El Presidente del Consejo Ejecutivo Nacional de Arena, Alfredo Cristiani, notificó oficialmente al ex presidente Antonio Saca el inicio de su proceso de expulsión del partido. A través de una carta que publica este sábado La Página, Cristiani le comunica que las investigaciones internas han determinado que “durante su presidencia del Consejo Ejecutivo Nacional, y específicamente durante el proceso de selección del candidato del Partido a la Presidencia de la República… varios correligionarios fueron conminados por miembros del Consejo Ejecutivo Nacional a votar por uno de los precandidatos, específicamente el Ing. Rodrigo Ávila, y se abstuvieran de votar por otra precandidata, Doña Ana Vilma de Escobar”.
En la misiva, Cristiani le notifica que el COENA lo recibirá el 14 de diciembre a las 11 A.M. para respetar su derecho a audiencia.
El vicepresidente de ideología de ARENA, Jorge Velado, confirmó el envío de la carta y el inicio del proceso, aunque no se atrevió a calificarlo de expulsión. “La carta se le mandó ahora al ex presidente Saca. Pero no es cierto que se inicie un proceso de expulsión. Se trata del inicio de un proceso disciplinario que no necesariamente tiene que terminar en expulsión. El proceso se ha abierto a solicitud de una cantidad grande de gente del partido”.
Velado ofreció garantías de un proceso “limpio y transparente”, confirmando que se respetará el derecho a audiencia de Saca para además darle a conocer otras acusaciones en su contra. “La carta habla de los problemas en las elecciones entre otros hechos. Ahí le vamos a notificar sobre esos otros hechos. Nosotros queríamos manejar esto con discreción, pero alguien lo filtró a los medios. La sanción efectivamente puede ir desde suspensión hasta expulsión”.
El diputado arenero Mario Valiente confirmó la apertura del proceso y dijo que se daba después de que se le solicitó a Saca que voluntariamente renunciara al partido: “Se le pidió que se retirara y dijo que no, entonces se ha iniciado un proceso de acuerdo a como dicen los estatutos. Se le pidió que se retirara justamente para evitar el proceso”.
Al ser cuestionado por qué el partido le pidió a Saca su retiro, Valiente respondió: “No tiene que preguntármelo, usted sabe la razón. Tenemos que fortalecer al partido. Y para eso lo estamos limpiando”.
Velado no quiso confirmar la versión de Valiente, pero otro dirigente arenero que pidió el anonimato dijo que efectivamente se habían hecho todos los esfuerzos para evitar que esto se convirtiera en un escándalo. Entre ellos, solicitarle a Saca que se retirara.
Saca, que ejerció la presidencia de la República (2004-2009) simultáneamente con la presidencia de su partido, fue duramente criticado por otros liderazgos areneros por perder las elecciones presidenciales del 15 de marzo. Durante el proceso de selección de candidaturas, la entonces vicepresidenta y precandidata presidencial, Ana Vilma de Escobar, acusó a los colaboradores más cercanos al presidente de amañar el proceso a favor de Ávila.
Desde entonces, y tras el cambio en la dirigencia de ARENA, Saca ha sido el depositario de acusaciones y quejas del partido que lo responsabilizan de la grave situación política y financiera del partido. Después de haber gobernado durante cuatro periodos consecutivos, el ahora partido de oposición no llega ni al 15 por ciento en proyección de voto según las últimas encuestas; no tiene control de la Asamblea Legislativa; y tiene una deuda de más de 6 millones de dólares.
De acuerdo con la casa encuestadora Data Research, Saca sigue siendo el principal líder de la derecha política salvadoreña, considerado así por casi la mitad de los salvadoreños y muy por encima de quienes le siguen: Cristiani y Ana Vilma de Escobar, con 5,3 por ciento. Saca es también el expresidente mejor evaluado, por encima del propio Cristiani, que gobernó El Salvador entre 1989 y 1994 y en cuyo periodo se firmaron los Acuerdos de Paz.