Tegucigalpa, HONDURAS. En la segunda mitad del año 2015, “las Fuerzas Armadas de Honduras han asesinado al menos seis niñas, niños y jóvenes, tres de ellos durante la semana recién pasada”, afirmó la oenegé Casa Alianza en un comunicado hecho público este martes 5 de enero.
Citó como ejemplo que el 27 de diciembre, militares “asesinaron a dos jóvenes pertenecientes al pueblo garífuna (afro-hondureño) en la comunidad de Iriona, departamento de Colón, (y) el 2 de enero una joven fue asesinada por elementos de la Policía Militar del Orden Público en la colonia Villafranca” de la capital.
También dijo que “son reiteradas las denuncias de violaciones a derechos humanos” contra la ciudadanía con “torturas, violaciones sexuales y uso excesivo de la fuerza” por los militares.
El Gobierno “a través de ambiguos comunicados y declaraciones de prensa ha negado o minimizado” las violaciones a derechos humanos, “siendo insensible ante el dolor de las víctimas y prestándose para arropar con un manto de impunidad a los perpetradores”, señala la oenegé.
En ese sentido, Casa Alianza demandó a las autoridades frenar la violencia y llamó al presidente Juan Orlando Hernández a replantear su “estrategia militarista” para combatir la criminalidad. Esa estrategia debe contemplar “la recuperación pacífica de territorios” con la participación de todos los sectores, sugirió.
El portavoz de la Fuerza de Seguridad Insterinstitucional Nacional (Fusina), Santos Nolasco, argumentó en declaraciones a la radio HRN que “esos son casos aislados” y aseguró que el militar que viole la ley 'tiene que responder ante la justicia”.
Desde que asumió el 27 de enero del 2014, el presidente Hernández emprendió una ofensiva contra la delincuencia reforzando la policía con militares. Según la cifras oficiales, la estrategia propició una reducción drástica en la tasa de homicidios, que de de 68 por cada 100,000 habitantes en 2014 cayó hasta 57 en 2015.
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