Una placa que ensalza la figura del mayor D'Aubuisson está dañando la relación de Santa Tecla con una de las ciudades españolas que más ha cooperado en la última década. El Ayuntamiento de Zaragoza está molesto con la decisión del alcalde Roberto d’Aubuisson de incluir a su padre entre los 25 tecleños más ilustres en la historia de la ciudad, un homenaje financiado con dineros españoles.
“Queremos pedirle formalmente que retire el logo y la referencia de Zaragoza de cualquier expresión vinculada a la figura del mayor D’Aubuisson”. Así de explícito es el emplazamiento dirigido al alcalde tecleño con fecha 7 de julio de 2017 por Yolanda Mañas Ballestín, la jefa de Servicios Sociales Especializados de la alcaldía zaragozana.
“Mi padre fue uno de los impulsores más grandes que tuvo el proceso de paz en El Salvador”, defiende la decisión el edil. “Él siempre construyó acuerdos y yo buscaré, siguiendo su ejemplo, un buen acuerdo con Zaragoza, porque queremos mantener una buena relación”, agrega para tratar de limar asperezas.
Zaragoza no tiene nada que ver con el municipio situado en la carretera al puerto La Libertad. Zaragoza es la quinta urbe más poblada de España, capital de Aragón, una de las ciudades que más fondos destina a la cooperación al desarrollo: más de 3.5 millones de dólares en 2017. Las alcaldías de Las Vueltas, Arcatao y Azacualpa (las tres del departamento de Chalatenango), Ciudad Delgado, Cuscatancingo, San Bartolomé Perulapía (Cuscatlán), Santiago Nonualco (La Paz), Zaragoza (la ciudad homónima salvadoreña, hoy sí) y la propia Santa Tecla presentaron proyectos para ser financiados por los españoles en 2016.
El detonante del malestar está bien identificado: una placa de granito que ensalza al mayor Roberto d’Aubuisson, padre del alcalde, señalado como autor intelectual del asesinato de Monseñor Romero.
“Existe plena evidencia de que el ex-Mayor Roberto d’Aubuisson dio la orden de asesinar al arzobispo y dio instrucciones precisas a miembros de su entorno de seguridad, actuando como ‘escuadrón de la muerte’, de organizar y supervisar la ejecución del asesinato”, concluye el Informe de la Comisión de la Verdad para El Salvador, que Naciones Unidas publicó al año siguiente de la muerte del señalado.
La placa del mayor D’Aubuisson y las otras 24 que integran el proyecto están sobre el ‘Paseo de los Ilustres’, en un tramo del paseo El Carmen, en la acera situada justo frente a la iglesia, que paradójicamente es la que Monseñor Romero visitó el 24 de marzo de 1980, apenas un par de horas antes de que lo asesinaran, porque en El Carmen residía su confesor habitual, el jesuita Segundo Azkue. “Roberto d’Aubuisson Arrieta, mayor del Ejército y presidente de la Asamblea Constituyente. Tecleño Ilustre.”, reza la placa, y en una esquina se lee ‘Zaragoza Ayuntamiento’, con el emblema de la institución.
“No queremos ver asociado el nombre y el logotipo que representa nuestra ciudad con proyectos, actividades o personajes que no puedan ser identificados con la protección de los derechos humanos”, sentencia la carta enviada el 7 de julio a la Alcaldía de Santa Tecla.
Génesis y desarrollo del conflicto
El ‘Paseo de los Ilustres’ se inauguró la tarde-noche del 24 de enero de 2017. En el mismo evento se inauguró el ‘Salón de los Ilustres’, una sala del Palacio Tecleño con idéntica filosofía y con pequeños cuadros de los mismos homenajeados.
Fue un evento público, presidido por el alcalde D’Aubuisson, cubierto por la prensa nacional, y al que acudieron políticos y personalidades de distintos ámbitos. Asistió incluso el vicepresidente de la República y exalcalde de Santa Tecla, Óscar Ortiz, quien se mostró entusiasmado. “Estoy encantado, emocionado… estas son las cosas que marcan historia”, dijo.
