En la que quizás fue la última sesión plenaria de la Asamblea Legislativa que termina funciones el 1 de mayo, los diputados de FMLN, Gana, CN, Partido de la Esperanza y los independientes Orlando Arévalo y Eduardo Gomar hicieron una sorpresiva reforma a la Ley del presupuesto 2012 para decidir que una veintena de legisladores, con cargo de presidentes de comisión, recibirán un aumento salarial de más de 800 dólares.
El aumento fue decretado a las 8:30 p.m. de este miércoles y sin discusión de por medio ni justificación técnica alguna. Lejos de eso, la moción fue presentada por un dirigente de CN con una explicación que tuvo una omisión importante: mencionar que la reforma que proponía incluía el aumento salarial.
El aumento se produce justo cuando el Fondo Monetario Internacional ha dejado sin efecto un acuerdo que tenía con El Salvador, por medio del cual se ponía a disposición del país hasta 750 millones de dólares en un crédito en caso de emergencia. El FMI, según reportó La Prensa Gráfica, suspendió tal acuerdo porque el Estado se ha excedido en sus gastos.
La agenda original de la sesión plenaria incluía nada más una propuesta de decreto, un dictamen favorable, así que parecía avecinarse una reunión rápida. Pero a medida que la sesión fue avanzando, una serie de legisladores fueron pidiendo la palabra para solicitar cambios imprevistos, a veces de tal nivel de importancia que incluían proyectos de reforma a la Constitución. Y dos de estas fueron aprobadas expeditamente, una para que el Estado reconozca los pueblos indígenas como una realidad del país y garantice sus derechos, y la otra, para que los partidos de derecha reformaran tres artículos de la carta magna con el fin de prohibir los matrimonios entre personas del mismo sexo. Ambas modificaciones quedaron hechas, pero para quedar firmes requerirán que la legislatura que arranca el 1 de mayo las ratifique con el apoyo de por lo menos 56 legisladores.
Sin embargo, la modificación de agenda que más controversia provocó fue la que introdujo a las 6:30 de la tarde el dirigente de Concertación Nacional, Francisco Merino, quien al presentarla no detalló todo lo que significaba la reforma a la Ley del Presupuesto que estaba pidiendo. En su intervención dijo que las enmiendas que proponía eran para reformar la Ley de Salarios de 2012 a fin de incluir un nuevo salario ampliado destinado al pago del miembro número 14 que tendrá la directiva de la Asamblea a partir del 1 de mayo. Agregó que otra de las modificaciones consistía en reducir el número de jefes de grupos parlamentarios de siete a seis, con tal de adaptarse al Protocolo de Entendimiento que firmaron la noche del martes.
Merino evitó mencionar otro contenido del decreto, que es el aumento de 828.58 dólares al salario de los diputados que en la próxima Asamblea estén a cargo de una de las 20 presidencias de comisiones legislativas. Con esta solicitud y una decena más de cambios en la agenda, la sesión plenaria avanzó hasta llegar a las 8:30 p.m. Entonces, Sigfrido Reyes, del FMLN, desde su silla de presidente, pidió votar por la pieza introducida por Merino y nadie argumentó ni en favor ni en contra del decreto de reformas a la Ley del Presupuesto. Con 62 votos favorables de los diputados efemelenistas, los de Gana, los del PCN, los del Pes y los dos independientes, quedó establecido que la Asamblea Legislativa tendrá 40 cargos legislativos con derecho a un sobresueldo por encima del salario básico de 4 mil 25.72 dólares al mes que tiene asignado un legislador.
La votación resultó con un voto en contra del diputado arenero Guillermo Ávila Qüehl, quien dijo que se oponía a la reforma porque era consecuente con su convicción de que un pacto de cómo funcionará la próxima legislatura le corresponde hacerlo a la próxima Asamblea, no a la saliente. Por lo tanto, una enmienda salarial que responde a ese pacto, también corresponde hacerlo a los próximos diputados.
