Leonardo Bonilla es el primer diputado electo en la historia de El Salvador a través de una candidatura no partidaria. Con 38 años, es un abogado que fue representante legal de la organización Salvadoreños Residiendo en Colorado (Sarco) y socio fundador del bufete de abogados Consultores Jurídicos Corporativos, dedicado al derecho empresarial.
Su elección es histórica para El Salvador. Las apuestas por introducir diputados no partidarios en el salón azul datan desde finales de los noventa y principios del nuevo siglo. En aquellas gestas, el Movimiento Independiente Pro Reforma Electoral (Mire), cabildeaba por la posibilidad de incluir en las elecciones las candidaturas independientes, en un intento por garantizar mayor control ciudadano y transparencia en el manejo del órgano legislativo. Aquellas propuestas nunca lograron vencer la negativa de los partidos, y no fue sino hasta junio de 2010, cuando la Sala de lo Constitucional abrió la puerta para ciudadanos que quisieran competir por una diputación sin recurrir a un partido político. Fue hasta este 2018, (la tercera elección consecutiva que permitió esta posibilidad) que una candidatura no partidaria logró una curul.
La hazaña de Bonilla ha ocurrido en una elección a la que los partidos políticos llegaron con bajísimos niveles de popularidad y aceptación, y en cuyos resultados se evidenció el descontento hacia los dos grandes partidos políticos. El 4 de marzo significó la peor derrota del FMLN en su historia democrática, pero su disminución de votos no representó un incremento en la votación del partido Arena, que también bajó su votación. En esta elección, además, ocurrió una inusual alianza entre los candidatos no partidarios, que juntaron esfuerzos y recursos durante la campaña, e incluso juntaron las mismas firmas, para poder inscribirse como candidatos.
De los cuatro en contienda, solo Bonilla logró la curul en el departamento por residuo, al obtener 18 mil 187 marcas por rostro, según el acta de escrutinio final del Tribunal Supremo Electoral. De todos los no partidarios en contienda, Bonilla fue el único que tuvo que defender su independencia del partido Gana. Su vinculación tiene que ver con una firma. Cuando Gana tramitó su inscripción como partido político, en 2010, Bonilla dio su firma como 'respaldante'. Él se dice arrepentido de haberlo hecho y aclara que dar su firma no implica que haya militado en ese instituto político.
Bonilla llega a la legislatura 2018-2021 con una bandera a favor de la transparencia y del aborto, pero solo cuando la vida de la madre corre peligro. Se ve en la comisión de relaciones exteriores y abogando por un presupuesto para Educación del 6 % del PIB. Según él, 'una responsabilidad de cada diputado es transparentar lo que sucede al interior de la Asamblea'. Aunque admite que posiblemente su voto en el pleno pase desapercibido (en el nuevo periodo legislativo la Asamblea será dominada por los partidos de derechas), Bonilla dice que intentará hacer contraloría al trabajo de sus colegas diputados y que denunciará cualquier arreglo en la Asamblea Legislativa.
En medio de un contexto de desencanto hacia el sistema político, su elección es histórica. ¿Cómo se explica su llegada a la Asamblea?
Me llena de alegría ser el primer diputado independiente. Elegí la vía no partidaria porque estoy en desacuerdo en la forma en la que se han administrado los políticos, pero no ha sido un proceso mío ni un logro individual. Al inicio, 16 personas aspiraron a una candidatura no partidaria y al final cuatro lograron competir.
¿Cuál fue el secreto para lograr aquello que parecía imposible: romper la hegemonía de los partidos en la campaña electoral?
Es mucho más difícil si no se tienen los recursos económicos y humanos, pero el mismo contexto de descontento con la política tradicional por parte de muchos ciudadanos ayudó. Lo más difícil fue las firmas. Es un requisito casi imposible de cumplir para cualquier ciudadano independiente.
¿Cómo le hizo?
Contribuyó que los no partidarios trabajamos juntos en el departamento de San Salvador. No fue un secreto que las firmas de un grupo de ciudadanos fueron las mismas para varios candidatos. No existía un argumento legal que lo prohibiera, aunque el Tribunal Supremo Electoral quiso a última hora inventarse ese requisito. Como las firmas habían sido compartidas, el Tribunal decía que solo iba a permitir mi inscripción. Cuando la Sala de lo Constitucional admite el amparo, obliga al TSE a revisar las inscripciones sin tomar en cuenta que las firmas son repetidas. Permitió a tres candidatos más que se inscribieran. Si no nos hubiéramos unido, posiblemente ninguno hubiera llegado.
Usted habla de una unión de candidatos no partidarios. ¿Es la semilla de algo más?
La unión de candidatos no partidarios no es un concepto sino un fenómeno coyuntural. No es que trabajáramos como partido sin ser partido.
