Percibimos a una Arena sin despuntar tras un año de dejar el poder: una bancada sin ningún control aritmético de decisiones; abandonada por sus antiguos aliados luego de perder el poder y con encuestas que los ponen muy lejos del FMLN. ¿Qué reflexión hace sobre esta situación?
Yo creo que esa percepción tiene que ver con cómo arrancamos. En este momento las tendencias de aceptación para el FMLN comienzan a disminuir y Arena comienza a remontar. No lo hace de una manera muy fuerte, pero sí comienza a acercarse. Se fueron 14 diputados y es una cuestión difícil para el partido, sin embargo, lo que tenemos ahorita es una bancada leal, con la que realmente podemos contar. No va a haber una Arena aislada, porque dependerá de cuáles son las iniciativas que se busque pasar. Que Arena no tiene en este momento la fuerza política, estamos claros de eso, pero nuestra meta es recuperar esto en 2012.
¿Tienen claro lo que van a hacer?
Yo diría que Arena está trabajando mucho mejor de como estaba trabajando hace unos meses.
Hace unos meses se estaba desgranando. Trabajar mejor que eso es, en todo caso, trabajar 'menos peor'.
Es trabajar en fortalecer toda la estructura, es volver a consolidar la estructura, no es nada fácil. Es tener que lidiar con los que han sido mensajes contradictorios, con un socabamiento del partido que han estado haciendo los diputados de Gana.
¿Qué es lo que están haciendo ahora?
El trabajo de Arena ha estado apoyado también por definir un ideario para el partido. Es un esfuerzo que pasa por reconocer aquello donde nosotros fallamos y entender que tenemos que reposicionarnos para poder resultar atractivos a la población y además para poder seguir construyendo democracia con base en los principios.
En síntesis, al cabo de un año siguen buscándose y buscando la identidad política del partido. ¿Ese nuevo ideario ya está construido?
Ese es un documento que ya se tiene y que se va ahora a dar a conocer también a las bases del partido.
¿Qué de novedoso tiene?
Yo creo que lo novedoso de esto es poderse sentar y echar un vistazo no solamente al futuro, sino también al pasado. Mirar hacia atrás y decir: ¿Qué es lo que tenemos que corregir de lo que ya ha habido en el pasado? ¿En qué momento fue que Arena se apartó de lo que eran sus principios y objetivos? ¿En qué momento dejamos de ser la fuerza política que entusiasmaba? Arena hace un análisis profundo y dice: ¿Qué tipo de abusos fueron los que nosotros permitimos? Nosotros construimos al país en un país de libertades, de libertad económica, en un país abierto, ¿fallamos nosotros en que esas libertades fueran más allá de donde debían haber ido? ¿Hubo abusos o no hubo abusos?
¿Y qué se respondieron a esas preguntas?
Que sí hubo abusos. Por lo tanto son cuestiones que nosotros debemos corregir.
¿Arena se está reposicionando sobre la manera en que ve el mercado?
Sobre ese punto y sobre otros puntos. Igualmente hemos analizado cuál ha sido la trayectoria de Arena en los últimos 20 años y nos damos cuenta cómo poco a poco se fue perdiendo la mística y los principios de los cuales partimos y que nos volvieron la fuerza más atractiva durante 20 años. Estamos conscientes también de que al cabo de 20 años recibimos todavía un apoyo de más de un millón 300 mil votantes: esto sigue siendo un apoyo a lo que ya se hizo anteriormente. Quiere decir que no se está rechazando lo que Arena proponía, sino que se está buscando que las cosas se hagan de una mejor manera.
Cuando hablan de abusos supongo que se refieren a que dejaron que la economía fuera regulada principalmente por el mercado...
En algunos sentidos. Por ejemplo, abuso de cobros de algunas empresas. Son cuestiones que no debían haberse dado, abusos que se dieron de algunas instituciones financieras que tampoco debían haberse dado.
Han tardado más de dos décadas en darse cuenta de ello. ¿Era tan difícil de ver?
Es que no han pasado 20 años en los que las cosas se estaban haciendo mal. Digamos que se ha construido a partir de 20 años. Recordemos que nosotros tomamos un país que estaba destruido, donde hubo que volver a crear democracia y comenzamos a desarrollar el tema de las libertades... pero llega un momento en que el partido se aparta de lo que fue su función inicial. No es que durante los 20 años...
