El pasado cuatro de noviembre, la Cámara Primera de lo Penal amplió el período de investigación en contra del expresidente de la República Francisco Flores, acusado por la Fiscalía General de la República de desviar millonarios donativos de Taiwán para financiar la campaña presidencial del partido Arena a finales del año 2003 y principios del 2004.
Bajo el argumento de que se trata de un caso de 'complejidad”, los magistrados concedieron seis meses más a la Fiscalía para investigar al expresidente por los delitos de peculado, enriquecimiento ilícito y desobediencia. La audiencia preliminar en la que se decidirá si Flores enfrenta un juicio o si es exonerado se programó para el seis de mayo del próximo año.
¿Por qué los magistrados dieron más tiempo para investigar a Flores? ¿Cuáles son los documentos clave que conoce y desconoce el juez del caso? ¿Cuáles son las pruebas que la Fiscalía aún tiene que recabar en Costa Rica y Estados Unidos para reforzar su acusación contra el expresidente? A finales de octubre el juez del caso, Levis Italmir Orellana, dictó una resolución que ordena a la Fiscalía una serie de diligencias. Esa resolución es, en este punto del proceso, un recorrido ordenado por las preguntas del caso Flores que siguen sin respuesta.
1. ¿Dónde está el Reporte de Operación Sospechosa?
A finales de octubre del año pasado, el expresidente Mauricio Funes reveló en su programa “Conversando con el Presidente” la existencia de un Reporte de Operaciones Sospechosas (ROS) en contra del expresidente Francisco Flores por una millonaria transacción en el International Bank of Miami, Estados Unidos.
El ROS fue emitido por el Financial Crimes Enforcement Network (FinCEN), del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, en octubre del 2003, y fue notificado a la Fiscalía salvadoreña que entonces dirigía el fiscal general, Belisario Artiga. La administración de Artiga no promovió ninguna investigación en contra del expresidente Flores.
El 18 de junio de 2013, cuando la Fiscalía investigaba el caso CEL-Enel, pidió un informe al FinCEN y el ROS en contra de Flores apareció de nuevo. Según la Fiscalía, el International Bank of Miami, con sede en Coral Gables, reportó la operación por sospechas de lavado de dinero. “Luego de verificar lo pertinente para hacer efectivo el pago, (el banco) hace un análisis de la operación por lo que decide reportarla por tres razones de peso: la primera que existía contradictoria en lo manifestado para justificar la operación, ya que se manifestó que el dinero era para financiar la campaña política del beneficiario de los cheques (lo que no era posible, por no existir la reelección en nuestro país, lo que así determinó el banco que hizo el ROS)”.
Los cheques estaban a nombre del “Excmo. Sr. Francisco Guillermo Flores Pérez, Presidencia de la República de El Salvador”, y habían sido girados desde una cuenta en The International Bank of China, con sede en Nueva York, Estados Unidos. Esa cuenta está a nombre de la Embassy of The Republic of China San Salvador. Cuando el expresidente Flores recibió esos cheques le faltaban siete meses y una semana para dejar el gobierno.
Un informe que elaboró la Fiscalía en octubre del 2013 consigna tres versiones de por qué el International Bank of Miami reportó la operación financiera de Flores al FinCEN: primero, porque se intentó justificar la operación argumentando que se trataba de una “donación” de Taiwán para la campaña presidencial; segundo, que eran fondos para un proyecto de reparto de tierras para pobres en El Salvador; y tercero que la ruta del dinero incluía un banco de Bahamas, país etiquetado como un paraíso fiscal.
Un año después de que la Fiscalía recibió la información del FinCEN, y un año después de que el expresidente Funes reveló la existencia de ese documento, el juez que procesa al expresidente Flores, Levis Italmir Orellana, aún no ha tenido acceso a ese documento. “Previénese por segunda vez a la representación fiscal, para que incorpore el Reporte de Operación Sospechosa (ROS) por sus siglas en español o (SAR) por sus siglas en inglés, emitido en el mes de octubre del 2003, por el International Bank of Miami, con sede en Coral Gables, Florida, Estados Unidos, que involucra al imputado Flores Pérez en su calidad de expresidente de la República”.
No es la primera vez que el juez Orellana pide ese documento. El 23 de mayo de 2014, cuando recibió el caso, el juez ordenó a los fiscales de la Unidad de Investigación Financiera (UIF) varias diligencias de investigación. En uno de los apartados el juez pidió explícitamente que los fiscales le entreguaran el ROS, algo que hasta la fecha no ha sucedido.
Para los querellantes de FESPAD e ISD, el ROS es un documento “de suma relevancia para establecer la verdad real de los hechos investigados”. Los acusadores dicen que el documento del International Bank of Miami permitirá establecer cuáles fueron los motivos por los cuales la operación financiera fue reportada al FinCEN, cuál fue la cantidad reportada, en qué fecha exacta, a quién iba dirigido y cuál era el objetivo declarado del mismo.
2. ¿Quién autorizó el traspaso de fondos desde Costa Rica hacia la cuenta de Arena?
