Martínez cobró relevancia este año cuando en agosto trascendió un regañó presidencial por la firma que la funcionaria estampó -en nombre de El Salvador- en un evento regional. En la XI Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, realizada en Brasil, el 16 de julio, Martínez ratificó, una vez más, una de las actividades que de acuerdo con la ley del Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer le corresponden. Según dijo Martínez, esa era la quinta vez en la que el país ratificaba ese convenio que propone revisiones para adecuar en cada país una legislación benefactora para el aborto terapéutico.
En síntesis, el presidente Mauricio Funes desautorizó la firma emitida por Martínez y aseguró que se iba a notificar, a través de cancillería, a la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) que la funcionaria no contaba con autorización para firmar dicho documento. “Yo no he dado ninguna orden para la revisión de dicha ley. La Asamblea debe revisar las leyes”, dijo el presidente, al desautorizar a la funcionaria. Y añadió que El Salvador mantendría sus reservas respecto al tema, tal como hicieron Costa Rica y Chile. Reservas que aún se mantienen, aún y cuando la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas recomendara a El Salvador, hace dos meses, para que formulara la eliminación de la ley penal la persecución legal del aborto.
La ex funcionaria abanderó, además, una campaña institucional para proscribir en los actos cívicos y escolares el desfile de las cachiporristas tras argumentar que esta práctica era 'sexista'. La propuesta, avalada por el gobierno central y el Ministerio de Educación sacaba de escena a las cachiporristas a partir del 15 de septiembre de este año, pero Funes prorrogó su vigencia por un año más.Casa Presidencial informó que a Martínez la sustituirá a partir de este jueves Yanira Argueta, quien actualmente es miembro propietaria de la junta directiva de la institución y además es directora de la organización feminista 'Asociación de Mujeres Salvadoreñas (AMS).