Ahora que usted dice esas cosas se parece mucho a lo que dicen Antonio Saca y Gana cuando hablan de Arena: “Es que ellos trabajaron para privilegiar a pocas manos”.
Yo creo que... más bien hablemos de Arena, no necesariamente de Antonio Saca, porque esa es una etapa aparte, la que se vivió. Ahí quizá lo que más se cuestiona es el abandono de las prácticas democráticas, el abuso de poder que hubo en ese sentido.
Los estrategas de la campaña de Rodrigo Ávila se dieron cuenta de que Arena tenía que luchar contra un estigma si quería seguir siendo exitosa electoralmente: el de ser el partido de los ricos. A su juicio, ese mote o esa idea en el electorado, ¿está justificada?
Yo pienso que no, que no se convirtió en el partido de los ricos, yo creo que Arena hizo un esfuerzo consciente para poder corregir situaciones de país y le pongo un ejemplo: nuestra base fue siempre la base del campesinado, no son los ricos, y nosotros nos preocupamos por reducir la pobreza que había en el país, con cifras no de nosotros, sino del PNUD; por ejemplo, Arena redujo la pobreza de 60 a 34 puntos en 15 años, entre 1992 y el año 2007. La pobreza extrema igualmente se redujo de más de 30 a 14 puntos. Después vino la crisis económica y vino a afectar los logros que ya se habían tenido, pero Arena no buscó favorecer grupos empresariales, sino que favorecer a la mayoría de la población, así es como se parte. En el camino se pudieron haber dado discrepancias, esas discrepancias no pueden volver a suceder.
Usted menciona la necesidad de replantearse el ideario del partido. ¿Han pensado en repensar su propuesta ideológica? ¿O piensan reivindicar el ideario original del mayor Roberto d'Aubuisson y de la gente que fundó al partido en los 80s?
Creo que no debemos confundir: el replanteamiento que estamos buscando no tiene nada que ver con el tema del comunismo. Lo que estamos tratando ahora es de ayudar a construir ese país que los salvadoreños en general estamos buscando. Cuando llegó un gobierno de izquierda al poder... si bien ningún partido político quiere perder las elecciones, como ciudadanos nos planteamos que tiene que haber alternancia y que un mismo partido no puede gobernar para siempre, porque eso debilita la democracia. Como salvadoreña, yo realmente esperaba que íbamos a tener el famoso cambio y que algunas de las cosas que tal vez no se habían dado en los gobiernos anteriores, ahora se iban a hacer de una manera diferente: que sea un país donde se construya democracia, donde haya mayor apertura, donde existan libertades, porque las libertades que tenemos hasta ahora son limitadas.
¿Usted esperaba ese cambio?
Yo creo que lo esperábamos muchísimos salvadoreños. Un cambio donde se trabajara para impulsar entendimientos que nos permitieran tomar decisiones y adoptar políticas públicas que ayudaran a resolver los problemas de los salvadoreños en situación de vulnerabilidad; que pudiéramos impulsar legislación que limitara el poder, que limitara los abusos.
Es interesante esa enumeración de déficits que acaba de hacer, porque lo que está describiendo es el modelo que construyó Arena, que usted esperaba ver cambiado con el triunfo de un partido de izquierdas. ¿Ese es el diagnóstico del partido?
Yo estoy hablando como ciudadano, porque los ciudadanos es eso lo que esperábamos de un país.
¿Y su partido comparte esa visión que usted acaba de describir?
Yo creo que sí.
Lo que está diciendo es que estaba usted ilusionada con un cambio de modelo donde no hubiera más abusos, donde hubiera más democracia, que esperaba que toda esa serie de taras dejadas por los gobiernos anteriores ya no las tuviera este.
De lo que tenemos que estar conscientes es que no todo se puede construir en un período, ni en dos ni en tres. Tampoco puede eliminarse totalmente, desechar totalmente lo que ha hecho otro gobierno sino que se tiene que construir sobre eso. Arena ha construido, Arena ha iniciado, Arena ha impulsado, pero sobre eso mismo deberíamos seguir construyendo. Ahorita lo que estamos viendo es un debilitamiento de iniciativas que se comenzaron. Una cosa es corregir, una cosa es afinar y otra cosa es desechar y empezar de nuevo.