Medardo González manifiesta inquietudes y preocupaciones en el quehacer del Ejecutivo en áreas como la económica, la de seguridad y las de corrupción y transparencia. Aunque dice que hay avances en otras áreas, en esas no. Y si acelera en estos puntos, el coordinador general y jefe de la bancada legislativa del FMLN también sabe pisar el freno: “La gobernabilidad tiene su precio y quiero respetar hasta dónde el presidente Funes ha apretado el acelerador”, dice, sobre una inminente reforma fiscal cuyos alcances aún no son públicos. Y después vuelve a dar otro frenazo cuando se le pide opinión sobre la relación de Funes con Nicolás Salume padre y algunas decisiones presidenciales relacionadas con el empresario: “En eso prefiero no meter opinión”.
Ahora que ya están en el gobierno, ¿qué sigue en el FMLN?
Esperamos ejecutar lo que tanto hemos anhelado: el programa... nosotros lo hemos venido hablando, es que el programa de Arena venía haciendo más pobres a los pobres, y concentrando más la riqueza en este país. La distribución de lo que se produce en el país es muy poco en relación con lo que se distribuye en el resto de los países de América Latina. Lo que hay que hacer es recoger un poco más y distribuir un poco más. Por cierto, un día después de nuestra celebración del 29o. aniversario, el 10 de octubre, estaba leyendo un titular que decía: los rojos quieren distribuir lo que no es de ellos... yo en realidad quiero decir que lo que el FMLN cree es que los que tienen mayores ingresos, pues hombre, tienen que pagarle al Estado impuestos para poder tener mejores servicios de salud pública, mejor educación pública, para tener policías mejor pagados, para eso sirve recoger los impuestos.
¿Y qué sigue en el FMLN?
Sigue ejecutar mejor el programa, buscar mejor educación, dar mejor servicio en los hospitales, eso sigue después de haber ganado.
Durante el último gobierno de Arena, ustedes lo criticaron porque era muy difícil distinguir entre gabinete y Coena, o militantes del partido y trabajadores del gobierno. Ustedes, como FMLN, prometieron no vaciarse en el gobierno y quiero entender su línea: ¿ustedes como partido se distancian del gobierno?
Después de ganar sigue tratar de ejecutar el programa, detener el neoliberalismo o lo que quedaba del neoliberalismo implementado por Arena y que comience el Estado a responsabilizarse de lo que le toca responsabilizarse. Ahora, agarrando esa parte de la pregunta que tú hacés... nosotros tenemos claridad total de que nosotros somos el partido político que ganó las elecciones, pero no somos gobierno, mucho menos Estado. Por supuesto, nosotros vamos a procurar que desde el gobierno se implemente lo que nosotros planteamos. En este sentido, creo que vamos caminando con el Ejecutivo. Aunque nosotros estamos claros que no somos el gobierno, no somos el Estado, tenemos responsabilidad, estamos en intercambio permamente con el presidente de la República sobre estos temas, de programa, de compromisos frente a la ciudadanía, en el caso particular de enfrentar la violencia.
Dice “nosotros no somos gobierno”. ¿El FMLN aspira a ser gobierno?
Tu pregunta me va a dar oportunidad de expresar algo que venía con ganas de expresar y opinar y aclarar. Nuestro concepto: nosotros estamos en gobierno, somos parte de un gobierno de alianza, junto a Mauricio, de hecho con Mauricio somos una alianza, todo mundo sabe que Mauricio no es un militante histórico del FMLN, ese nunca fue problema ni va a ser problema. Somos un gobierno de alianza. Podrá llegar a ser, si el pueblo así lo considera mayoritariamente y nos da su voto, que el próximo presidente de la República sea un militante del FMLN. Ahí viene el tema. Independientemente de si sea militante o no, nosotros tenemos una claridad: todo funcionario tiene el compromiso de cumplirle al pueblo de acuerdo con el mandato de la Constitución de la República. Nosotros no asumimos, cuando asumimos un cargo de responsabilidad, el mandato de defender el interés del partido, sino lo que la ley nos manda, lo que la Constitución nos manda. El funcionario del FMLN trata de cumplir esa responsabilidad. Aquel funcionario que haga lo contrario, o que haga a desgano su trabajo, pues es normal que se busque la manera de removerlo. Lo que estoy diciendo es que el partido sí debe estar vigilante que desde el gobierno se apliquen bien las políticas.
¿Las políticas pactadas con el aliado?
Con el aliado o con el militante. A nosotros lo que sí nos parece errado es que un partido político se crea dueño del gobierno, del Estado, y quiera agarrarse las instancias del Estado y gobierno para usufructo propio.
Veamos: Schafik Hándal tenía claro que no era lo mismo que el partido ganara a que fuera parte de una alianza, es decir, él aspiraba a que el partido fuera gobierno. En ese sentido, ¿el FMLN intentará ser gobierno?
