Luis Martínez entró y salió sin despeinarse de la cita con los diputados que estudian si ratificarlo por tres años más en el cargo de Fiscal General de la República. Los seis integrantes de la comisión ad hoc le permitieron que se extendiera en la presentación que llevaba lista, que sobrepasara el tiempo convenido para su entrevista y que evadiera algunas de las preguntas que son parte del ritual al que se somete a los 72 aspirantes al cargo. “Vine a la Fiscalía a trabajar, no a estudiar”, respondió a la pregunta de cuál había sido la última capacitación que había recibido.
Martínez llegó puntual a la cita del martes 20 de octubre. Lo esperaban los legisladores que, con anticipación, le habían enviado una serie de 11 preguntas como la que indaga sobre la última capacitación recibida. El mecanismo de las entrevistas consiste en que el candidato en turno lee ante la comisión las preguntas y las correspondientes respuestas.
Con casi tres años de trabajo, el fiscal Martínez dijo a los diputados que ha hecho un gran trabajo, a pesar de que particularmente los del FMLN tienen meses señalando deficiencias en su desempeño, sugiriendo conflictos de interés y poca voluntad para resolver casos de corrupción vinculados a los gobiernos del partido Arena.
'La Fiscalía es una institución respetada y confiable. Seguiremos desempeñando este papel que hemos tenido estos años', dijo Martínez, ante los rostros impasibles, entre otros, de Alberto Romero, del partido Arena, presidente de la comisión; Santiago Flores, del FMLN, y Guadalupe Vásquez, de Gana.
En FMLN y Arena, con 31 y 35 escaños legislativos, respectivamente, ni se atreven a dar la cara para valorar algunas actuaciones de un fiscal que ha dicho que es 'banal' cuestionarle sobre sus viajes en aeronaves cuya propiedad se vincula con un empresario que ha sido denunciado ante la Fiscalía General. El mismo fiscal que tuvo una relación abogado-cliente de largos años con el expresidente Francisco Flores, a quien está procesando por corrupción en relación con millonarios donativos del gobierno de Taiwán, pero cuyas diligencias han sido cuestionadas no solo por los acusadores particulares, sino también por el juez que ventila el caso.
Apenas el martes, la diputada Lorena Peña, presidenta de la Asamblea Legislativa, dijo en su cuenta en Twitter que el expresidente Francisco Flores debería estar preso por corrupción. El Faro reveló en 2014 que Martínez tuvo durante largos años una relación profesional con Flores y con el grupo familiar del expresidente. Los dirigentes y legisladores efemelenistas han reclamado acción y contundencia a la Fiscalía en este caso que, cuando se acerca a su culminación, luce un sinnúmero de vacíos.
Pero para dos de los máximos dirigentes del FMLN, el fiscal ha hecho su trabajo. El secretario general efemelenista, Medardo González, y José Luis Merino, han planteado que Martínez en esencia ha cumplido sus obligaciones y no descartan que su partido vote por su reelección. “Ha hecho el esfuerzo necesario, ha habido una notoria mejoría en la capacidad investigativa de la Fiscalía, ha ayudado a que mejore la aplicación de la justicia en el país”, dijo a Diario El Mundo José Luis Merino. Al mismo medio, la jefa de la fracción legislativa, Norma Guevara, enumeró las principales deficiencias del trabajo del fiscal: “Luis Martínez ha salvado hasta hoy a Francisco Flores, Luis Martínez ha salvado a los de CEL-Enel, Luis Martínez no ha perseguido los 150 casos que puso el expresidente Funes”.
En el historial del fiscal también está la utilización de intervenciones de llamadas telefónicas personales grabadas durante una investigación sobre la relación del sacerdote español Antonio Rodríguez con pandillas. La Fiscalía usó las conversaciones personales para presionar en favor de la confesión de Rodríguez. Según la Constitución de la República, este uso es causal de destitución.
En 2014, El Faro documentó más de una docena de vuelos oficiales y no oficiales realizados por el fiscal en aeronaves cuya propiedad está vinculada con el empresario Enrique Rais. La Fiscalía recibió denuncias contra Rais en un litigio con sus exsocios, pero las archivó, y en cambio, las demandas de Rais contra sus acusadores sí prosperaron. Un día antes de la audiencia en la Asamblea, El Faro publicó un vídeo en que se observa al fiscal general abordando dos aeronaves vinculadas con Rais. Sin embargo, Martínez, quien había declarado bajo reserva la información sobre sus vuelos, llegó el martes a la comisión y se retiró sin despeinarse.