Los fondos con los que se financió la iniciativa, de hecho, se obtuvieron durante la gestión de Óscar Ortiz. A mediados de 2014, la Alcaldía de Santa Tecla presentó el proyecto ‘Historia de mujeres, jóvenes y personas adultas mayores para la identidad cultural’ al Ayuntamiento de Zaragoza, que lo seleccionó y le concedió 25,000 euros (29,400 dólares al cambio actual). Todo en 2014.
“Pero cuando yo entro en la alcaldía (mayo de 2015), el proyecto no se había ejecutado y estaba por vencer”, dice el alcalde D’Aubuisson. En julio de 2016, desde El Salvador se envió la reformulación del proyecto, que Zaragoza aprobó, y aquellos fondos con fecha de caducidad se redirigieron para homenajear a “25 tecleños ilustres” con placas en el paseo y cuadros en el Palacio. Entre los elegidos están José Damián Villacorta (1796-1860), Francisco Dueñas (1810-1884), José María San Martín (1811-1857), Ángel Guirola de la Cotera (1826-1910), Toño Salazar (1897-1986)… y Roberto d’Aubuisson Arrieta (1944-1992).
En España no conocieron el listado de homenajeados hasta que el ‘Paseo de los Ilustres’ había sido inaugurado.
Los 25 tecleños ilustres fueron elegidos por el Instituto Municipal Tecleño del Turismo y la Cultura (IMTECU), según Paulina Hernández, gerente general del IMTECU, y Celina López, de la Unidad de Cooperación Externa de la alcaldía tecleña. El IMTECU contó con la asesoría del historiador Luis Melara del Cid y pasó por el filtro de la junta directiva del IMTECU. Isaías Mata, concejal del FMLN, objetó que debían incluirse a más mujeres en la lista. El IMTECU atendió esa objeción y el proyecto siguió adelante.
El presidente del IMTECU es el propio alcalde D'Aubuisson, aunque asegura que no participó en la elección de la que salió beneficiado su padre: 'Por razones de mi agenda rara vez voy a esas reuniones'.
Dos días después de la inauguración del ‘Paseo de los Ilustres’, el 26 de enero, un funcionario de la Embajada de España escribió a Zaragoza: “Les informo que en el municipio salvadoreño de Santa Tecla se ha instalado una placa en honor del mayor D’Aubuisson con el logo del Ayuntamiento de Zaragoza (adjunto fotografía de la misma). Como sabrán, el mayor D’Aubuisson es el presunto autor intelectual del asesinato del beato Monseñor Romero”.
Esa cita está recogida en la carta del 7 de julio que firma Yolanda Mañas Ballestín, la máxima responsable de los fondos que la institución destina para cooperación al desarrollo en todo el mundo, vía gobiernos locales o vía oenegés.
Cuando el ayuntamiento supo del homenaje, se optó por resolverlo con una llamada al enlace de la alcaldía tecleña para pedir explicaciones y exigir el retiro de los logos. Después, el tema entró en hibernación. “Pensamos que habían solucionado la situación tras la primera llamada”, dice ahora Mañas Ballestín. Pero no. En julio, cuando supieron que el llamado había sido ignorado, se redactó y se envió una carta membretada: la ya referida del 7 de julio.
Tres mandos medios de la alcaldía tecleña piensan que el reclamo tiene connotaciones políticas. Según correos electrónicos a los que El Faro ha tenido acceso, la alcaldía tecleña mandó, el 28 de abril de este año, el informe final del proyecto en el que se incluían imágenes de las placas, incluida la alusiva al mayor D'Aubuisson. Dos semanas más tarde, el 17 de mayo, Julio Martínez Lanzán, empleado del departamento de Cooperación al Desarrollo de Zaragoza, respondió. Martínez Lanzán hizo tres observaciones técnicas al informe, relativas a documentos financieros faltantes. Celina López contestó esas observaciones en un correo del 11 de julio. En esos intercambios, no hubo ninguna mención sobre la placa del mayor D'Aubuisson, de la que Zaragoza tenía conocimiento desde el 26 de enero. Esos seis meses de silencio son los que generan dudas en Santa Tecla.
