El presidente interino de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció este sábado que los exembajadores estadounidenses Roger Noriega y Otto Reich junto a la 'derecha salvadoreña' están detrás de una conspiración para asesinarlo y sabotear la red eléctrica del país, antes de las elecciones del 14 de abril, en la que es el candidato oficialista. El canciller venezolano, Elías Jaua, acuerpó estas declaraciones y señaló que el diputado Roberto d’Aubuisson, de Arena, lidera un equipo contratado por la derecha venezolana para sabotajes a las elecciones en el país suramericano.
El 'objetivo es matarme a mí, ellos me quieren matar porque saben que no me pueden ganar unas elecciones libres. Detrás de esto están las manos de Roger Noriega y Otto Reich, y está la derecha salvadoreña que ha mandado unos sicarios pagados por ellos para asesinarme', dijo Maduro durante un acto electoral transmitido por el canal estatal VTV. Mientras tanto, el canciller venezolano fue entrevistado por la cadena de noticias Telesur y ahí responsabilizó al hijo del fundador de Arena de liderar uno de los tres equipos de desestabilización detectados por la inteligencia venezolana. Agregó que habían interceptado una conversación entre d’Aubuisson y uno de los salvadoreños contratados para el sabotaje. Jaua anunció que publicarían la conversación íntegramente en las horas siguientes a la entrevista, lo cual hasta el cierre de esta nota no había ocurrido.
Arena ha dicho que no emitirá un pronunciamiento oficial pero a través de sus cuentas de Twitter, voceros y autoridades criticaron lo que consideraron una muestra de “poca madurez” política. Ironizando sobre las aseveraciones de Maduro, el propio Roberto d'Aubuisson hijo escribió: '¿Por qué Maduro habla con 'pajaritos' y Jaua lanza cortinas de humo? Porque Capriles está arriba en encuestas'. Jorge Velado, presidente de Arena, escribió: “¿Se lo habrá dicho el pajarito?”, en alusión a cuando el candidato oficialista dijo que había sentido el espíritu de Chávez en el canto de un pájaro. El segundo al mando en Arena, Ernesto Muyshondt, escribió: “El loco ‘presidente’ y candidato de Venezuela q ve ‘pajaritos’ que hablan, hoy también ve ‘conspiraciones’ orquestadas por la derecha salvadoreña”.
Maduro señaló que el 'grupo de mercenarios han entrado al país' y planean además aumentar los homicidios para 'exacerbar el temor público' y 'seguir saboteando' la red eléctrica venezolana en los días previos a los comicios. Jaua expresó que “tenían datos precisos que vinculan a elementos salvadoreños con el comando y la dirección política de la oposición para generar perturbación'. El gobierno venezolano acusó al líder opositor Henrique Capriles, de estar detrás del plan conspirativo mediante otros grupos de apoyo. 'Están conspirando de lo lindo', añadió Maduro, señalando que el gobierno venezolano evaluará 'la medida diplomática que corresponde'.
En la entrevista con Telesur, Jaua explicó que solicitaría al gobierno salvadoreño, a través del ministerio de Relaciones Exteriores, una colaboración para investigar esta red de sabotaje en la que además de d’Aubuisson están otros dos salvadoreños identificados como David Koch Arana, quien se supone dirige otro de los equipos detectados, y Guillermo Cader Acuña, un exdirigente del partido Arena cuya labor no quedó del todo dibujada. “Estos dos han venido contratando a mercenarios en El Salvador y en Centroamérica para infiltrar Venezuela”, dijo Jaua mientras que un comunicado emitido por el gobierno venezolano indicaba que las investigaciones habían arrojado la participación del salvadoreño Francisco Chávez Abarca, quien en el 2010 habría sido capturado en Venezuela, tras un intento de ingresar bajo documentación falsa y ejecutar acciones para el sabotaje.
El canciller Jaua leyó un extracto de lo que se supone fue una conversación entre d’Aubuisson y Koch. La ubicación, la fecha y el origen de la misma no fue compartido pero se supone que fue obtenida por agentes de inteligencia venezolana.
D’Aubuisson: ¿Cómo están en el sur? Aun no me han pasado el informe que dice C. ¿Le están sirviendo los informes que estamos enviando?
Koch: Yo tengo los informes, pero no los envié porque se los estaba separando pero ya están. Han lanzado una cacería, supuestamente les han informado al estado venezolano que hay gente infiltrada que está interfiriendo en los asuntos políticos. Capriles ha logrado conseguir lugares seguros para que la gente nuestra esté tranquila. El equipo ya les llegó y un grupo ya está trabajando en la calle para desorienter el voto.
D’Aubuisson: ¿Les dijiste que se haría como trabajamos en la campaña aquí . Solo que tengan cuidado recuerden que ellos ya ofrecieron su apoyo si ganan y eso sí nos conviene. No sé cómo están trabajando los otros grupos que mandaron de aquí, pero espero que no se choquen o tengan conflicto pues no se conocen. Hablaré con ellos para ver cómo nos organizamos para las operaciones conjuntas.
David Koch Arana es un exmilitar a quien el gobierno venezolano relaciona con los Escuadrones de la Muerte que operaron durante la guerra civil salvadoreña. Francisco Chávez Abarca es un anticastrista que confesó haber cometido actos terroristas en Cuba contra el régimen comunista. Cuando fue capturad en 2010 de inmediato fue extraditado a Cuba por los atentados terroristas de los que fue responsable en 1997 y que le costaron la vida a un italiano y que fueron ordenados por el anticastrista Luis Posada Carriles, un exagente de la CIA que tuvo su base de operaciones en El Salvador y que intentó asesinar a Fidel Castro en la década pasada durante una cumbre de presidentes en Panamá.
Koch Arana es el apoderado de una empresa de seguridad con sedes en toda Centroamérica y en Miami, denominada Corporate Security Consultants, creada en septiembre de 2007. La empresa también tiene sede en el Reino Unido. Koch Arana fue detenido en agosto de 2010 por la posesión de un arma de guerra sin los permisos requeridos, en Sonsonate, y en noviembre quedó en libertad condicionada. Por su parte, Cader fue dirigente del partido Arena desde 2009 hasta que en 2011 renunció por estar en desacuerdo con el nombramiento de la candidata a alcaldesa en Santa Ana para los comicios de 2012. También fue candidato a una diputación por Santa Ana en 2009.
Maduro ya había acusado a Noriega y Reich de planear un atentado, pero en contra de la vida de Capriles, con el fin de causar desestabilización en Venezuela y 'promover posteriormente una intervención extranjera', y pidió al mandatario estadounidense Barack Obama detenerlo. Washington respondió expulsando a dos diplomáticos venezolanos. Washington y Caracas no tienen embajadores desde 2010.
La cancillería salvadoreña dijo que está buscando que el ministro de Relaciones Exteriores siente una postura al respecto. La embajada de Venezuela en San Salvador, mediante un vocero, dijo que no se pronunciaría al respecto.
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