México (AP) — Los plagiarios de medio centenar de migrantes centroamericanos en el sur de México exigen un rescate, denunció el jueves un sacerdote que dirige un albergue para indocumentados y uno de los primeros en denunciar el presunto secuestro que ha movilizado a gobiernos de América Central.
El cura Alejandro Solalinde, responsable del albergue 'Hermanos en el Camino' en el estado sureño de Oaxaca, dijo a la AP vía telefónica que los presuntos secuestradores contactaron en Estados Unidos a los familiares de un indocumentado que presenció el supuesto plagio el 16 de diciembre, pero que logró huir.
Dijo que es probable que los secuestradores pensaron que el indocumentado estaba entre el grupo plagiado y por eso se comunicaron con sus familiares.
Y aunque no está claro cómo obtuvieron los números de contacto, Solalinde dijo que es posible que los presuntos plagiarios hayan viajado con los migrantes desde la frontera sur hasta el lugar del supuesto plagio, tiempo durante el cual lograron establecer cierto nivel de confianza para recopilar información sobre sus familiares, una situación que le han reportado en el pasado.
Solalinde evitó dar detalles sobre la identidad del indocumentado, aunque aseguró que ya notificó a la Secretaría de Gobernación en México para que entrara en contacto con el migrante y recabe información entrevistándolo.
'Estamos haciendo un llamado a los gobiernos de Centroamérica para que si saben de algún dato de que piden rescate lo informen', dijo.
El secuestro de unos 50 indocumentados fue denunciado esta semana por las autoridades de El Salvador, a las que luego se sumaron de Honduras y Guatemala. Habría ocurrido el 16 de diciembre en la comunidad de Chahuites, cuando hombres armados detuvieron un tren de carga en el que viajaban por Oaxaca.
Los gobiernos de citados países centroamericanos pidieron el miércoles que México investigue el incidente.
Pese a que inicialmente rechazó tener indicios del plagio, el gobierno de México dijo el miércoles que investigará los hechos y tenía previsto comenzar a entrevistar a centroamericanos que al parecer presenciaron el secuestro.
A partir de testimonios recabados por su personal consular, la cancillería salvadoreña ha dicho que los presuntos delincuentes golpearon a los migrantes con machetes y les quitaron sus pertenencias. Posteriormente se llevaron por diferentes rumbos a unas 15 mujeres, cinco menores de edad y unos 30 hombres.
Las víctimas habían evadido minutos antes un operativo del personal de migración, ejército y policía federal mexicana en la que se registró la detención de 92 indocumentados.
Solalinde, quien estableció el albergue en 2007, dijo que han recibido información de que los presuntos plagiarios estarían vinculados con el cartel de Los Zetas, aunque las autoridades no hecho ningún comentario al respecto.
El 24 de agosto fueron encontrados asesinados 72 migrantes centro y sudamericanos que aparentemente cayeron secuestrados por Los Zetas en el estado norteño de Tamaulipas.