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Cada diputado tiene un séquito promedio de 13 empleados

Mil 138 personas, el 68% de todas las plazas del parlamento, son personal contratado por los partidos en la Asamblea Legislativa, a un costo de por lo menos $12 millones anuales. Y mientras la junta directiva admitió que hay exceso de personal, uno de los ejecutivos de la Asamblea aseguró que los datos oficiales sobre sus honorarios están inflados y sembró más dudas sobre la probidad del Órgano Legislativo.


Viernes, 4 de febrero de 2011
Rodrigo Baires Quezada

En números redondos, cada uno de los diputados de la Asamblea Legislativa tiene en promedio 13.5 empleados a su disposición. Así lo reveló este jueves el presidente entrante del parlamento, el efemelenista Sigfrido Reyes, quien aseguró que la institución tiene mil 674 personas contratadas a partir del 31 de enero de este año, mil 138 de ellas contratadas por los partidos políticos.

La cuota que corresponde a cada legislador partió de un acuerdo que consistió en que cada diputado iba a tener derecho a 'emplear' personal hasta por un monto de 12 mil dólares, y ya depende de cada diputado o cada partido cómo cubre esos 12 mil dólares.

Las revelaciones ocurrieron en medio de un escándalo aún no aclarado sobre la contratación de 458 personas en 2011 como nuevos empleados legislativos, además de otras 126 plazas que no tienen respaldo alguno en el presupuesto de la Asamblea. La mayoría de fuentes de los mismos partidos han atribuido los nuevos puestos al partido Gana, y la responsabilidad de autorizarlas al hasta el lunes pasado presidente del Órgano Legislativo, el pecenista Ciro Cruz Zepeda.

La cuota de 12 mil dólares por escaño implica que los diputados han decidido tomar una bolsa de un millón de dólares mensuales y repartir plazas a su antojo hasta cubrir ese monto, independientemente de si hacen falta tantas manos para hacer el trabajo de apoyo a las bancadas legislativas. Aunque por las palabras del mismo Sigfrido Reyes pareciera que en realidad hay un reconocimiento de abuso. 'En las próximas semanas vamos a trabajar un plan para hacer una reducción en aquello que no se considere estrictamente necesario', dijo el presidente legislativo, al revelar las dimensiones del personal que hace la corte de los diputados.

Reyes explicó que durante la reunión semanal de la Junta Directiva de la Asamblea recibió un informe preliminar del gerente de recursos humanos, en el que se refleja el crecimiento de las plazas para 2011. “Hemos considerado que es una cantidad significativa y se han estado discutiendo medidas en el sentido que se profundice en la razón por la que se llegó a este número de plazas”, dijo.

El número real de personal asignado a cada partido político es incierto. Por ahora solo se puede sacara promedios. Reyes, a pesar de las preguntas de los periodistas, no dio a conocer el dato exacto ni el monto mensual erogado por fracción. “Tú puedes hacer una operación aritmética ahí y te va a dar el global (…) todavía a ese punto no hemos llegado en la Junta Directiva”, dijo, cuando se le insistió en que detallara cuántos empleados ha contratado cada partido.

Donato Vaquerano, jefe de la fracción de Arena, fue quien explicó que existe un acuerdo de poner un techo salarial de 12 mil dólares por diputado para ser distribuido en salarios. Este incluiría asesores, secretarias, motoristas y conserjes, entre otros. Y aunque esos 12 mil multiplicados por las 84 curules lleva a más de un millón de dólares mensuales, en realidad el monto es mayor, toda vez que los jefes de fracción y los miembros de la Junta Directiva tienen techos mayores. Por ejemplo, un vicepresidente tiene hasta 20 mil dólares para pagar a su equipo de trabajo, mismo que escoge a su entera discreción. Aún así, hay legisladores que aseguran que ese techo no se respeta, sino que es una cifra que se supera.