¿Qué puede esperar la población del primer diputado independiente? Por ejemplo, en las elecciones de 2015, pese a que corrió bajo la bandera del PCN, muchos le creyeron a Cristina López, una deportista humilde, una mujer luchadora, la promesa de un cambio en la política. Una vez llegó a la Asamblea Legislativa, como que la Asamblea la cambió a ella, que incluso respaldó una iniciativa de ley para beneficiar a un prófugo de la justicia: el empresario Enrique Rais. ¿Por qué la población debe confiar de que usted no hará algo similar?
La población no debe confiar en nadie, pero tengo tres años para demostrar que esas inseguridades a las que nos tienen acostumbrados los políticos tradicionales no serán parte de este diputado. La gente debe estar pendiente de lo que hace cada uno de los diputados, debe demandar información y exigir razonamiento de las decisiones que se toman en la Asamblea.
¿Tiene simpatías hacia algún partido político?
Soy un candidato independiente. No tengo simpatías. Ir como no partidario se debe a que no simpatizo con ningún partido político.
El diputado Guillermo Gallegos, de Gana, ha dicho públicamente que espera poder trabajar junto al candidato no partidario.
Está bien que el diputado tome en cuenta al no partidario. Espero que también lo hagan los demás partidos políticos. Eso no significa que tenga compromiso con alguno de ellos.
Usted brindó su firma como respaldante para el nacimiento de Gana. Es un partido cuyo nacimiento se vincula a la salida del expresidente Saca de Arena, el mismo que está en prisión acusado de desvíos millonarios de fondos públicos. ¿No es una contradicción que alguien que llega como independiente haya respaldado el nacimiento de un instituto político que se ha constituido como un partido bisagra, una expresión más del sistema de partidos políticos tradicional al que estamos acostumbrados, que se mueve como veleta a la derecha y a la izquierda?
El magistrado Tellez reconoció que yo nunca estuve afiliado al partido Gana y por eso dio su voto para mi inscripción. Yo solo fui respaldante. Categóricamente me desmarco del partido Gana y de cualquier otro partido político. No hay ninguna sola prueba que me vincule a ese partido más allá de que en algún momento firmé sus libros de inscripción. Que 17 mil personas firmaran mis libros para avalar mi candidatura no significa que estén afiliados a mi persona. Fueron ciudadanos respaldantes. Es tan malo el concepto que se tiene de los partidos políticos, que esa pregunta me la hacen a cada rato como si fuera un delito, pero lo digo de forma contundente: no me voy a plegar a ningún partido, a menos que sus propuestas sean en favor de la población.
¿Por qué dio su firma para el nacimiento de Gana? ¿Se arrepiente?
Firmé para aportar al fortalecimiento de la democracia a través del surgimiento de un nuevo instituto político. No iba a ser adivino para saber cuál iba a ser la conducta de ese partido. Por supuesto, me arrepiento de haber dado mi firma, por todo lo que dijiste en la pregunta anterior y por cómo se ha manejado ese instituto político.
En el periodo 2018-2021 habrá 57 votos para partidos de derecha. Arena tiene la legislatura resuelta si logra acompañarse de Gana y el PCN. El Frente, el CD y el no partidario parece que tendrán un rol irrelevante en esta legislatura. ¿Qué piensa hacer para que su presencia en el pleno no sea irrelevante?
No deja de preocuparme la aritmética, pero no en cuanto a que pueda ser irrelevante mi votación sino porque dicha aritmética permita a estos partidos aprobar cualquier ley en detrimento de los intereses de la población. Me preocupa que entre tres partidos puedan hacer una alianza y tener la mayoría calificada para definir la elección del fiscal y de magistrados. Es preocupante que, como ha sucedido en el pasado, puedan repartirse cuotas.
¿Qué garantías hay de que no se alineará con diputados que propongan candidatos con vinculación a partidos políticos en la elección de magistrados de la Corte Suprema de Justicia?
No va a suceder que yo me voy a alinear. Mucha gente confió en mi independencia. No daré mi voto a personas cuestionadas o con vínculos partidarios, que afecten su desempeño en una magistratura. Seré juzgado por la población si no es así. De llevarse a cabo alianzas de este tipo, la población contará con mi denuncia pública ante cualquier arreglo del cual yo tenga información.
¿Se ve como un fiscal de las actuaciones de sus 83 compañeros en la Asamblea?
No me vería como un fiscal de los otros 83, pero si en algún momento la población me ve así porque denuncio las actuaciones de mis compañeros, que sea la población la que me califique. Si existe en algún momento repartos de cuotas en elecciones de magistrados y de fiscal general, tendría que evidenciarlo. Espero que no suceda.
