El lugar de atardeceres infinitos, donde se ríe y se llora, de amigos que son familia, de inspiración y alegrías, de borracheras inolvidables, de bailes y reposos, donde se duerme en paz y el cuerpo incluso se siente más liviano. Así describen los que tienen marcada en la piel y el corazón la playa El Tunco, emblema del departamento de la Libertad y de El Salvador entero. En esta fotografía de larga exposición nocturna se aprecia la belleza del conjunto de rocas moldeadas por el oleaje; algunos dicen que en esas piedras caprichosas se ve el tunco, y que ese tunco sirvió para bautizar el idílico lugar.