Los bares de la zona roja de San Salvador, conocida como 'La Avenida', llevan más de un mes cerrados. Las mujeres que se dedican al comercio sexual en la zona no pueden ejercer más el trabajo que les permitía sostener a sus familias. Algunas de ellas no han recibido los $300 prometidos por el Gobierno para ayudar a los afectados por la crisis, muchas se habían comido sus últimas reservas de alimentos justo antes de que la ayuda fuera prometida. Llegó ayuda, pero no la gubernamental. Un grupo de personas independientes les llevó alimentos que alcanzarán para un mes. Luego de que se acaben esas provisiones, deberán buscar alternativas.