La fiscalía federal indicó que Villarreal, quien fue capturado en septiembre de 2010 en la ciudad mexicana de Puebla (centro), 'durante el periodo que abarca los años de 2007 a 2010 (...) fue integrante de una organización criminal dedicada al tráfico de drogas y lavado de dinero del cártel de Arturo Beltrán Leyva'.
Esta organización 'se dedicaba al transporte de cocaína a los Estados Unidos, así como al traslado de millones de dólares estadounidenses derivados de la venta ilegal del estupefaciente al extranjero', agregó.
La entrega de 'el Grande' a las autoridades estadounidenses tuvo lugar el martes en el Aeropuerto Internacional de la capital mexicana, se especificó en el comunicado.
Villarreal, también conocido con los apodos de 'King Kong', 'Comeniños', 'el Giga' o 'el Gigante', operaba principalmente en la capital mexicana y en los estados de Puebla, México (centro), Morelos (centro), Guerrero (sur), Nuevo León (norte), Sinaloa (noroeste) y Quintana Roo (sureste).
El extraditado, que también había trabajado para los cárteles de Juárez y del Golfo, era hasta el momento de su captura uno de los narcotraficantes más buscados de México.
Su detención supuso otro golpe para el cártel de los Beltrán Leyva tras la muerte de Arturo Beltrán (en diciembre de 2009) y las capturas de Edgar Valdez, 'La Barbie', Gerardo Álvarez 'El Indio' (en abril de 2010) y otros dos hermanos Beltrán Leyva, Alfredo (enero 2008) y Carlos (diciembre 2009).
Héctor Beltrán Leyva es el único en libertad de los cuatro capos del cártel, que rompió sus relaciones con el cártel de Sinaloa, liderado por Joaquín 'el Chapo' Guzmán, a raíz de la detención de Alfredo Beltrán, que fue achacada a una traición.