Una de las armas utilizadas en el ataque contra el microbús de la 47 pertenece a la Policía y una de las decomisadas a uno de los acusados pertenece a una agencia de seguridad. El domingo 20, el Barrio 18 consumó una masacre en una escalada de su guerra con la MS. Ahora la Policía y la Fiscalía tendrán que superarse a sí mismas para pasar esta prueba.