Los 10 millones de dólares que Taiwán entregó al expresidente Flores fueron depositados en una cuenta bancaria que el Centro de Estudios Políticos “Dr. José Antonio Rodríguez Porth” (CEP) tenía en el Cuscatlán International Bank & Trust LTD, en Costa Rica. Entre noviembre de 2003 y abril de 2004, desde esa cuenta bancaria se realizaron once transferencias cablegráficas hacia una cuenta del partido Arena en El Salvador.
La Fiscalía sabe que Arena recibió dinero del CEP gracias a una asistencia internacional que solicitó a las autoridades costarricenses. Sin embargo, los documentos entregados por Sergio Serrando Delgado, gerente de canales y distribución de banco Citibank de Costa Rica, están incompletos y, por ejemplo, no permiten establecer quiénes ayudaron a Flores a depositar los fondos en Costa Rica y después transferir el dinero hacia El Salvador.
El juez Orellana ha pedido a los fiscales que gestionen ante la autoridad competente en Costa Rica los documentos de soporte de las transferencias cablegráficas en el período comprendido entre el 28 de octubre del 2003 y el cierre de la cuenta el 27 de abril de 2004. “En esos documentos consta quién o quiénes fueron las personas que autorizaron las transferencias cablegráficas o el traspaso de fondos hacia la cuenta destino: 11710500200113016, donados por el gobierno de China Taiwán”.
El pasado mes de octubre, El Faro publicó un reportaje sobre cómo se repartieron los millones que donó Taiwán. Según documentos a los que tuvo acceso este periódico, cuando se realizó la primera transferencia cablegráfica por un millón de dólares, el 18 de noviembre del 2003, las personas que tenían firma autorizada en la cuenta de Costa Rica eran: Eduardo Zablah, Guillermo Ávila Qüehl, Gerardo Antonio Balzaretti Kriete y Antonio Salaverría, entonces presidente del COENA.
A finales de noviembre de 2003, cuando Salaverría dejó la presidencia del COENA, el CEP cambió a dos de las cuatro personas que tenían registro de firma en la cuenta: en lugar de Eduardo Zablah y de Antonio Salaverría fueron nombrados Juan Tennant Wright Castro y Elías Antonio Saca, entonces candidato a la presidencia y presidente del COENA.
Para operar la cuenta bancaria del CEP en Costa Rica se necesitaba la firma de dos de las cuatro personas autorizadas para manejar la cuenta. Eso significa que cuando se mandó la mayor parte del dinero, 7.5 millones de dólares, dos de estas cuatro personas debieron aprobar esas transferencias: Juan Tennant Wright Castro, Elías Antonio Saca, Guillermo Ávila Qüehl o Gerardo Antonio Balzaretti Kriete.
Sin embargo, en el expediente a cargo del juez Orellana no constan las tarjetas de registro de firmas autorizadas para el manejo de la cuenta 102002000589-5 a nombre del CEP, donde se depositaron los cheques por 10 millones de dólares que Taiwán entregó al expresidente Flores.
En su resolución, el juez Orellana no descarta la posibilidad de que esos documentos no estén en Costa Rica sino en El Salvador; en especial porque el banco costarricense informó que las gestiones de corroboración de datos de titulares de esa cuenta fueron realizadas por “los compañeros del Banco Cuscatlán de El Salvador”. “No se puede descartar que las tarjetas originales aún se encuentren en este banco”, consigna el documento.
A los fiscales también se les ha ordenado que entrevisten en Costa Rica a tres testigos. Uno de ellos es José Cambronero, empleado del Cuscatlán International Bank & Trust LTD, analista encargado de llenar el contrato de apertura de la cuenta de ahorros a nombre del CEP. El objetivo de la entrevista es que Cambronero diga quién fue la persona que abrió la cuenta y que entregó los cheques 2036 y 2037, por un monto de 5 millones. Aunque los cheques están a nombre del expresidente Flores, hasta el momento el juez no tiene un documento que compruebe que fue el expresidente quien depositó ese dinero en Costa Rica.
Otros testigos a los que el juez ha ordenado entrevistar son Enrique Calvo Brenes y Ana Agüero Agüero, los cajeros del Cuscatlán International Bank & Trust LTD que recibieron los cheques e hicieron el trámite respectivo para abonarlos a la cuenta de ahorro que el CEP tenía en ese banco.
3. ¿Quién firmó los cheques por 10 millones de dólares?
The International Bank of China, con sede en Nueva York, giró cuatro cheques a nombre del “Excmo. Sr. Francisco Guillermo Flores Pérez, Presidencia de la República de El Salvador” por un monto de 10 millones de dólares.
Esos 10 millones de dólares salieron desde la cuenta 02600908534546, registrada a nombre de la Embassy of The Republic of China San Salvador. Según la hipótesis de la Fiscalía, ese dinero se depositó en una cuenta bancaria del CEP, en Costa Rica, y luego fueron transferidos hacia una cuenta bancaria del partido Arena, en El Salvador.