Hace dos meses, el diputado de CD Douglas Avilés dijo públicamente que él tiene 16 personas a su servicio. Pero diversidad de fuentes legislativas que piden el anonimato aseguran que hay legisladores que tienen a sueldo hasta a 40 o incluso más empleados.

¿Quién autoriza las nuevas plazas? Según el artículo 13, numeral 3, del reglamento interior de la Asamblea Legislativa, el presidente es el único autorizado para “celebrar contratos de cualquier naturaleza”. Desde cuando se hizo público el aumento de plazas, los diputados vieron hacia la oficina de Ciro Cruz Zepeda, entonces presidente de la institución, y se lavaron las manos. Así lo dijo Sigfrido Reyes, en una entrevista publicada en El Faro este domingo: “La autoridad para contratar empleados y otorgar salarios recae en el presidente de la Asamblea (…) Todo eso ha estado en manos del presidente”, dijo, haciendo referencia directa al líder pecenista.

Sin embargo, Sigfrido Reyes, así como los otros 11 diputados que pertenecen a la Junta Directiva, no citan que el mismo artículo del reglamento pone como requisito explícito para toda contratación que exista un acuerdo previo de la directiva. Incluso, el artículo 36 de la misma normativa establece que la Junta Directiva asignará los recursos, el espacio físico y el personal para los grupos parlamentarios, en proporción con el número de miembros que los conformen.

La normativa es más clara en su artículo 147. Bajo el título de “Nombramiento de empleados”, el reglamento interior establece que es la directiva la que nombra a los empleados bajo la Ley de salarios y también la responsable de celebrar los contratos de personal que crea conveniente. Además, establece: “Cualquier contratación de personal deberá realizarse previo acuerdo de la Junta Directiva, y la persona contratada no podrá iniciar labores hasta que se haya emitido el acuerdo respectivo.”

Por lo tanto, a la luz de su propia ley interna, todos los directivos son responsables de la contratación de personal, y no solo el presidente de la Asamblea, como hasta ahora han estado diciendo una cantidad de legisladores, incluido un correligionario del mismo Zepeda, Francisco Merino. La única posibilidad de que la versión que han dado hasta ahora sea cierta es que ellos mismos hayan violado la obligación de ser el primer filtro antes de que el presidente del Órgano Legislativo formalice las contrataciones y los sueldos.

El día cuando se votó el presupuesto 2011, a finales de 2010, Guillermo Gallegos, directivo y diputado de Gana, reconoció que habría un aumento de plazas para el año entrante, pero dijo que no recordaba el número exacto. Al final, al parecer, nadie podía saberlo porque el gasto anual del parlamento para 2011 se votó en blanco. Se votó en blanco pero tampoco fue cierto, como dijo en sesión plenaria la diputada arenera Carmen Elena Calderón de Escalón, que su partido no estaba al tanto del presupuesto. Hay documentos que muestran que el jefe de la bancada arenera, Donato Vaquerano, había sido informado sobre los detalles del plan de gastos e ingresos del Órgano Legislativo para este año.

Lo que sí era público a finales de septiembre pasado, era que la Asamblea Legislativa tendría un aumento de gastos que rondaban los 7.2 millones de dólares con respecto a 2010. Entonces, Lorena Peña, diputada del FMLN y parte de la Junta Directiva, defendió que el incremento serviría para aumentar los salarios de los empleados, según el proyecto de escalafón del Órgano Legislativo que se echaría a andar este año. La verdad, el presupuesto tenía 458 nuevas plazas, 19 de ellas bajo la ley de salarios y el resto por contrato.

“A partir de octubre de 2009 se da un salto en la contratación porque el grupo parlamentario de Gana, recientemente conformado en ese momento, tuvo reconocimiento de ley y tenían derecho a recurso humano, a espacio físico, etcétera”, reconoce Francisco Merino, diputado del PCN y vicepresidente de la Asamblea. El problema, según explican Merino y Reyes, fue que Arena no redujo su personal. Igual pasó con la fracción del Partido Demócrata Cristiano (PDC), que pasó de cinco diputados a dos y mantiene el personal contratado desde el inicio de esta legislatura.