Martínez se tomó más de los 30 minutos que la subcomisión asignó a cada candidato para responder, tanto que Alberto Romero, diputado de Arena, lo previno. Continuó leyendo sus respuestas por cinco minutos más y después dedicó otros cinco minutos a responder las tres preguntas que le hicieron los diputados.
Nadie incomodó al fiscal con preguntas sobre sus vuelos secretos o sobre las razones para terminar como terminó los casos contra exfuncionarios del Instituto Salvadoreño de Transformación Agraria (ISTA), que confesaron haber cometido corrupción. Martínez, por cierto fue directivo del ISTA entre 2004 y 2009.
Al final de la disertación de Martínez solo hubo tres preguntas adicionales. Una de ellas contenía datos equivocados sobre la cantidad de empleados administrativos que Martínez, gustoso, se encargó de corregir, y las otras dos fueron sobre casos que la Fiscalía está investigando pero que iban formuladas de una manera tan débil que el candidato a la reelección no tuvo problemas en barrer con un poco de retórica. 'En tres años me ha tocado llevar los casos más difíciles y complejos en la historia de este país', dijo Martínez a los legisladores.
Mártir Arnoldo Marín, del PDC, le preguntó si era cierto que los fiscales tienen que hacer más trabajo administrativo que operativo, como habían expresado otros candidatos. Martínez le contestó que esos comentarios 'no son ciertos y lo único que demuestran es el total desconocimiento de la institución'. Santiago Flores, del FMLN, le preguntó si la Fiscalía había hecho todo lo que tiene que hacer para lograr justicia en el caso de corrupción contra el expresidente de la República Francisco Flores, del partido Arena. Martínez replicó lo que ha dicho en otras ocasiones: que el papel del fiscal general concluyó al haber sometido el caso a los tribunales y ahora está en manos del juez. Romero le preguntó por la investigación por presunta corrupción en la construcción de la presa El Chaparral. Martínez leyó un resumen ejecutivo que llevó a la cita, e informó que esa investigación tiene un 80 % de investigación. Ninguno de los diputados hizo una sola pregunta de seguimiento.
Martínez terminó la entrevista con los aires de un boxeador que ganó el primer round de una pelea de varios asaltos. Al final de la entrevista, que duró 45 minutos, se despidió de todos los diputados presentes y contrario al resto de entrevistados, fue conducido hacia su camioneta a través de los pasillos a los que los periodistas no tienen acceso. Martínez dijo que no contestaría ninguna pregunta de los medios.
En diciembre de 2012, después de que la Fiscalía permaneciera acéfala durante casi tres meses, los 84 diputados eligieron a Martínez como fiscal general. A casi tres años de aquel 4 de diciembre, a este hombre que todos consideraban de derechas, le han desaparecido algunos apoyos al grado que el FMLN y Arena parecen, cuando menos, indecisos sobre reelegirlo. Pero a estas alturas nadie o casi nadie se atreve en público a cuestionarlo.
Aunque Martínez ha sido el responsable de acusar por primera vez en más de medio siglo a un expresidente por actos de corrupción, hay abundantes dudas sobre la robustez del caso. Otras dudas las generó el manejo que dio a casos de corrupción como el de la fallida construcción del bulevar Diego de Holguín, o el del gasto de los fondos para reconstruir los hospitales dañados por los terremotos de 2001 sin que los hospitales fueran reconstruidos.
El FMLN y Arena han decidido no valorar en público todos estos casos. En el caso de los efemelenistas es una decisión incómoda porque sus militantes y dirigentes han vigilado de cerca y criticado las inconsistencias del trabajo de la Fiscalía en el juicio de corrupción contra el expresidente Flores.
Santiago Flores, diputado y dirigente efemelenista encargado por su partido de evaluar a los 72 candidatos a fiscal general, dice que su rol de evaluador de aspirantes le impide opinar abiertamente sobre lo que llama “rostros negativos y positivos” de los funcionarios. ¿No tiene una opinión sobre las repetidas veces que el fiscal Martínez ha usado las aeronaves vinculadas a Enrique Rais, el empresario que ha visto cómo las denuncias en su contra en la Fiscalía se desvanecen y cómo prosperan las que él ha presentado?, le preguntó El Faro. “Es difícil meterme a un tema del señor Luis Martínez en este momento porque soy parte de la comisión que está evaluando a los 72, por tanto tener una posición negativa o positiva hacia él es comenzar a inclinarse en la balanza”, respondió.