Los documentos que, según la Fiscalía, prueban que ese dinero se depositó en Costa Rica son fotocopias de los cheques que, en su reverso, tienen una firma ilegible y la siguiente indicación: “To deposite only in account 990002032-06 of Cuscatlán International Bank with The International Bank of Miami”.
Los querellantes, empero, consideran que la fotocopia de los cheques no comprueba el involucramiento de Flores en este caso de corrupción. “Obtener los cheques originales es de suma relevancia para conocer con certeza si los cheques fueron endosados y si esa firma de endoso corresponde al sindicado”.
El juez Orellana consideró oportuna la petición y ordenó lo siguiente: “Encomiéndase a la Fiscalía que solicite bajo el mecanismo legal internacional correspondiente, al The International Bank of China, con sede en Nueva York, que entregue los cuatro cheques originales librados contra la cuenta corriente 02600908534546, cuyo titular era Embassy of The Republic of China San Salvador y fueron librados a nombre del ‘Excmo. Sr. Francisco Guillermo Flores Pérez, presidencia de la República de El Salvador’ y en la parte trasera del cheque en el espacio para endoso consta una firma ilegible”.
4. ¿Por qué la Fiscalía no pidió a Taiwán la clave para desentrampar el caso?
El 9 de enero de 2014 el gobierno de Taiwán entregó a la embajada salvadoreña en ese país el “Informe del Departamento de Asuntos Latinoamericanos y Caribeños del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de China Taiwán”, en el que se detallaban los proyectos financiados por la cooperación taiwanesa entre enero del 2000 y diciembre del 2003.
El informe detallaba nueve desembolsos por un monto de 24 millones 600 mil dólares. De los nueve desembolsos solo cuatro fueron ejecutados para los fines que el cooperante entregó el dinero, según la hipótesis de la Fiscalía. Las autoridades salvadoreñas dicen que hay cinco desembolsos entre septiembre de 2002 y diciembre de 2003 que no fueron reportados por el expresidente Flores, quien recibía los fondos a su nombre y en su calidad de presidente de la República.
Según la acusación fiscal, Flores recibió directamente 15 millones de dólares del gobierno de Taiwán. 10 millones corresponden a los cheques que depositó en Costa Rica y que luego fueron transferidos a El Salvador para financiar la campaña presidencial de Arena en 2004; mientras que de los otros cinco millones se desconoce su paradero. Los fiscales “presumen” que esos cinco millones perdidos ingresaron al patrimonio de Flores y por eso lo acusan de enriquecimiento ilícito.
Los querellantes de FESPAD e ISD consideran que el informe entregado por Taiwán tiene un vacío. Los nueve desembolsos de dinero se realizaron desde la misma cuenta bancaria que la embajada de China tenía en The International Bank of China, con sede en Nueva York, pero las autoridades taiwanesas no han dicho a nombre de quién desembolsaron ese dinero. Eso significa que Taiwán tiene la llave para revelar a quién se le entregaron cinco millones de dólares de los cuales se desconoce su paradero.
Taiwán no ha dicho a quién entregó esos y el resto de los 15 millones de dólares, y la Fiscalía no lo ha preguntado. Al menos, así se deduce de la resolución del juez Orellana, que en uno de sus apartados reza: “La Fiscalía debe pedir por la vía diplomática un informe sobre la forma en que se realizaron los nueve desembolsos de dinero (…) El informe deberá especificar además de la forma en que se dio el desembolso de dinero para cada proyecto específico, la fecha exacta de desembolso y a quién se le hizo entrega de las cantidades donadas”.
Los querellantes de FESPAD e ISD consideran que la información que proporcione Taiwán es trascendental para el caso. Lo explican así: hasta el momento hay fotocopias de cuatro cheques a nombre del expresidente Flores que fueron depositados en Costa Rica, pero en el expediente no hay ningún documento que demuestre que esos cheques eran para financiar los proyectos consignados en el “Informe del Departamento de Asuntos Latinoamericanos y Caribeños del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de China Taiwán”. Implícitamente, los querellantes no descartan que el fin de los fondos fuera, desde un inicio, financiar la campaña de Arena.
“La embajada de Taiwán no ha dicho la forma de entrega de ese dinero: no se sabe si fue cheque, efectivo o depósito a cuenta. El informe de Taiwán no especifica fecha, solo consigna el mes y el monto”, cuenta una fuente que conoce el caso. Para FESPAD e ISD, si Taiwán confirma que los cuatro cheques a nombre de Flores eran para financiar proyectos sociales, eso confirmaría el delito de peculado (mal uso de fondos públicos); de lo contrario, la investigación tendrá un vacío que podría favorecer al expresidente.
Desde esta perspectiva, Taiwán tiene la clave para acorralar a Flores o para allanarle el camino hacia la libertad. El juez Orellana ha ordenado a la Fiscalía que pida ese informe. Por el momento, el plazo fatal para responder estas preguntas es el seis de mayo de 2015.