Claro, claro.
¿Y tiene claro que ahorita todavía no es gobierno?
El partido está en un gobierno que es de alianza. Eso nosotros...
¿Es un paso previo a ser gobierno?
Es un paso previo, y nosotros vamos a aspirar a que el presidente del país sea un militante total de nuestro partido, por supuesto que lo vamos a buscar.
En este momento los liderazgos de la administración Saca están peleando con los liderazgos del presidente de Arena, Alfredo Cristiani. ¿Podría ocurrir eso en el FMLN? Tomando en cuenta que el partido tiene liderazgos propios, como usted, Ramiro Vásquez y Salvador Sánchez Cerén; y el presidente Funes, aunque no es líder histórico, ejerce un liderazgo en el partido.
No dentro del partido.
No dentro del partido. Dígame más líderes históricos en el FMLN.
Sigfrido Reyes, Orestes Ortez, Norma Guevara, Roberto Lorenzana, Lorena Peña, Nidia Díaz...
Vaya, esos liderazgos ya están crecidos dentro del partido. ¿Y el liderazgo que está germinando con Mauricio Funes no es dentro del partido?
No, no. Mauricio, y lo digo... por eso es que lo que tenemos es una alianza, porque él no es un líder interno del partido. Lo digo sin carga, simplemente es una realidad. Sin carga emotiva, ni para bien, ni para mal. Simplemente es así.
¿Es parte de la alianza, él lo tiene claro?
Lo tenemos claro.
Ya. Mire, ustedes tienen en el refrigerador un debate que se acerca, que es el de la elección de autoridades de partido. ¿Están hablando de renovación, de discusión de formas de elección...?
El tema de los liderazgos y elección de autoridades es diferente. Lo de la elección tiene que ver con autoridades internas de todo nivel, municipales, departamentales, sectoriales, de todo. Nosotros tenemos esa elección en el segundo semestre del próximo año...
¿Y aún no le están dando vuelta a eso?
En otros medios de comunicación otros compañeros han hablado, Ramiro habló de este tema, Roberto lo dejaba claro en otras intervenciones. En el Consejo Nacional le estamos dando tratamiento a estos temas y llegado su momento yo voy a explicar toda esta situación. El Consejo Nacional hace dos años tomó una decisión de suspender elecciones en el partido, esa medida fue genial y lo digo de esa manera porque nos perminió enfrentar a Arena, nuestra estrategia fue exitosa, la de ellos fracasó. Ahora en el Consejo Nacional creemos que eso no debe de repetirse, que debe de haber elecciones, pero eso no será este año.
Están pensando en elecciones internas, pero no para este año.
No es para este año, es para el otro.
¿Y qué pasará con Mauricio Funes?
¿En qué sentido?
Usted decía que Mauricio Funes no tiene un liderazgo histórico en el FMLN y que tiene un pacto con el partido, pero tiene un capital político importante en el FMLN. ¿ No hay forma de que ese capital político el presidente pudiera usarlo en elecciones internas?
Todos los partidos tienen una ley interna, no es una cosa mía, todos. En ese sentido, el FMLN tiene una ley que dice que tiene que haber una militancia, así están las cosas.
O sea que, al final, de forma prosaica se lo digo, ¿si lo ponemos en términos de votos, cada uno se llevará su parte por separado?
Sí, yo creo que sí, mire la experiencia de Arena: el presidente asumía el mando de todo y así eran las cosas en Arena, pero en nosotros no es así. De hecho, en nuestro caso, el presidente no es parte de la dirección del partido.
Por estatutos sí lo es.
Pero es distinto. El pueblo sabrá responder a eso, reconocer el esfuerzo del partido y el esfuerzo de Mauricio.
El gobierno está anunciando ya una reforma fiscal y su partido siempre ha dicho que los que tienen más deben pagar más impuestos. ¿Esta reforma está a la medida de lo que quiere el FMLN?
Creo que el paquete de reforma que hasta ahora conocemos es un paquete que va a ayudar y he escuchado al ministro de Hacienda decir que servirá para paliar un tanto la situación de déficit fiscal.
Pero...
Exacto, es insuficiente, todos los salvadoreños que estamos medianamente informados sabemos que es una reforma fiscal que todavía se queda pachita de acuerdo con las necesidades que el país tiene, pero a veces lo necesario no coincide con lo posible, y esta búsqueda de consensos no es nada fácil. En el FMLN no olvidamos la opinión del embajador de Estados Unidos, el señor Barclay, él decía que cada año en este país se esfumaban 900 millones de dólares en evasión y elusión, pero en realidad es robo del IVA que no se le entrega al fisco. Nosotros acompañamos esta reforma fiscal, aunque reconocemos que no es suficiente.
Un diputado del FMLN me comentó que en su archivo hay un pliego de propuestas de reformas listas para buscar votos y que no hace falta esperar el paquete de Casa Presidencial, que según él es un poco tibio para el partido.
