Inversiones Fénix, la empresa constructora señalada por el Ministerio de Cultura de destruir el sitio arqueológico Tacuscalco, ha inclumplido, según la institución, el paro de obra impuesto por un juzgado medioambiental de Santa Ana.
El pasado 16 de abril, la jueza Elizabeth de Milla decretó, luego de una visita a Tacuscalco el 'cierre temporal técnico de la construcción' del proyecto Acrópoli Sonsonate. Aunque la medida no tenía nada que ver con la destrucción de material arqueológico, suponía, al menos, el cese de los trabajos de terracería y el paso de los tractores, que dañaban las capas culturales.
La denuncia se dio el pasado 1 de octubre luego de que los vecinos notificaran al departamento de arqueología de la construcción de nuevas viviendas en el terreno. Hugo Díaz, jefe de esa unidad, visitó el sitio el martes 2 de octubre y confirmó que se habían terminado de construir una serie de casas en el perímetro que delimita el centro ceremonial y la zona de influencia de todo el sitio arqueológico. Esto sucede, además, luego de que una comisión especial de la Asamblea Legislativa recomendara a las instituciones gubernamentales que se levantara el paro de obra y se permitiera a Fénix terminar las obras de construcción.
Posterior a la inspección, Díaz se trasladó hasta la oficina de la jueza para notificarle el incumplimiento del paro por parte de la empresa constructora. De Milla dio aviso a la Policía de Nahulingo para que vayan al lugar y corroboren si lo denunciado por el Ministerio es cierto. “Si ellos constatan que la construcción ha seguido -explicó-, corresponde proceder a la denuncia de las capturas de las personas que se encuentren ahí por desobediencia”.
La nueva denuncia ocurre cuatro semanas después de que la Asamblea Legislativa cerrara una comisión especial que investigó el caso. Los diputados de la comisión se decantaron a favor de la empresa y emitieron un informe en el que recomendaron al Ministerio de Cultura y a las intancias que tramitan los casos que levantaran las medidas y las investigaciones contra la empresa.
El Faro contactó a Francisco Bertrand Galindo, apoderado de Fénix para preguntarle por qué la empresa había decidido seguir construyendo pese a la orden judicial. El abogado dijo, luego de consultar con sus fuentes en la empresa, que “no se ha construido nada en el área de protección de 3 manzanas. Lo que se estaba construyendo quedó tal como se encontraba al momento de la suspensión, pero en todo caso nada en el área de protección.
Entérese de más detalles de la denuncia en el siguiente programa de El Faro radio:
