow rule--ss_l relative\"\u003E \u003Cdiv class=\"__content block-inline full-width align-top tint-text--idle relative\"\u003E Este editorial, publicado en\u00a0diciembre de 1968,\u00a0marc\u00f3 hito en la radicalizaci\u00f3n de los intelectuales salvadore\u00f1os. \u003C\/div\u003E \u003C\/figcaption\u003E \u003C\/figure\u003E\u003Cbr\/\u003E\u00a0\u003C\/p\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Chr \/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cbr\/\u003E\u003Cp\u003E\u003Cem\u003E*Roger Atwood posee una Maestr\u00eda en Historia de la Universidad de Georgetown (EE.UU.). Su tesis Our Word is Fire: Writers and Revolution at La P\u00e1jara Pinta, El Salvador, 1966-1975 se resume aqu\u00ed. Su libro m\u00e1s reciente es Coming of Age in a \u003Ca href=\"https:\/\/ugapress.org\/book\/9780820355320\/coming-of-age-in-a-hardscrabble-world\/\"\u003EHardscrabble\u003C\/a\u003E World (University of Georgia Press), como coeditor. Es adem\u00e1s cr\u00edtico literario del Times Literary Supplement de Londres y autor de la introducci\u00f3n a la primera antolog\u00eda de Roque Dalton a publicarse en el Reino Unido, Looking for Trouble: Selected \u003Ca href=\"https:\/\/smokestack-books.co.uk\/book.php?book=118\"\u003EPoems\u003C\/a\u003E of Roque Dalton (2016).\u00a0\u003C\/em\u003E\u003Cem\u003ESu reportaje en honor a la recientemente fallecida poetisa Irma Lanzas, de la misma generaci\u00f3n que los poetas de La P\u00e1jara Pinta, aparece en \u003Ca href=\"https:\/\/lazebra.net\/2020\/07\/29\/roger-atwood-soy-poetisa-una-tarde-con-irma-lanzas-cronica\/\"\u003ELa Zebra\u003C\/a\u003E.\u003C\/em\u003E\u003C\/p\u003E"}