Tras una larga historia de riñas internas, el FMLN expulsó de sus filas Nayib Bukele, el alcalde de San Salvador con aspiraciones presidenciales, el político al que todas las encuestas colocan como la figura mejor valorada por la población. Este martes 10 de octubre, cerca de las 8 de la noche, el Tribunal de Ética del partido hizo público y oficial un anuncio que parecía anticipado: declaró culpable a Nayib Bukele de haber cometido cuatro faltas graves que justificaron la sentencia de expulsión.
Según una parte del acta leída por Marina Landaverde, el Tribunal de Ética del que forma parte “llegó a la íntima convicción” de que Nayib Bukele demostró haber promovido “prácticas que generan división interna” y “fomento de conductas personalistas”; realizó “actos difamatorios, calumniosos e injuriosos que dañan la imagen y honor una persona miembro o militante'; “irrespetó los derechos humanos de las mujeres”; y violó, en general, “la Carta de Principios y Objetivos, los Estatutos, Reglamentos y demás normas que rigen el Partido'.
Landaverde, militante histórica que por años fue la asistente personal del ya icónico, Schafik Hándal, también leyó una parte del acta en la que aclaró que el partido había tomado la decisión “luego de seguir el debido proceso” y de dar “la oportunidad al denunciante de defenderse y presentar prueba”. Quedó constancia, según leyó, de que al expulsado le asistió el derecho de defenderse, aunque no haya participado de la audiencia especial. Dice el acta firmada por todos los miembros del Tribunal que “en respeto de sus derechos se le nombró Abogado de Oficio en segunda convocatoria; y en audiencia desfiló la prueba escuchando testigos” que verificaron la prueba documental y vieron la prueba audiovisual.
La audiencia duró más de 18 horas, reza en el escrito. También dice que fue “unánime la resolución de imponer la máxima sanción que es la EXPULSIÓN del señor Nayib Armando Bukele Ortez. (sic)”.
El inicio de esta última batalla entre el alcalde y su partido inició en una sesión de concejo municipal ocurrida el 6 de septiembre pasado. En la sesión, los concejales del partido votaron en contra de las iniciativas del alcalde y al final de la sesión, dicen los testigos, Bukele le dijo a la síndica Xochilt Marchelli: 'Llevate esta manzana a tu casa, bruja'. Las palabras del alcalde provocaron la indignación de dirigentes y militantes del partido y se convirtieron en la gota que rebalsó el vaso en la relación entre el partido y el alcalde. Dos días después, el 8 de septiembre, la Secretaría de la Mujer del FMLN publicó un comunicado en apoyo a Marchelli en el que acusó al alcalde de violar la Ley Especial Integral para una Vida Libre de Violencia para las Mujeres. En el comunicado el partido acusa a su alcalde de agredir a la síndica municipal.
Bukele respondió ese mismo día. Hizo referencia a la última batalla por la remodelación del centro histórico, cuando Bukele comunicó desde su cuenta de Twitter que algunos de los concejales efemelenistas se comportan como si fueran opositores areneros. 'A muchos en el FMLN solo les falta cantar 'El Salvador será la tumba donde los rojos terminarán' y ponerse el chaleco tricolor...', escribó Bukele, al parafrasear la marcha del partido Arena.
Luego, la secretaría municipal del FMLN en San Salvador comunicó a sus directivos, el martes 12 de septiembre, que el partido de izquierdas había decidido romper su relación con el alcalde de San Salvador, Nayib Bukele, quien por lo tanto no podría buscar la reelección en 2018 cobijado con la bandera efemelenista. El secretario municipal, Dagoberto Sosa, informó a la estructura efemelenista que el partido estaba harto del 'maltrato' por parte del empresario, y que en sustitución de Bukele para la alcaldía se pensaba en la diputada Jackeline Rivera.
