La abogada Bertha María de León, parte del equipo de acusadores particulares en contra del ex presidente Francisco Flores, denunció en entrevista con este periódico que ella y su compañera de equipo, Teresa Naves, han sufrido persecución y acoso durante noviembre y lo que va de diciembre.
De León y Naves son parte de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD) , y han sido quienes impulsaron que se incluyera el delito de lavado de dinero en el juicio contra el ex presidente. La Fiscalía se opuso a su participación durante toda la fase de instrucción, previa a la fase de sentencia, que es a la que se dirige actualmente el proceso. La Fiscalía intentó apartalas del caso, pero el juez decidió que tenían derecho de continuar aportando en la acusación. La Fiscalía y FESPAD no han sido un equipo. La Fiscalía no las quiere en la sala de juicio y el equipo de FESPAD ha insistido en que la Fiscalía se esfuerza por construir un caso débil en contra del ex presidente.
De León llegó a pedir públicamente que se separara del caso al ex fiscal general, Luis Martínez, debido a que su relación con el acusado y su familia representaba conflicto de interés. Martínez criticó ante los medios de comunicación en diferentes ocasiones al equipo de FESPAD e incluso llegó a amenazar con procesarlos.
De León relata que desde el 9 de noviembre la comenzaron a seguir dos carros, un pick up Amarok dorado y una camioneta Nissan del mismo color, ambos con un polarizado suave en sus vidrios.
“No lo hacen para que no me dé cuenta, lo hacen de manera que lo note. El carro se para atrás, se mete adelante, se pone a la par como si va a sacarme del carril”, dice De León.
El jueves 5 y viernes 6 de noviembre fue la audiencia preliminar en el proceso contra el ex presidente. El juez pidió hasta el 3 de diciembre para dar su resolución. Ese mismo día terminó el período del ex fiscal general. Durante todo ese tiempo, De León asegura que la persecución de vehículos ocurrió cuatro veces. El último hecho que interpretan como un mensaje para ellas sucedió este jueves 10 de diciembre, cuando destruyeron las chapas de todas las puertas del carro de la abogada Neves mientras ella y De León hablaban en la radio Mi Gente acerca del ex fiscal Martínez y el proceso contra Flores.
El Faro se reunió con De León hace más de una semana, pero ella pidió que no se publicara aún el hecho, para ver si las cosas se calmaban tras la resolución del juez de enviar a Flores a sentencia. Lo que ocurrió al vehículo de su compañera fue lo que la hizo decidirse a contar más detalles para que fueran publicados.
El seguimiento a De León siempre ocurrió de la misma forma. El vehículo que la perseguía se pegaba a ella en el bulevar de Los Héroes, a la altura del mercado de pulgas, cerca de la sede de FESPAD, y la seguía hasta que ella entraba a su residencial privada en Antiguo Cuscatlán.
En una de las ocasiones, relata De León, el seguimiento fue más descarado. Ella recogió a su hijo en Santa Tecla y la camioneta continuó su seguimiento. Ella optó por desviarse en una residencial de Santa Tecla donde vive un pariente.
“Yo cruzo en la senda y él también. Me parqueo y se va al tope de la calle sin salida, da la vuelta y se queda como viendo hacia mi carro. Nos bajamos con mi hijo como 40 minutos y, al salir, seguía ahí, como maniquí. Era un solo hombre esa vez. Alto, erguido, con entradas en la cabeza, con guayabera. Cuando salgo, hizo cambio de luces. Voy, me pongo a la par, le pongo las luces y nada, ni se movió. Me voy y me sigue hasta la entrada de mi casa”, recuerda De León.
El 24 de noviembre de este año, la Procuraduría para la Defensa de Los Derechos Humanos (PDDH) emitió medidas cautelares a favor de las dos abogadas debido a “hostigamiento y amedrentamiento por parte de sujetos desconocidos”. El escrito de la PDDH pide a la Policía que proteja a las dos querellantes y sus familias. A la Fiscalía y Policía les pregunta si tienen alguna investigación en su contra.
FESPAD se acercó a la PDDH luego de que policías que se identificaron como miembros de la División Central de Investigaciones llegaran a su sede y pidieran a una de las empleadas una lista con los nombres de las personas que utilizaban el vehículo de la institución. Dijeron, según relata De León, que el vehículo aparecía en un caso que ellos investigaban.
De León dio a la PDDH el número de placas que logró identificar de uno de los vehículos que la persiguen.
El Faro preguntó a la abogada por qué no denuncia el seguimiento a la Policía o Fiscalía. “No confío en que se vaya a investigar ni que Fiscalía o PNC vayan a responderme. Solo quiero registrar el hostigamiento. No tengo claro que no venga de la misma Policía o Fiscalía. Y viene la etapa más yuca del juicio, donde hemos citado a los ex presidentes Antonio Saca y Mauricio Funes. Lo que me da más miedo es que me vayan a detener y me armen algo. Es capaz (el ex fiscal general). Ya llegaron los policías a FESPAD. Si lo reeligen, sé que seré una de las primeras cuentas que va a ajustar”, dice De León.