El alcalde de Zaragoza desde 2015 es Pedro Santisteve, un abogado que llegó al poder comprometido con la defensa de los Derechos Humanos. Santisteve encabeza un proyecto político que aglutina a varios partidos de izquierda, como Podemos e Izquierda Unida.
Como otras otras ciudades españolas, Zaragoza tiene desde hace años una calle con el nombre Óscar Arnulfo Romero, por el impacto que generó el magnicidio.
El periódico más importante de la ciudad, El Heraldo de Aragón, destapó el caso el 31 de julio, con una nota titulada ‘El escudo de Zaragoza, en una placa que recuerda al responsable del asesinato de Monseñor Romero’. En el primer párrafo definen como “desagradable sorpresa” el sentimiento mayoritario en el ayuntamiento.
El Faro contactó a Mónica Tragacete, la periodista responsable de la pieza. ¿Por qué “desagradable sorpresa”? “Sorpresa porque en el Ayuntamiento de Zaragoza no sabían que 25,000 euros de dinero público se iban a destinar a este ‘Paseo de los Ilustres’ que incluye al considerado autor intelectual del asesinato de Óscar Romero. Y desagradable porque el actual gobierno municipal se ha mostrado muy comprometido a favor de la paz y de los derechos humanos, dos valores que no encajan con los hechos atribuidos a D’Aubuisson”.
Entre la treintena de comentarios que generó la noticia en la web de El Heraldo, hubo quienes se quejaron por el uso de los fondos: “Está claro que hace falta revisar bien dónde y cómo se entregan ayudas, y, con el consecuente estudio, solicitar devolución de esas ayudas si no corresponden con lo pactado”, propone una lectora.
“En España, sobre todo desde la crisis económica de 2008 y 2009, hay gente que critica que se destinen fondos a la cooperación internacional”, enfatiza Mañas Ballestín.
Al calor de los reclamos, el Ayuntamiento de Zaragoza envió el 4 de agosto una nueva carta, con un tono aún más áspero: “Se nos ha vuelto a comunicar que las placas con el logotipo de nuestro ayuntamiento siguen en el paseo sin ningún cambio al respecto, lo que nos sitúa en una posición muy delicada”. Y un emplazamiento que ya no se ciñe sólo a eliminar los logos y el nombre de la ciudad: “Les solicitamos de nuevo la retirada de dichas placas”.
El alcalde D’Aubuisson no parece estar por la labor. Ni siquiera ha respondido las cartas. Dice que tratará de ganarse primero a la Embajada de España: “Hablé con el anterior embajador, con Paco (Francisco Rábena, que dejó el cargo en julio), y me dijo que él en ningún momento había mandado carta alguna y que ni siquiera estaba enterado. Ahora he pedido una audiencia con el nuevo embajador para tratar este asunto antes de responder a Zaragoza, porque quiero saber primero por qué alguien de la embajada escribió la primera nota, que considero total y absolutamente fuera de contexto e inapropiada”.
De las respuestas del alcalde se infiere que no es negociable la exclusión de su padre de los 25 ilustres de Santa Tecla. “El mayor Roberto d’Aubuisson decía que el arma más poderosa de los hombres libres es el voto, y fundó un partido político para impulsar la democracia”, dice.
Cuando El Faro lo buscó para obtener su versión sobre el caso, el viernes 4 de agosto a las 8:45 de la mañana, el alcalde subió un par de horas después a su cuenta personal de Twitter una fotografía de su padre con la inscripción ‘Él me enseñó a amar la libertad’. Y lo acompañó con este mensaje: “Mi mentor, mi guía, mi más grande ejemplo a seguir. Gracias por enseñarme tanto, papá”.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha aprobado –y financiado– proyectos presentados por la Alcaldía de Santa Tecla en los años 2006, 2007, 2011 y 2014. Estos últimos son los redirigidos para el ‘Paseo de los Ilustres’, en el que se coló el homenaje al mayor D'Aubuisson.
Mi mentor, mi guía, mi más gran ejemplo a seguir, gracias por enseñarme tanto, papá. pic.twitter.com/m42AU25RWC
— Roberto d'Aubuisson (@rdaubuisson) 4 de agosto de 2017