Entrados en materia de transparencia, ¿mocionaría para crear una comisión especial que investigue asignaciones de fondos públicos a oenegés fantasmas, como las asignaciones que recibió la asociación de la esposa de Guillermo Gallegos, el presidente de la Asamblea?
Independientemente de que se cree una comisión especial, la responsabilidad de cada diputado es transparentar lo que sucede al interior de la Asamblea. Habría que estudiar si se puede crear una comisión. Nunca lo he pensado, pero no solo con este diputado sino con cualquier otro que tenga un actuar que raya con la ética o con la legalidad.
¿Es primordial investigar este tipo de asignaciones a oenegés fantasmas o la negociación de seguros médicos privados?
Sí. Toda aquella actuación de un funcionario público que raya con la ética, e incluso de diputados involucrados con el narcotráfico, que ha sido un tema que ha sucedido, pero nadie ha dicho nada. Que haya asignaciones a oenegés de forma poco transparente, que haya diputados cuestionados por enriquecimiento ilícito que fueron inscritos como diputados, que haya una línea clara de investigación y una resolución pronta.
¿Considera que raya contra la ética la asignación de fondos públicos para seguros médicos privados o las asignaciones irregulares a oenegés como APDEMES?
Debo ser responsable. Aunque conocí por medios de comunicación de los casos, debo enterarme desde la Asamblea si son reales y si van contra la ilegalidad. Si eso fuera así, más que rayar con la ética, rayan con la ilegalidad y con la transparencia.
¿En qué comisión se ve trabajando?
Soy representante de Salvadoreños viviendo en Colorado, una organización de salvadoreños en el exterior. Me gustaría estar en la Comisión de Relaciones Exteriores, planteando esas temáticas. Hay asociaciones en Estados Unidos que quieren presentar iniciativas de ley para proteger sus derechos, pero también mis propuestas van encaminadas a temas de transparencia y lucha contra la corrupción. Creo en el tema de la educación y en que el presupuesto no puede ser menor al 6 % del PIB.
Usted ocupó como bandera durante la campaña una propuesta para reducir el número de diputados.
Platiqué con el señor Félix Ulloa y él me dice que es solo un tema de voluntad de los partidos políticos para hacer una reforma al Código Electoral. Según la Constitución los diputados se eligen en base a la población y no al territorio.
¿De 84 a 64 diputados?
Recordemos que la Sala de lo Constitucional dijo que era ilegal la plancha nacional, que eran 20 diputados. Podrían ser menos de 64 diputados. Podrían ser 60 diputados. La Sala ya dijo que la antigua plancha nacional era inconstitucional.
¿Cuáles son sus propuestas para esta legislatura?
El tema clave para mí es la reducción del número de diputados. Hay que devolverle el espíritu constitucional al fuero de modo que no responda a la necesidad de proteger a funcionarios por la comisión de delitos comunes o de enriquecimiento ilícito. Una vez le devuelves el espíritu constitucional al fuero, eliminas el antejuicio. Hay que establecer plataforma de transparencia, que aunque ya existe, debe ser oficiosa. Firmé un compromiso para aprobación de Ley de Función Pública. También hemos recibido iniciativas de asociaciones medioambientales para regular la fabricación de plásticos y productos desechables. Establecer por ley el reciclaje de forma obligatoria.
¿Cuál es su posición sobre la despenalización del aborto?
Es un tema de derechos humanos. Algunas personas lo han llevado al plano religioso, otras al plano radical y creo que debe estudiarse una posición equilibrada, en base a derechos. Si la vida de la madre corre peligro y se puede médicamente advertir esta situación, pues existe una justificación para interrumpir la vida del feto. Aunque por resolución de la Sala los médicos tienen la potestad de tomar esa decisión, no lo quieren hacer por verse posteriormente involucrados en la comisión de un delito. Debe legislarse de forma clara en qué casos los médicos pueden tomar la decisión y si habrá que consultar con la madre y el padre. Insisto, es un tema de derechos, pero no estoy de acuerdo en fomentar el aborto cuando hay otras alternativas. Se habla de la interrupción del embarazo como método anticonceptivo cuando existen alternativas en diferentes momentos. Se habla de interrumpir en casos de violaciones cuando se pueden prevenir las violaciones. El alto porcentaje de violaciones vienen de personas conocidas de las víctimas, personas de la familia o cercanas. Con educación a las familias y a las menores de edad, puedes prevenir que alguien que esté cerca pueda cometer una violación.
¿Usted está de acuerdo en que a una niña que fue violada por su papá se le prohíba abortar?
No es que esté de acuerdo en que una niña violada por su papá...
En términos prácticos, lo que usted acaba de manifestar implica eso.
