¿Por qué cambió el diseño del bulevar Diego de Holguín?
En cuestiones de diseño y como se hacen las cosas hay diferentes formas de hacerlo, por los análisis de los técnicos se tomó esa decisión. Dentro de la Escuela Militar también es un sector, una tierra que tenía sus árboles y quizás árboles de más años que los que habían ahí que eran cafetos. Además, de los intercambiadores lo único que iba a estar pavimentado era donde iban a pasar los carros, todo lo demás iba con lomas verdes donde se iban a sembrar árboles. En ese tiempo lo que sucedió es que se politizó el tema, pero en enero de 2007 estábamos listos para entrarle y ejecutar la obra, pero lamentablemente por quebrantos de salud yo tuve que renunciar.
Usted tiene un permiso del Ministerio del Ambiente de septiembre de 2006, pero para entonces los árboles ya están talados…
Lo único que le puedo contestar a eso es que ya fui juzgado por la cuestión de los palitos, de los arbolitos, ya está claro. La Corte Suprema ha dictaminado varios años atrás que cuando se hace una obra de beneficio nacional, el Ejecutivo puede hacerlo. Cuando se va a hacer una carretera como la Diego de Holguín, que está trazada y aprobada desde hace mucho, tiene uno que analizarla y ver si todavía está vigente de acuerdo con las necesidades actuales y se hacen las modificaciones para hacer una obra que valga la pena porque si no sería como tirar dinero al agua.
Hablemos de la licitación. ¿Por qué aumentó el anticipo de la obra del 20 al 30 %?
Al 25 %.
Los documentos que tengo del MOP hablan de que se entregó un 30 % de anticipo sin que las constructoras lo pidieran.
En primer lugar sí fue solicitado por las constructoras, la documentación está en el MOP. En segundo lugar, la ley permite hasta el 30 % de anticipo para que las obras comiencen a ejecutarse. Creo que el señalamiento no es válido, mientras estuve en el MOP actué de acuerdo con la ley.
Cualquiera pensaría que darle dinero a alguien sin que lo pida es un favorecimiento…
Todas las cosas que se hacen pueden darse a interpretaciones de todo tipo, yo estoy ceñido a que en mi administración actuamos de acuerdo con la ley.
Y esos desembolsos, y ese seguimiento al desarrollo de la obra, ¿por qué no está documentado?
Lo que creo es que se dicen un montón de cosas porque aquí en nuestro país, desgraciadamente, cualquiera dice cualquier cosa.
Lo que le estoy diciendo está consignado en un estudio legal del MOP.
Eh, yo puedo contestarle a usted de que la comisión evaluadora, cuando delibera, nadie puede intervenir ni siquiera conversar con ellos sobre el tema y ellos al final dictaminan quién es el ganador de una licitación a través de los diferentes índices que previamente se han aprobado para que la comisión pueda ejecutar las evaluaciones. La comisión dictaminó quién era el ganador.
¿Por qué, incluso, se han encontrado deficiencias en la construcción del tramo I?
Bueno, en primer lugar me está hablando del tramo I. El tramo I estaba en construcción en ese momento, igual que el II, ciertamente, lo que usted me está mencionando se da en el contexto de que la supervisión para eso es contratada, para garantizar la calidad de las obras que están haciendo las empresas y si hubo ese señalamiento en noviembre de 2006 es el proceso correcto, ya sea la supervisión interna del Ministerio o ya sea la empresa que ganó la licitación para la supervisión, cuando detecta un problema técnico de construcción, cualquiera que sea, se le informa a la empresa de la problemática y se le exige que arregle dicha problemática. Definitivamente tuvo que darse la orden para que eso se arreglara como cualquier otro tipo de problema.
¿Y solucionó ese problema?
Lo que sucede es que uno está llevando un sinnúmero de proyectos al mismo tiempo y en ese sentido pues para eso hay un viceministro de Obras Públicas, que es el ejecutor, para eso están los directores, los ingenieros, la supervisión y todo eso queda por escrito y queda en bitácora, yo en este momento le mentiría si le digo si recuerdo ese punto específico.
Y el tramo II, ¿por qué quedó a media construcción?
Quiero decirle que en el contrato que yo firmé como ministro de Obras Públicas en el período 2004 hasta el 18 de diciembre de 2006 para la obra Diego de Holguín tramo II, y también el tramo I, decía claramente que era un contrato llave en mano, o sea que no se pueden cambiar las cantidades, ni nada, y dentro de ello el diseño que en cualquier obra cuando las obras van caminando y hay cualquier problema se acepta ciertas modificaciones, por eso es que el diseño final es casi cuando está terminada la obra, pero en esta modalidad llave en mano no hay forma de hacer ni cambios en cuestiones de dinero ni de otro tipo. Le menciono esto porque en mi contrato no se aceptaban arbitrajes, cuando llegué al MOP habían deudas pendientes por arbitrajes que se habían perdido, hice los análisis con el equipo y nos dimos cuenta de que era mejor irnos por otro camino para no tener problemas de ningún tipo, en ese sentido tomé la decisión de que en todos los contratos que se iban a realizar bajo mi administración no se iba permitir el arbitraje.