Tampoco quiso valorar el posible conflicto de intereses del fiscal Martínez en el caso contra el expresidente Flores porque sirvió como abogado del exgobernante y su familia.
“El funcionario que ha ejercido siempre crea rostros positivos y negativos. Hay temas que no han avanzado en la justicia, claro que quisiéramos que no se estuviera haciendo el del ojo pacho en el caso de Paco (Flores) y no le decretaran que está enfermo y por tanto no va a haber audiencia”, agregó el diputado cuando se le repreguntó. “Él ha sido fiscal, tiene una experiencia, y eso hay que someterlo a sopesar con los demás que no han tenido experiencia en la Fiscalía', lo excusó.
El martes, Santiago Flores fue uno de los tres diputados que hicieron preguntas a Martínez durante la entrevista. Flores le preguntó si la Fiscalía había hecho todo lo posible en hacer justicia en el caso del expresidente Flores. Martínez respondió lo mismo que había dicho hace unos meses, que la Fiscalía había cumplido bien su trabajo y que ahora le correspondía al juez decidir, aunque un análisis de las omisiones del caso presentado por la Fiscalía permite deducir que hay muchos vacíos en la investigación.
Para Nidia Díaz, otra diputada del Frente y parte de la cúpula del partido, la discusión sobre la posible reelección es muy prematura. “Martínez también tuvo conductas que se reconocen. Le dio legalidad al proceso electoral cuando estaban presionándolo de que lo descalificara. Entonces le vemos ese ángulo, el hombre ha actuado. Pero hay otros que también preguntamos por qué no ha hecho ciertas cosas en algunos casos, por qué no quiso hacer lo otro, por qué soltó a los de CEL, cuestionamientos...”, dijo Díaz.
Guillermo Mata, diputado efemelenista que forma parte de la junta directiva de la Asamblea, abiertamente ha cuestionado al fiscal. Lo hizo en mayo de este año a través de su cuenta de Twitter: “Fiscal no presentará informes financieros de Flores Pérez que vence este día. ¿por qué será? Porque son cheros? O algo más?”. Meses después también en Twitter anunció que él no votará por la reelección y sostuvo que ningún diputado efemelenista respaldará tres años más del funcionario.
En febrero de 2014, El Faro reveló cinco episodios del pasado de Martínez que lo vinculan con el expresidente Flores y su familia. Cuando los periodistas le preguntaron al respecto, el funcionario se limitó a decir que era cierto.
El FMLN, dice Flores, busca un fiscal que cumpla con los requisitos básicos, entre ellos, los añadidos por la Sala de lo Constitucional -que tenga independencia partidaria-. “Nosotros también creemos que debe ser independiente de los sectores de poder, no solo los partidos”, agrega Flores.
¿Como podemos leer las declaraciones de José Luis Merino?, le preguntó El Faro. “Le puedo decir que en el partido va a prevalecer el interés nacional. El interés del FMLN no es personal, y dentro de eso Luis Martínez ha estado en las discusiones, no se puede obviar. Pero posiblemente en la lista haya personas que vengan y convenzan.”
El FMLN tomará la decisión a partir del debate que hará en dos instancias: la comisión política y la bancada legislativa, que cada semana hará una evaluación. En este debate pesa la opinión de los tres principales dirigentes: aparte de José Luis Merino y Medardo González, Salvador Sánchez Cerén, presidente de la República, miembro de la comisión política del partido y el excomandante guerrillero más importante que sigue en el partido. Aunque estos son los más importantes dirigentes, los efemelenistas aseguran que la deliberación y votación interna que realice la bancada legislativa del partido será el insumo principal para que aquellos tres tomen una decisión.
Una integrante de la Comisión Política del partido que a condición de no revelar su identidad prometió hablar con claridad sobre la posible reelección del fiscal general, explicó a El Faro que el partido también tomará en cuenta las opiniones de aliados externos, entre ellos, la embajada de los Estados Unidos.
