La Fuerza Armada de El Salvador asumió el control de cientos de autobuses y microbuses de las rutas 42 y 152, dos líneas de transporte que recorren diferentes vías desde el centro de San Salvador hacia Zaragoza, La Libertad.
La militarización del transporte público ocurre tras el anuncio del presidente Nayib Bukele, que advirtió de duras medidas a aquellos empresarios y conductores que cobren tarifas no autorizadas por el Gobierno. El primero en sufrir las consecuencias ha sido Catalino Miranda, detenido por la policía la noche del 12 de marzo.
La primera versión divulgada en las redes sociales oficiales de la Policía Nacional Civil justifica la detención de Miranda por dos motivos: 'incrementar de forma ilegal la tarifa y obstaculización de la vía pública' con algunos de sus microbuses. La mañana de este lunes 14 de marzo, el director de la Policía Nacional Civil, Mauricio Arriaza Chicas, dio otra versión. Según Arriaza Chicas, Catalino Miranda fue detenido por el delito de 'Resistencia agresiva’’. En sus primeras declaraciones sobre este caso afirmó que 'nadie le ha expropiado nada' a Catalino Miranda ni a su empresa. El jefe policial se refierió a lo ocurrido como de la siguiente manera: 'la operación se debe a una intervención del Estado por diferentes denuncias en contra de la ruta'.
Este lunes 14 de marzo, uno de los días más concurridos en el transporte público, hubo caos en los dos puntos de operación de la empresa de buses de Catalino Miranda, en San Salvador y en Zaragoza. Los militares que asumieron puestos de motoristas estaban confundidos. Con libretas en mano, los oficiales de rango superior trataban de indicar a sus subordinados cuál era el recorrido que se debía seguir, ya que la ruta 42 cuenta con al menos tres recorridos distintos. En la confusión, algunos militares se asomaban por las ventanas de los microbuses para tratar de resolver sus dudas con el personal del Viceministerio de Transporte.