Tegucigalpa, HONDURAS. “Estamos trabajando fuerte en (la compra de) los radares con el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad, esperando que a final de año tengamos estos insumos”, declaró a la prensa el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, general René Osorio.
Además, indicó que en dicho Consejo –integrado por el presidente Porfirio Lobo, varios ministros, autoridades judiciales y del Congreso– se analiza la posibilidad de obtener un préstamo “blando” para financiar la compra porque “estamos hablando de 30 millones de dólares”.
“Se está analizando la compra a Israel” y también “se mencionaba que la compra se haría a Ucrania” pero “son radares nuevos, un radar con capacidad para 360 grados y dos radares pequeños adicionales”, añadió el jefe castrense.
Sin embargo, el ministro de Defensa, Marlon Pascua, dijo que también hay ofertas de Francia, España, Holanda y Argentina.
Anteriormente, para la intercepción de avionetas que transportan drogas, Honduras utilizaba información captada por radares que Estados Unidos tiene emplazados en la zona.
Sin embargo, Washington desistió de dar esa información a Honduras desde hace un año, luego de que aviones de la Fuerza Aérea Hondureña derribaron una aeronave en la que murieron dos tripulantes, entre ellos un posible agente infiltrado de la agencia antidrogas estadounidense (DEA).
El incidente no afectó el trabajo conjunto que autoridades militares, policiales y de la Fiscalía desarrollan con la DEA, en la lucha contra el narcotráfico.
En lo que va del año, las autoridades de los dos países han destruido más de 70 aeropistas clandestinas en los departamentos de Gracias a Dios, Olancho y Colón.
Informes oficiales estadounidenses indican que un 90% de la droga que es enviada desde Sudamérica a Estados Unidos utiliza el istmo centroamericano como punto de paso y almacenamiento.
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