Pasada la votación corrió el rumor de que la modificación que acababan de aprobar los diputados incluía el aumento para los presidentes de 20 comisiones. Si a estos 20 cargos se le agrega los sobresueldos que reciben desde hace dos años los jefes de grupos parlamentarios, y si a estos se añaden los 14 puestos directivos de la Asamblea siguiente, la nueva legislatura tendrá cargos de diputados con sobresueldo suficiente para cubrir a casi la mitad de los 84 legisladores: 40.
Con el aumento aprobado, los presidentes de comisiones devengarán honorarios de igual monto que los de los secretarios de junta directiva y los jefes de grupos parlamentarios: 4 mil 854.30 dólares. Los vicepresidentes tienen asignados 5 mil 225.15 dólares y quien ocupa la presidencia recibe 5 mil 781.72 dólares.
Diputado Machuca: 'Si no ganamos mucho... ¿qué son 800 dólares?'
Una vez consumada la reforma, comenzó la discusión sobre el aumento, con los diputados de Arena reclamando por lo que dijeron era una sorpresa para ellos. Les respondió el diputado Mario Tenorio, de Gana y secretario de la junta directiva: 'Su partido también se va a ver beneficiado, si tienen varias comisiones asignadas. La actitud de partido que no vota a pesar de que van a ser beneficiados es de doble moral', dijo Tenorio.
Ante los señalamientos, la diputada arenera Carmen Elena Calderón de Escalón se acercó a los periodistas para asegurarles que su partido desconocía que el pacto entre FMLN, Gana y CN incluía esos aumentos. 'Nosotros no hemos votado porque no somos parte de este combo. Nosotros ni lo conocíamos, a nosotros nadie nos había enseñado el decreto', dijo.
A partir del 1 de mayo, la Asamblea funcionará con 20 comisiones permanentes en lugar de 17. Y esto se deberá principalmente a una reforma propuesta por Arena, que pidió que la comisión de Economía, Agricultura y Ganadería se segmentara en dos. Además, pidió que se creara una nueva comisión sobre género, y que la comisión de asuntos financieros se vuelva permanente. Pero Calderón insistió en que eso no los hacía conocedores del pacto de aumento salarial.
Algunos diputados, como Rafael Machuca, de CN, fueron francos al recibir con los brazos abiertos el beneficio salarial, argumentando que es bien merecido por la carga laboral legislativa. 'Yo estoy contento porque si me dicen que me van a aumentar mi sueldo, yo estoy feliz. Y esto responde a la carga de trabajo porque aquí muchos de los que vienen a la Asamblea ven lo que de verdad hacemos. Los que van a las comisiones como presidentes tienen más responsabilidad que nosotros. Y a mí no me molesta, yo no voy como presidente de comisión pero si lo fuera, ¿por qué me voy a molestar? Me da mucho gusto y claro que es justo por la carga laboral. ¿Usted cree que estar haciendo reformas constitucionales y dictámenes es fácil? Claro que no'.
Machuca incluso habló con desprecio sobre la cantidad que se les aumentará a sus colegas. 'Si no ganamos mucho. ¿Qué son 800 dólares?'. Este diputado, que en la próxima Asamblea será secretario de la junta directiva, ha tenido en la legislatura saliente un récord de reiteradas inasistencias a las comisiones de trabajo legislativo, como reveló El Faro hace dos meses. En la comisión de Legislación, por ejemplo, su tasa de ausencias alcanzó el 45%, mientras que en la comisión de Seguridad Pública recibió una reprimenda del presidente del organismo por el retraso que él y otros faltistas provocaban en las labores de la comisión.
Los 800 dólares que para Machuca son poca cosa, son más de tres veces el salario mínimo salvadoreño (224 dólares), y casi triplican también el ingreso total máximo (292 dólares) que según el gobierno tienen el 36.5% de los hogares salvadoreños clasificados bajo la línea de pobreza.
En 2008 FMLN reclamó austeridad
La diputada del FMLN Lorena Peña, secretaria de la junta directiva y presidenta de la comisión de Hacienda, también defendió el aumento. 'Ellos (los presidentes de comisión) tienen una carga laboral diferente. Yo, como presidenta, y aunque a mí no me cae el aumento, tengo que preparar los documentos, hacer las investigaciones, y creo que estudio más que el resto. Me toca estar con el técnico detrás de todo. Yo voté por esto y creo que es correcto'.