No estaría de acuerdo en... Estaría en contra de que una niña por haber sido violada, que yo lamento esos hechos, pueda abortar. Estaría en contra.
Usted dice que es un tema de derechos. ¿No considera contradictorio que se limite la posibilidad de esa niña de decidir?
Una niña no tiene la capacidad ni la madurez para tomar una decisión tan trascendental como acabar con la vida de un ser vivo. Es lamentable la violación. Por supuesto, es lamentable y hay que castigar a quien cometió ese delito. Una niña que puede abortar... puede ser revictimizada. Que una niña aborte no implica que se terminó el problema, nos deshicimos del feto... Eso no va a quitar el hecho de que fue violada. Fue violada y ese trauma le va a quedar. Pero si la hacen abortar va a quedar revictimizada, porque también le va a quedar el trauma del aborto cuando existe la alternativa... La violación ya pasó y no lo podemos echar atrás. Además, existe ya una vida, a menos que el tratamiento sea inmediato. Si ella no quiere ser madre, la niña tiene la potestad de dar esa vida en adopción.
¿No cree que está siendo muy simplista? Con su argumento está limitando la libertad individual de esa niña, la obliga a cargar con una vida sobre la que no tuvo poder decisión, una vida que incluso, si es de escasos recursos, sería condenada a que repita el mismo ciclo de pobreza.
No se va a obligar a la niña a tener un hijo producto de una violación sino que se va a garantizar la vida de otro ser humano. Si mi visión es simplista, depende la perspectiva que la veas. Si a la niña se le va a coartar derechos, entonces trabajemos en ellos. Si en el país se viola a mil niñas, se puede erradicar que a 900 niñas se les viole si se ataca de manera sistemática que ocurran estas violaciones con leyes que puedan cumplirse. Antes de hablar del aborto, que es el fin último, que es como hablar de la pena de muerte, hay que evitar que esto suceda. Solo estoy a favor de una causal: cuando la vida de la madre corra peligro.
¿Está de acuerdo en reelección del fiscal o considera que debe elegirse uno nuevo?
He visto una buena actuación del fiscal general, pero habría que revisarla. Empezó con golpes certeros a corrupción, pero hay vacíos en casos emblemáticos que perdió. Hay otros casos denunciados que no han tenido respuesta. Habría que estudiar su actuación o proponer a uno nuevo que cumpla con parámetros constitucionales y con independencia.
Otro tema que genera conflicto es cómo abordar la salud de las finanzas públicas. Están quienes lo quieren resolver todo en base a recortes de gastos superfluos -los diputados del partido Arena- y quienes a través de incrementar la tributación con impuestos al gran capital, con activos superiores mayores a los 500 mil dólares -el FMLN- proponen resolver este problema. ¿Cuál es su posición al respecto?
Creo que el que más tiene, debe pagar más, pero en esos casos que planteas de grandes capitales, pero no la clase media ni la clase baja. No estoy de acuerdo en la imposición de más impuestos como el incremento en tarifas eléctricas, en la tarifa de agua y en el impuesto a las telefonías, que no es una contribución especial sino un impuesto como tal. Tampoco pienso que solo recortando grasa del Estado se va a solucionar el problema de las finanzas públicas. La lucha contra la evasión y la elusión es muy importante al igual que la lucha contra la corrupción, que al Estado no solo le cuesta millones de dólares sino también miles de vidas, porque al no garantizar el abastecimiento de medicinas mueren personas producto de la corrupción, que hace que no alcancen los fondos. El tema de aduanas y del tráfico ilegal de productos y bienes, los gastos superfluos y los salarios públicos. La misma carga pública de empleos de gobiernos que incrementaron puestos en instituciones, donde se alimenta burocracia. Eso afecta a finanzas públicas. Sonará utópico, pero ahí hay una fuente de ingresos que puede darle respiro a las finanzas públicas sin atacar los bolsillos de la población.
Una de sus propuestas de campaña fue decir que un diputado se bastaba con pocos asesores. Una publicación de la Prensa Gráfica cita una de sus frases, hoy que ya ha sido electo, en la que usted dice que necesita de un equipo de 15 personas. ¿Entonces?
Contrataré a no más de cuatro personas. Fue una respuesta sacada de contexto. Me preguntaron qué cuántas personas conformaban mi equipo, yo contesté que 15 personas, pero algunos de ellos son candidatos no partidarios, que me acompañaron durante la elección. No son pagados. Son personas que me ayudaron ad honorem. Cuando elija a las personas que me van a acompañar en la Asamblea, me comprometo a publicar sus perfiles para que la población juzgue si han sido contratado en base a criterios de idoneidad. Aún estoy evaluando perfiles, pero es posible que busque asesores en temas constitucionales y electorales, entre otras áreas.