En Arena, los diputados tampoco le han cerrado la puerta a Martínez. El grupo de 35 diputados se reunió el miércoles de la semana pasada para, formalmente, discutir por primera vez el tema. Decidieron que no había que desbalancear la carrera y que a todos y cada uno de los 72 aspirantes se les estudiaría sin ninguna consideración especial. Eso benefició de inmediato las aspiraciones de Luis Martínez, a quien los areneros decidieron ignorarle cualquier decisión que haya tomado en los últimos 32 meses y que, en ocasiones, ha chocado con sus intereses de partido como por ejemplo cuando decidió procesar a los exdirigentes Guillermo Sol Bang, o funcionarios de administraciones areneras como Miguel Lacayo, por el caso CEL, o Enrique Nieto, en el caso del bulevar Diego de Holguín. En este último caso, Nieto fue el único exministro procesado mientras que David Gutiérrez, el ministro que dio la orden de salida en la construcción, nunca fue incluido en la investigación.
Honestidad, imparcialidad, apoliticidad y coraje son algunas de las características que esbozan los areneros cuando se les pregunta cuáles deberían ser los principales rasgos de un fiscal general. Pero se niegan a cotejar esos características con el trabajo ya ejecutado por Martínez. Al menos no ahora. ¿Es un método erróneo? “Si es un error, dejemos que la fracción lo diga, no tú, porque tú no puedes hablar de error. Yo te estoy diciendo que vamos a evaluar a las 72 personas igual. Las vamos a evaluar igual”, dice Alberto Romero, el jefe de la bancada arenera en la Asamblea.
Arena parece dispuesta a estudiar bien la gestión de Luis Martínez solo hasta después del 5 de noviembre, cuando la ronda de entrevistas de los 72 candidatos haya finalizado. Antes no. Alberto Romero responde de manera similar a como lo hace Santiago Flores cuando se le pregunta si puede opinar sobre los conflictos de interés del fiscal Martínez con el empresario Enrique Rais.
—Hablando de la imparcialidad que necesita el fiscal, ¿cree que el uso de aviones privados propiedad de un empresario a quien debía investigar es correcto?
—No voy a dar ningún criterio anticipado acerca de mi posición. Yo quisiera estar fresco, claro, oyendo a los 72 aspirantes y luego haremos todas las valoraciones en la fracción -responde Romero, quien además representa al partido en la comisión que recomendará al candidato a elegir.
—Pero si ya tiene tres años de trabajo, ya se le puede valorar su trabajo.
—Son las valoraciones que hará el grupo parlamentario de Arena después de haber escuchado los 72 aspirantes.
En el grupo parlamentario, Juan Valiente, un diputado que está desempeñando su primer período en el cargo, sostiene que hay que darle una oportunidad al fiscal Martínez para que explique, “por transparencia”, su relación con Enrique Rais. “Es importante, por transparencia, que el fiscal aclare ese tema. Él tiene que aclarar por qué hizo esas cosas. Yo esperaría poder conocer la opinión del fiscal. De hecho, me ofreció sostener una reunión hace un mes después de una entrevista en la que yo dije que era importante que aclarara todo”.
En septiembre, El Faro Radio preguntó a otro diputado arenero, Ernesto Muyshondt, si le parecía inconveniente por posible conflicto de intereses en la relación del fiscal general con Rais por medio de los vuelos, y respondió afirmativamente.
A Valiente también se le preguntó su opinión sobre la sustitución de pena carcelaria por trabajos de utilidad pública que la Fiscalía pidió para exfuncionarios del ISTA, entre ellos Miguel Tomás López, exdirigente de Arena, que confesaron haber cometido delitos de corrupción. “Me parece que la pena lograda en el caso del ISTA no refleja la gravedad de la acusación. Hubiera esperado resultados más contundentes”, respondió.
Ni Valiente ni Romero ni ningún otro de los cuatro diputados de Arena con los que El Faro vetaron a Martínez para un segundo período, pero dos de los legisladores consultados dijeron que no veían posible que Martínez logre su reelección debido a los procesos que la Fiscalía impulsó contra exfuncionarios de CEL y contra el expresidente Francisco Flores. “En buena medida por eso perdimos las elecciones presidenciales”, dijo uno de los diputados consultados.
Arena tomará la decisión a mediados de noviembre mediante votación secreta, según el calendario previsto por el jefe de fracción Alberto Romero.