¿Por qué no se obligó a Arena y PDC a reducir sus planillas? Nadie sabe explicarlo, pero ahora el presidente de la Asamblea asegura que buscan mecanismos para reducir el persona de la Asamblea, que a finales del año alcanzará 35.5 millones de dólares en remuneraciones.

Reyes aseguró que ya se había reunido con los jefes de fracción de Arena y FMLN, además del diputado de Convergencia Democrática, Douglas Avilés, y el independiente Órlando Arévalo, en un proceso de acercamiento para conocer cuál es la situación de todo “el personal que los grupos (parlamentarios) han contratado o le solicitaron al presidente saliente (Ciro Cruz Zepeda) contratar”.

“También vamos a revisar unidad por unidad, gerencia por gerencia, para establecer cuáles son las necesidades. Yo creo que en el último año hubo un aumento impresionante de plazas y no se limitan solamente a los grupos parlamentarios”, sostuvo Reyes.

Con los empleados “institucionales”, 344 plazas según los cálculos de Reyes, el presidente de la Asamblea Legislativa consideró que se podría aprobar un decreto de retiro voluntario porque muchos de ellos ya superaban los 15, 20 o 30 años de laborar en la institución. ¿Cuánta gente podría someterse a la medida? Reyes no dio a conocer números. “Vamos a terminar de hacer el análisis, pero yo creo que en unas cuantas semanas vamos a tener una aproximación”, dijo.

El problema estará en el recorte del personal contratado por los grupos parlamentarios, donde está el 68% de las plazas del parlamento. Según Reyes, se busca que cada partido haga las valoraciones de su personal para bajar la cantidad de plazas. Gana, en boca de su jefe de fracción Nelson Guardado, ya adelantó que “sería lamentable comenzar a despedir gente” y que, a pesar que son señalados de tener el grueso de plazas asignadas en este año, todavía necesitarían contratar más personal.

Asamblea o director de Protocolo mienten

La creación de 458 nuevas plazas aumentó el gasto en el presupuesto de la Asamblea para este año. Quienes hicieron el plan de gastos de la Asamblea Legislativa para 2011 movieron todas las líneas de trabajo reduciendo gastos en adquisición de bienes y servicios e inversiones. El ahorro obtenido por estos movimientos contables, sumado al incremento de 7.2 millones otorgado para este año, permitió aumentar el rubro de remuneraciones del parlamento en 8.2 millones de dólares en comparación con el año anterior.

“Hay gente que gana más que los mismos diputados”, dice un empleado que se queja de que el escalafón en la Asamblea Legislativa realmente nunca se echó a andar. Y continúa: “Los aumentos son a dedo… Pero es mejor no quejarse porque lo pueden echar a uno”. Según diferentes empleados consultados por El Faro, quienes pidieron el anonimato por temor a represalias laborales, se conocen que existen sueldos exorbitantes, “plazas fantasmas” de asesores de diferentes partidos políticos y el pago de horas extras a personal que llega a marcar “en bermudas y chancletas durante los fines de semana”.

Reyes ha dicho que no se dejará llevar por “presunciones”, que ha pedido un análisis de las 1 mil 674 plazas que tiene la Asamblea Legislativa en este momento y que como una primera muestra de la nueva transparencia de la institución mandó a publicar el presupuesto 2011 en la página web de la institución. Esto último ya se hizo: en el apartado de e-parlamento, cualquiera puede ver el presupuesto votado para este año.

Entre las plazas muy bien remuneradas está la del jefe de protocolo, el ex vicecanciller Eduardo Cálix, quien este viernes desmintió lo que reflejan los documentos oficiales. El director de Protocolo y Relaciones Públicas del parlamento recibe un salario bruto mensual de 3 mil 897.41 dólares, según la Ley de Salarios publicada en el sitio web del Ministerio de Hacienda. Ahí se detalla, además, que el funcionario tiene un sobresueldo de 1 mil 706.75 dólares, para un total de 5 mil 604.16 dólares mensuales.

