El narrador anunció la entrada de los 'honorables diputados de la Asamblea Legislativa' y solo eso bastó para la rechifla, la burla y los gritos generalizados de miles de simpatizantes de Nayib Bukele. En un escenario diseñado para poner frente a frente a los opositores del presidente y sus simpatizantes que, cual barra de equipo de fútbol, convirtieron el acto en un mitín cargado de humor, catarsis y burlas. Un estadio.