Quiero respetar la decisión del presidente Funes de apretar el acelerador hasta donde él lo ha apretado. No me quiero meter más allá. En todo caso, creo que es no es un tema fácil, es como meterse a la cueva del lobo. Es un tema complicado, porque hay prejuicios de ambos lados. Y en ese caso, Mauricio tendrá razón de ir a tientas en este tema para no causar mayores dificultades en la gobernabilidad. Creo que la gobernabilidad tiene su precio y hasta aquí me quedo en eso.
Perfecto, pasemos a otro tema. El diputado Roberto Lorenzana me decía que por ética no tuviera al hijo de su principal financista como presidente de una institución del gobierno. ¿Usted qué opina y qué opina de que el presidente Funes le haya pedido a su financista de campaña que sea el primer designado a la presidencia?
Mire, yo a usted le respeto su interés de plantearlo de esta manera este tema, y respeto el interés de algunos lectores... pero creo que, yo como coordinador nacional del FMLN y como jefe de fracción del FMLN, sabiendo que estamos trabajando de la mano con el presidente Funes, así como está planteado de su parte, prefiero no meter opinión, decirle que yo respeto mucho esa decisión en cuanto a esto. El FMLN tiene opinión, pero no es en esta entrevista donde la daremos... también sobre los temas económicos, pero usted sabe que el FMLN no tiene ningún cargo de responsabilidad dentro del gobierno en la parte económica, ni en la parte hacendaria, ni en la de energía. Quiero decirle que se están dando pasos importantes en el tema social, se ha creado el Consejo Económico Social, el Consejo Nacional de Alimentos... Yo tengo inquietudes y preocupaciones en el tema de la seguridad, la economía, la corrupción, la transparencia.
¿Qué tipo de inquietudes?
En que compartimos un compromiso de hacer formas nuevas de hacer política, y han transcurrido cuatro meses, y aunque yo creo que este gobierno va para adelante, están en espera esos temas. El tema productivo también... el tema agropecuario es un tema terriblemente complicado.
Sobre la transparencia, ¿qué inquietudes tiene?
Quiero decirle que sobre ese tema se va a dar un paso dentro de poco, el Ejecutivo ha presentando iniciativas alrededor de la ley de transparencia.
Hay en la Asamblea un anteproyecto de Ley de Acceso a la Información que integra las propuestas de Fusades y del FMLN.
Es correcto, es correcto. Quiero decirle que aunque parezcan cosas sin mayor importancia, estas cosas sí tienen un gran impacto nacional. Creo que hay temas, como el que dice, sobre la parte ética, sobre esos temas vamos a ir avanzando poco a poco. Tanto el FMLN como el presidente Funes están comprometidos en eso, en avanzar, en hacer política de una manera distinta.
En seguridad no ha salido una idea contundente. Ustedes, desde la Asamblea lanzaban ideas como que hay empresas y personas que venden armas y ganan dinero de eso, y ellos son los que no quieren que se despistolice. Ahora que están en el gobierno y son bancada mayoritaria en la Asamblea parece más tibios. ¿Qué pasó con ese discurso que no se tradujo en acciones?
No, tibios no. Nosotros estamos planteando veda en la venta de armas.
Una veda temporal.
Sí, es que nosotros venimos planteando y sosteniendo que debe de haber mayores controles por parte de los municipios en esto de la portación de armas. Con respecto de la veda en la venta de armas, también tenemos propuesta en la Asamblea. Queremos y estamos de acuerdo con tomar medidas extraordinarias para enfrentar la violencia, en la lucha contra la delincuencia, apoyamos que hay que que darle más armas e instrumentos a la PNC, más instrumentos legales y materiales a la Fiscalía. Hay que tomar todas estas medidas.
¿Qué medidas o acciones pueden destacar en la lucha contra la delicuencia?
Se está trabajando con el Ejecutivo, con el presidente Funes. La Fuerza Armada va a tener mayor participación en todo este diseño, yo creo que el presidente Funes está trabajando con un concepto dinámico de seguridad y espero que le dé resultados.
Un último punto: hay 12 diputados que le dan al FMLN otra opción para buscar mayoría simple en la Asamblea. ¿Ya se puso en contacto con ellos?
Es muy importante para el país que estos 12 diputados digan “ya basta de apariencias”. Esto ya lo he dicho y lo repetiré: en el FMLN estamos a la expectativa de que pueda presentarse la oportunidad de poder entrar en acuerdos políticos con este nuevo grupo de diputados. No tienen que hacerse de izquierda ni nosotros de derecha para que podamos ponernos de acuerdo y así podamos acompañar al Ejecutivo en ciertas medidas. No nos hacemos ilusiones, pero sí creemos que puede presentarse la oportunidad de darle al país una nueva derecha, una con la que podamos romper esa cuestión nada más de conveniencia de pequeños grupos.