¿Y usted sabe por qué el MOP siempre perdía los arbitrajes?
Bueno, eso… por lo menos esa es la decisión que yo tomé al hacer mis análisis y la prueba está en que nunca tuve un problema legal con ninguna empresa y todas las obras que iniciamos las terminamos.
Excepto, por supuesto, el Diego de Holguín…
Pero estaba caminando, cuando la entregamos estaba caminando, sin ningún problema hasta ese momento, a excepción de las dos rampas de intercambiadores que se necesitaban en el trébol y de que, momentáneamente se había parado en ese tiempo porque había una denuncia de la alcaldía de San Salvador. Sin embargo, estábamos seguros de eso, el contrato está claro: no arbitraje. Después de eso, en febrero de 2007, ya el ministro Jorge Nieto amplía el tiempo para poder finalizarla, pero después hay un cambio en el cual el ministro Nieto cambia el contrato y permite el arbitraje y después se fueron a un arbitraje, pero en mi gestión, en mi administración, quiero ser contundente en eso, no se permitían los arbitrajes de ningún tipo, nos íbamos a los tribunales comunes. Si yo hubiera seguido -debido a mi salud no pude- yo hubiera terminado esa obra en el año 2007.
¡¿Usted iba terminar el Diego de Holguín en 2007?!
Tal como estaba programada con la ampliación de tiempo que hizo el ministro Nieto.
Pero cuando usted salió del MOP ya era una obra con retrasos…
Cómo no, había algunos atrasos cabalmente porque habían problemas para el inicio de las rampas, por supuesto que sí.
¿Por qué no concluyó la obra?
Bueno, le puedo contestar que más que las palabras son las obras las que hablan. En mi gestión entregamos el 90 y pico % de las obras a tiempo, ejecutamos todas las obras en el tiempo.
Pero el Diego de Holguín no está en ese 90 % de obras que caminaban y entregaban.
Lo único que puedo mencionar es que no creo en los arbitrajes. Por otro lado, eh, eh, también depende del compromiso y del trabajo y del acompañamiento y supervisión del equipo.
Ustedes pagaron por una obra que no existe.
Bueno, yo nada más puedo responder sobre el dinero erogado en el tiempo que yo estuve como ministro desde que se inició la obra. El resto lo tendrá que responder el ministro Nieto, quien se quedó como ministro.
¿El Diego de Holguín estaba avanzando en su construcción?
Es correcto, en mi momento había avances y los avances que se dieron dentro de la obra y fueron cancelados están debidamente documentados en el MOP.
Entonces, si la obra estaba avanzando durante su gestión, eso quiere decir que su sucesor es el culpable.
Bueno, eso habría que preguntárselo a él.
Pero el MOP ha presentando un informe a la Asamblea Legislativa en el que habla de irregularidades desde su gestión.
Él (Gerson Martínez) acababa de entrar, verdad, eh, y quizás no estaba bien informado y no había visto toda la documentación que está ahí dentro del Ministerio de Obras Públicas sobre la ejecución de esa obra bajo mi administración y creo que es bueno, tal como se lo estoy comprobando con documentación, que actuamos dentro de la ley, que cuando yo renuncié y salí estaba en ejecución y que en febrero de 2007 el ministro Nieto prolongó el tiempo, bajo el mismo contrato que era llave en mano. Posteriormente hubo un cambio que permitía el arbitraje, eso pregúnteselo al ministro Nieto.
No pretendo defender al exministro Nieto, pero la lógica me indica que si extendió el plazo es porque había retrasos durante su gestión.
Es correcto, la ampliación de dos rampas más, además hubo casuales de fuerza mayor que permitían ampliar el tiempo, era necesario ampliar el tiempo bajo ese punto de vista y el ministro Nieto lo amplía.
¿Y usted informó algo de esto al expresidente Saca?
Inmediatamente después de tomar esa decisión para todos los contratos yo le informé al presidente Saca que iba a hacer ese tipo de contratos en mi administración.
¿A quién se benefició con modificar el contrato y permitir arbitrajes?
Eh, yo nada más puedo responder sobre la gestión que hice como ministro durante mi tiempo, lo que sucede en otros tiempos es competencia del ministro que está en ese momento, él es el que puede responderle a estas preguntas de cómo, cuándo, dónde se modificó y por qué.
Pero acaba de decir que el jefe de Nieto, el presidente Saca, ya sabía que en esta obra no habría arbitraje.
Bueno, esa fue una comunicación que se le dio al inicio y no solo era para este contrato, era para todos los contratos durante mi administración. En mi gestión, gracias a Dios, no se dieron ningún tipo de conflictos de ese tipo, todos los logramos solventar.
¿A quién le interesaría una media mentira en el caso del Diego de Holguín?
Uno puede pensar en un montón de cosas. Es lógico preguntar quién está detrás, qué se pensó, pero yo le voy a decir: primero, estoy tranquilo y consciente de que actué bien. La gran ganancia es que nos ha acercado a Dios.
¿Usted ha sentido respaldo de la administración Saca en lo del Diego de Holguín?
Habría que preguntarle a él.
¿Volvería a un cargo público?
(Sonríe y se retira).