El pasado 31 de octubre, cientos de personas salieron de El Salvador en caravana hacia los Estados Unidos. Cientos de hombres y mujeres dejaron el país debido a la violencia y la pobreza. Muchos eran desempleados, y los que trabajaban aseguraron no ganar lo suficiente para mantener a sus familias. En El Salvador, el salario mínimo en el sector de comercio es de $304.17 por mes; y en el agropecuario, de $202.00. A estos montos se descuentan impuestos de ley. Mientras tanto, la canasta básica cuesta $199.36 en el área urbana y $149.04 en el área rural, según información oficial. Hay muchos salarios que apenas alcanzan para sobrevivir. Marcharon fuera de su país también jóvenes universitarios que no encontraron una oportunidad de empleo, jornaleros, motoristas, vendedores ambulantes y amas de casa con sus hijos. Imitando a la caravana hondureña que partió 19 días antes, los salvadoreños emprendieron un viaje de más de 5,000 kilómetros desde San Salvador hasta la frontera con los Estados Unidos.