Johanesburgo, agosto 27. El ejército de Ruanda que en 1994 puso fin a la matanza de más de medio millón de personas de la etnia tutsi respondió dos años más tarde con matanzas brutales en el Congo que también podrían clasificarse como genocidio, dijo un informe preliminar de las Naciones Unidas.
El documento agrega que los rebeldes aliados de Ruanda, vinculados al actual presidente congoleño, le ayudaron a matar a decenas de miles de hutus, en su mayoría mujeres, niños, ancianos y enfermos.
'Al entrar en una localidad, ordenaban a la gente a congregarse. Una vez reunidos, los civiles eran atados y muertos a golpes de martillo o azada', dice el borrador. Los ataques sistemáticos y extendidos 'podrían ser clasificados como crímenes de genocidio' por un tribunal competente, agrega.
El informe, filtrado el jueves por el periódico francés Le Monde, constituye un motivo de embarazo para el presidente de Ruanda Paul Kagame, un aliado de Estados Unidos y Gran Bretaña cuyo gobierno se ha atribuido estatura moral por haber puesto fin al genocidio de tutsis en 1994 que incluyó también la matanza de algunos hutus moderados.
Le Monde dijo que Kagame amenazó con retirar los soldados ruandesas de la fuerza africana de mantenimiento de la paz de la ONU en Darfur, Sudán, si las denuncias de genocidio se publicaban oficialmente.
El presidente del Congo, Joseph Kabila, también era comandante de los rebeldes congoleños mencionados en el informe en la época de los ataques.
El gobierno ruandés dominado por los tutsis ha calificado el informe de 'basura'. Y el gobierno del Congo desmintió el viernes las acusaciones y consideró el informe incompleto e injustificable.
'Los hechos se presentan como si los congoleños fueran los asesinos, los genocidas, cuando es totalmente lo contrario', dijo en una respuesta de 50 páginas a la ONU.
Los investigadores, sin embargo, dijeron que requirieron dos fuentes independientes para cada uno de los 600 incidentes documentados en su informe de 545 páginas.
Alrededor de un millón de hutus, incluyendo autores del genocidio de 1994 en Ruanda, huyeron al Congo. El ejército de Ruanda invadió. Miles fueron asesinados en campos de refugiados de la ONU.
'El uso generalizado de armas que no eran de fuego, en particular mazos, y la matanza sistemática de los sobrevivientes después que los campamentos fueron tomados, demuestra que el número de muertos no puede circunscribirse a las circunstancias de la guerra', dice el reporte.
El gobierno de Ruanda afirma que sus fuerzas buscaban a los perpetradores del genocidio de 1994 durante el cual más de medio millón de personas fueron asesinadas, en su mayoría miembros de la etnia tutsi y hutus moderados. Pero el reporte señala que la mayoría de las víctimas hutu en el Congo eran mujeres y niños, además de enfermos y ancianos.