El discurso del FMLN rompe con el planteamiento que el partido hiciera hace solo cuatro años, cuando en otra maniobra pactada a oscuras, la Asamblea Legislativa amaneció en 2008 con un aumento salarial generalizado para los diputados. El presidente de la Asamblea era el pecenista Rubén Orellana, quien iba a devengar ya no los 5 mil 700 dólares que tenía su puesto, sino más de 8 mil dólares.
A mediados de enero, un grupo de diputados del FMLN, entre ellos Roberto Lorenzana -hoy vicepresidente de la Asamblea- montaron una conferencia de prensa para revelar que el presupuesto del año 2008 para la Asamblea incluía el aumento, y que ellos no habían participado de tal decisión y no la apoyaban. Las indagaciones periodísticas de esas semanas no lograron develar cómo se había fraguado el aumento ni quiénes habían sido los autores intelectuales.
Cuatro semanas después del estallido del escándalo, el 11 de febrero de 2008, salió a la luz pública que los aumentos habían sido incluidos desde 2007 en el presupuesto de la institución el cual fue firmado en blanco.
Pasaron otras dos semanas hasta cuando, producto de la presión e indignación generalizadas, el aumento fue revertido, pero nunca nadie fue señalado como responsable de proponer y autorizar los incrementos salariales en un momento en que desde el Ejecutivo se proponía austeridad dadas las dificultades de la economía nacional.
Y precisamente el término austeridad fue el que utilizaron los diputados del FMLN para hacer una ofensiva mediática contra el aumento. Cuando el aumento fue de conocimiento público, el candidato presidencial efemelenista Mauricio Funes y los diputados del FMLN presentaron a la Asamblea Legislativa una pieza de correspondencia en la que solicitaban que los legisladores mantuvieran el salario que habían mantenido desde 2007. 'Como grupo parlamentario del FMLN siempre hemos insistido en la necesidad de que en las instituciones del Estado debe prevalecer la austeridad y que los funcionarios públicos, incluyendo a los diputados y las diputadas de esta Asamblea Legislativa deben abstenerse de incrementos salariales', reza el documento presentado en la ventanilla de recepción de correspondencia el 22 de enero de 2008.
Cuatro años más tarde, muchos de aquellos diputados del FMLN que rechazaban el aumento dieron sus votos este miércoles para una medida que implicaría un incremento de 16 mil 571 dólares en el presupuesto mensual de la Asamblea. Es decir, 132 mil 568 dólares durante los ocho meses que restan del 2012.
Muchos legisladores, como el subjefe de fracción de Gana, Rafael Paz Veliz, quien finaliza su período como diputado el 1 de mayo, justifican que este no es un incremento en el presupuesto de la Asamblea, por lo que no se debe 'satanizar' el aumento. 'En el presupuesto de la Asamblea de este año hubo incluso donaciones y otros aportes, o sea que no se está pidiendo un aumento al presupuesto de la Asamblea, va a salir del ahorro que se haga en papel, gastos varios, comida y viajes. Había que hacer una nivelación de acuerdo a la carga laboral y la realidad económica del país'.
En materia de salarios legislativos, la Asamblea Legislativa tiene autonomía, de tal manera que el decreto que consigna los aumentos no necesita el aval del presidente Mauricio Funes para convertirse en ley. Lo único que la Constitución demanda de los diputados es que consulten al gobernante con el único propósito de asegurar que el Estado tiene fondos disponibles para el pago de los incrementos salariales.
La sesión plenaria terminó cerca de la medianoche, cuando después de la reforma a la Ley del Presupuesto y de dos reformas constitucionales los legisladores fueron agotando una agenda construida sobre la marcha. 'Esta podría ser la última sesión plenaria de esta legislatura', dijo Sigfrido Reyes en un momento, preludiando el final de un ciclo. Varios legisladores pidieron la palabra para desearse éxito y expresarse cariño, y al final Reyes pidió un aplauso de pie para aquellos diputados que ya no estarán en el período 2012-2015.