La viceministra de Salud, Violeta Menjívar, y la subjefa de la bancada legislativa del FMLN, Norma Guevara, lamentaron la postura del presidente de la República, Mauricio Funes, en torno a una posible revisión de la penalización absoluta del aborto en El Salvador, un tema sumamente sensible en el partido de izquierdas, en el que hay sectores que esperan que la legislación se ablande.
Funes mantendrá en reserva -según dijo a mediados de la semana- la posición, dado que la Constitución reconoce la vida del ser humano desde el momento de la concepción.
Las dos funcionarias y dirigentes de la Comisión Política del FMLN increparon a Funes este domingo, al finalizar la jornada de votaciones en las elecciones internas de autoridades que dirigirán durante los próximos cinco años al partido.
La reacción de Menjívar y Guevara ocurrió cinco días después de que el presidente Funes regañara públicamente a Julia Evelyn Martínez, directora del Instituto Salvadoreño de la Mujer (Isdemu) por haber ratificado en nombre de El Salvador un convenio en el que el país se comprometió a hacer una revisión legal sobre el tema.
El 23 de agosto trascendió que El Salvador respaldó el Consenso de Brasilia, un documento que recoge las conclusiones y propuestas en favor de las mujeres, pero que también compromete a que se revise la legislación que castiga la práctica del aborto. El 16 de julio, la directora del Isdemu participó en la XI Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, realizado en la capital brasileña, organizado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) de las Naciones Unidas con el apoyo de la Secretaría de Políticas para las mujeres del gobierno del Brasil, en donde se discutió el tema. Pero el mandatario, un mes más tarde, la desautorizó por lo que allá fue a firmar.
“Yo no he dado ninguna orden, ni he dado ninguna instrucción para que se proceda a revisar la legislación, en materia de aborto”, le recriminó públicamente Funes a la funcionaria el miércoles 25.
Sobre el punto, Menjívar –miembro de la junta directiva de Isdemu- lamentó que no exista una comunicación y una coordinación entre las instancias del Ejecutivo y la propia Casa Presidencial.
“Una cosa que debemos superar en el gobierno es que seamos más coherentes. Lo que se plantea en el Isdemu donde está la secretaria de Inclusión Social (Vanda Pignato, primera dama de la República), la directora del Isdemu y los que conformamos la directiva seamos coherentes. Si en un momento la directiva del Isdemu dice una cosa y el presidente dice otra... creo que no hay una buena comunicación”, dijo Menjívar.
“Debería de tener correspondencia con lo que el Presidente está pensando, o deberíamos de platicarlo con él. En la directiva no recuerdo que le hayamos dado un mandato a ella (para firmar el documento), pero creo que ella está haciendo lo que debe (en esas instancias internacionales)”, añadió la viceministra de Salud y ex alcaldesa de San Salvador.
Para Norma Guevara, el problema con esos errores de comunicación adentro del gabinete es que “Él (el presidente) capta como que se pone en sus manos revertir algo y no es cierto que él lo tenga en sus manos. Y entonces sale a zanjar rápidamente. Debió de dar tiempo para discutir el tema”, dijo la diputada.
Menjívar y Guevara son de la idea que es oportuno discutir y revisar la legislación sobre la despenalización o no del aborto, pero concuerdan en que no es un tema de agenda ni siquiera adentro del FMLN, que ha tenido una posición errática –al igual que el mismo mandatario- sobre el tema.
“Es lamentable –la reacción del presidente- pero somos responsables de alguna manera”, dice Guevara. Ella se remonta a la primera legislatura del FMLN (1994-1997) cuando bajó la coordinación general de Facundo Guardado, el FMLN dejó al libre albedrío a sus diputados para que apoyaran o no una reforma al artículo 2 de la Constitución, en donde se plasmó que El Salvador reconoce la vida del ser humano desde el momento de la concepción.
“No es un problema solo del presidente. Nueve diputados del FMLN votamos en contra de aquella reforma pero al dejar que Facundo dejara en libertad de votar la reforma al artículo 2 de la Constitución, de alguna forma fuimos responsables de lo que hoy está en la Constitución. Sabemos que no es fácil de decir, pero ahí está la historia para que nos juzgue”, dice Guevara.
En El Salvador está prohibido el aborto en cualquiera de sus posibilidades, incluso por razones médicas.
Tanto Guevara como Menjívar son de la opinión que en aquellos casos de peligros de vida y salud tanto de la madre como del feto, así como en el caso de violaciones, el tema del aborto debería ser considerado como una opción para las madres. Según Guevara, con la aprobación de aquella reforma en la legislatura 1994-1997, El Salvador incluso retrocedió a lo que ya contemplaba el Código de Salud del país.
Pasados los años, el FMLN –reconocen ambas funcionarias- ya no discutió el tema, e incluso se vio cercado en 2008, cuando la Fundación Sí a la Vida puso a los 84 diputados de la Asamblea Legislativa a firmar un libro –una especia de carta compromiso- para no ir en la dirección contraria en el tema del aborto. En esa ocasión, los diputados del FMLN liderados por el hoy vicepresidente Salvador Sánchez Cerén firmaron el libro, para beneplácito de la Fundación, principal promotora de la prohibición total del aborto en el país.
“Más que firmar ese libro, si un pecado cometió el FMLN fue votar por esa reforma constitucional que echó atrás el Código de Salud”, dice la diputada Guevara.