Raúl Mijango, quien el martes se presentó como uno de los mediadores entre el supuesto acuerdo de paz entre las pandillas MS-13 y Barrio 18, hizo público este jueves un comunicado que, según su versión, fue elaborado por representantes de las dos agrupaciones.
El día 20, Mijango ofreció una conferencia de prensa junto con el obispo castrense Fabio Colindres, en las instalaciones de la Nunciatura Apostólica. En ella aseguraron que ambos habían servido como mediadores para propiciar un acuerdo de paz entre las dos principales pandillas de El Salvador.
En el comunicado hecho público por el excomandante guerrillero, se lee: “Desde el año anterior hemos iniciado internamente un profundo proceso de reflexión y análisis sobre los graves y acuciantes problemas que enfrenta nuestro país, de los cuales nosotros hemos sido parte, como consecuencia de la guerra que nos hemos visto obligados a librar por causas sociales de exclusión, marginación, represión y de sobreviviencia…”
En el comunicado se afirma que los pandilleros desean terminar con la guerra que ha cobrado miles de vidas. “Nosotros somos parte del problema, también podemos ser parte de la solución”, se afirma.
Mijango, que entregó el texto del comunicado a El Faro luego de un programa de radio este jueves por la noche, no explicó quiénes fueron los redactores ni a través de qué mecanismo el documento salió de los muros de las prisiones.
El ex guerrillero no detalló si el ministro de Seguridad Pública, David Munguía Payés, está al tanto del contenido del comunicado ni qué papel jugaron las autoridades del Ejecutivo en la redacción y difusión del mismo.
El comunicado empieza con un cuestionamiento contra El Faro y contra su director Carlos Dada. “Consideramos inaudito que existan personas como el periodista Carlos Dada, que se dan baños de pureza y profesionalismo, que pretendan jugar con la vida de nosotros y de otros tantos inocentes, con sus perversas y falsas aseveraciones sin considerar que con ello, lo único que provoca es ponerse a la baja altura moral que según él nosotros tenemos”.
El comunicado de las dos principales pandillas del país aparece una semana después de que el Ministerio de Seguridad y Justicia negó un acuerdo con las pandillas y atribuyó la reducción de los homicidios a la efectividad policial. En las primeras ocho semanas de 2012, el país tuvo un promedio de 93 homicidios cada siete días. Los siete días siguientes al jueves 8 de marzo, el promedio bajó a 44 homicidios. Eso implica una reducción del 53% de homicidios en solo una semana.
Este martes 20, la Iglesia Católica explicó que la reducción responde a un pacto entre ambas organizaciones criminales, aunque desmarcó al gobierno de esa negociación. Hace dos años, en julio de 2010, el sacerdote católico Antonio Rodríguez propuso un diálogo con las pandillas, pero lejos de hacer eco de su propuesta el gobierno lo destituyó de una Comisión Gubernamental para la Búsqueda de Niños Desaparecidos durante la guerra civil salvadoreña.