'El camino es cortar definitivamente con Nayib... hay una decisión unánime de la dirección del partido', fueron las palabras iniciales de Sosa, al hacer el anuncio. Minutos más tarde, esbozó las razones de la decisión: 'Definitivamente no podemos continuar con Nayib: maltrata al partido, nos compara con Arena, nos dice corruptos y dice que no hay presidente. ¿Entonces qué más queremos?'.
Tras estás declaraciones la dirección del FMLN preparó a bases para la ruptura con Bukele. El partido FMLN consultó a las estructuras efemelenistas de los 14 departamentos de El Salvador su opinión sobre la inminente ruptura con el alcalde de San Salvador, y el secretario general del partido, Medardo González, resumió este martes el resultado: 'toda la militancia direccional' respalda a la dirección efemelenista para poner fin a una relación formal que ya sobrepasa los cinco años.
Antes de ser expulsado oficialmente, el secretario general del FMLN, Medardo González ya había hecho pública lo que pensaba del alcalde. Sin mencionarlo por su nombre, se refirió a él como un “líder mesiánico” , “sin corazón ni pasado revolucionarios” y “con un equipo de trabajo en el que nadie es del FMLN”... Lo dijo un evento con simpatizantes del partido celebrado el viernes 6 de octubre.
El alcalde de San Salvador respondió que las declaraciones de Medardo confirmaban que 'la decisión de inhabilitarme ya está tomada', que 'la famosa y falsa agresión verbal sólo fue una excusa', y que 'sus molestias conmigo son totalmente de carácter político y de miedo al relevo generacional'.
Bukele mantuvo sus discrepancias con el FMLN casi desde el mismo momento que trabajó de llenó en el partido, que en 2012 lo llevó a tomar las riendas de Nuevo Cuscatlán y, tres años después, a dirigir San Salvador. Ha criticado al gobierno, sobre todo, por los impuestos aprobados por la Administración Sánchez Cerén y se ha atrevido a airear en público que el Frente está tomando medidas de corte neoliberal. Toda una afrenta a un partido que basa su verticalismo en el abolengo ideológico, y al que históricamente se le ha dificultado digerir la disidencia interna. Bukele había aceptado en una entrevista con El Faro que tenía aspiraciones presidenciables, pero creía casi imposible que se concretaran en una candidatura con su partido.
Acostumbrado a comunicarse a través de las redes sociales, cerca de las 8:30 de la noche Bukele resaltó en sus cuentas oficial de Twitter y Facebook una imagen de Wikipedia, en donde se reseña la biografía de Nayib Bukele, alcalde de San Salvador. 'Wikipedia: Actualizada', escribió en Facebook. En la imagen, en la casilla en donde se recoge el nombre del partido político al cual representa, se resalta un cambio: 'independiente'.
— Nayib Bukele (@nayibbukele) 11 de octubre de 2017
El dilema por una candidatura
Con el calendario electoral en plena marcha, y los plazos por vencerse, para el FMLN la expulsión de Bukele era estratégica, en medio de una relación que ya no daba para más. En ciernes queda, para el partido de izquierdas, el nombramiento de una nueva carta para San Salvador, para los comicios municipales y legislativos de 2018. Para cuando las bases del partido se pronunciaron en contra de Bukele, a mediados de septiembre, el nombre de la diputada Jackeline Rivera salió a relucir entre las filas efemelenistas, casi al mismo tiempo con este hecho: en las redes sociales oficiales comenzó a desplegarse propaganda audiovisual de una diputada Rivera cercana a las comunidades de la capital.
Para Nayib Bukele, la expulsión fortalece una carta legal con la que podría pedir un amparo ante de la Sala de lo Constitucional. Ahora tiene argumentos para luchar por un camino para participar en las próximas elecciones y alegar que fue expulsado en un proceso en el que se le violaron sus derechos.
A mediados de septiembre, El Faro preguntó al alcalde qué haría para la elección de 2018 si el partido lo expulsa. 'Aún no lo sé', respondió. Y cuando se le preguntó si emprendería su propio proyecto partidario en busca de la reelección, repitió esa respuesta.