Esa remuneración lo hace el empleado con mayores honorarios de la Asamblea Legislativa, solo por debajo del mismo presidente, quien entre su salario y gastos de representación tiene un sueldo de 5 mil 781.72 dólares. Además, por ejemplo, los honorarios de Cálix son superiores a los de Manuel Melgar, ministro de Justicia y Seguridad Pública ($3,345.15), a los de Romeo Barahona, fiscal general de la República ($4,571.43), y a los de Leonel Flores, director del Instituto del Seguro Social ($5,274.52).

Sin embargo, Cálix aseguró este viernes a un grupo de periodistas que él no gana más que los 3 mil 897.41 que tiene asignados como salario, el mismo que ha devengado desde junio de 2010, cuando ingresó a trabajar en la Asamblea Legislativa -aún cuando la plaza que tenía Jefe de Protocolo y Relaciones Públicas que asumió era de 3 mil 157 dólares- y que no sabe por qué le han atribuido un sobresueldo. 'Eso no sé porque salió así. Fui contratado por un salario de 3 mil 897, a los que se les aplica los descuentos... De ninguna manera gano 1 mil 700 dólares más', dijo.

La política de sobresueldos de la Asamblea Legislativa se aplica únicamente a personas que no cobran horas extras, por su nivel salarial, pero que por sus funciones trabajan más allá de los ocho horas laborales, explicó Roberto d'Aubuisson, vicepresidente del parlamento, del partido Arena. La ley de salarios de la Asamblea detalla 10 plazas con sobresueldos. Apartando el pago extra que recibe el director de Protocolo, los sobresueldos oscilan entre los 228 y los 768 dólares.

Sigfrido Reyes pareció respaldar la versión de Cálix, pues dijo que no existe un acuerdo de la Junta Directiva aprobando ningún sobresueldo para el puesto de director de protocolo y volvió a repetir que se le preguntará al ex presidente legislativo, Ciro Cruz Zepeda, sobre el tema. Sin embargo, El Faro consultó con otros directivos de la Asamblea, quienes bajo la condición de que no se les identifique aseguraron que Cálix sí tiene el sobresueldo que se detalle en el documento oficial sobre el presupuesto legislativo y que la nueva directiva ya decidió revocárselo.

Francisco Merino, vicepresidente del parlamento, asegura que no hay empleados que ganen más que los diputados y que, en todo caso, los salarios asignados a los empleados dependen de la labor que desarrollan y el tiempo de trabajar en la Asamblea. “Las plazas, por principios no pueden pasar de los sueldos de los diputados. ¿Quiénes ganan más? Los gerentes, los jefes de unidades y en el caso de todo el personal técnico de la gerencia de Operaciones Legislativas, que son profesionales con 20 y pico de años de estar aquí”, sostiene.

-¿Y un salario de 1 mil 528.57 dólares para un motorista, una plaza nueva creada en este presupuesto?

-Ojo, con eso... No sé qué caso es…

-… Motorista V, de la dirección Superior…

-Observación: Veamos la antigüedad y las aplicaciones del escalafón.

-Según los empleados, no se ha aplicado el escalafón.

-Hay que ver caso a caso. Una persona que tenga 20 años en la institución y que ha recibido, a lo largo de ese tiempo, póngale, 15 veces aumentos de 50 dólares, son 750 dólares más.

-¿Y hace 20 años habían sueldos de mil dólares para un motorista?

-No… ¿Y cuánto podía ganar un motorista?

-No sé, pero como hay salarios de 1 mil 90 dólares como motorista IV… de 1 mil 528.57, motorista V. Uno tiene licencia y puede querer meterse a ser motorista de la Asamblea…

-… Entonces, es de analizar el cambio de profesión. Aquí el sueldo más bajo, desde hace ratos, es de 300 dólares. Y de ahí para arriba. Entonces, es común ver secretarias, motoristas y ordenanzas que están en el rango de los mil dólares.

 

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