Una semana después de las elecciones que entronizaron a una aplanadora de partidos de derecha en la Asamblea Legislativa y que hicieron retroceder 15 años al FMLN en número de votos, el presidente Sánchez Cerén ha reconocido que su gobierno cometió errores y se comprometió a evaluar lo mal actuado para corregir el rumbo, en una serie de confesiones que solo apuntan a carteras que no son controladas por cuadros orgánicos de su partido como la Asociación Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA) o el Ministerio de Economía.
El martes 13, luego de una larga reunión de cuatro horas con su Consejo de Ministros, Sánchez Cerén anunció que habrá cambios, pero que estos no llegarán todavía.
'La población ha sido testigo de que hemos sido deficientes en la ejecución de algunos de nuestros programas y planes. Hemos elaborado propuestas, recomendaciones, para responder a estas deficiencias', dijo el presidente, acuerpado por Óscar Ortiz, el vicepresidente y aspirante a la candidatura presidencial del FMLN, uno de los primeros en exigir cambios tras la derrota en las urnas.
Cerén, máximo líder de las Fuerzas Populares de Liberación y la cabeza principal del 'colectivo', el grupo de seis dirigentes del FMLN que define el rumbo de las acciones del partido y del gobierno, reapareció en Casa Presidencial para dar una conferencia corta, de poco más de cuatro minutos, luego de un alejamiento autoimpuesto de la prensa que data desde 2016.
Más por el simbolismo que por la contundencia de su mensaje, su reaparición es clave para el FMLN cuando apenas falta un año para que acabe el reinado de su segundo gobierno, y cuando el país ya ha entrado en una campaña no oficial por la presidencia de la República, que se disputará en 2019. De hecho, la conferencia de este martes es la segunda intervención pública del presidente en tres días. El domingo 11 respondió preguntas de periodistas que lo esperaban a la salida de una misa en catedral Metropolitana, en el centro de la capital.
Cuando los periodistas le preguntaron por los resultados electorales, y si luego de la derrota electoral de su partido haría cambios en su gabinete, Sánchez Cerén dijo que su gobierno “no estaba aferrado a ningún ministro o viceministro”. 'Vamos a rectificar aquello que golpeó a la población', dijo, y luego criticó los cambios en los cobros de recibo de agua y de forma imprecisa dijo que cometieron errores con “los subsidios” que golpearon los bolsillos de los salvadoreños.
Detrás de las palabras de Sánchez Cerén, que parecieron dardos dirigidos a los titulares de las carteras en donde se toman esas decisiones, hay un simbolismo que llama la atención: ninguna de las carteras aludidas es dirigida por un cuadro orgánico del FMLN. El presidente de ANDA, Marco Antonio Fortín Huezo, llegó al gobierno en 2009 como presidente del Fondo Social para la Vivienda y luego saltó a la ANDA. El ministro de economía, Tharsis Salomón, llegó al gobierno en 2014 y ha sido cuestionado por dirigentes del partido que exigen cambios inmediatos. Ninguno es orgánico del partido, hacia donde algunos dirigentes como el vicepresidente Óscar Ortiz, el alcalde de San Marcos, Fidel Fuentes y el exministro de Obras Públicas, Gerson Martínez, también piden cambios.
'Los funcionarios de todas las instituciones del estado, especialmente la fracción legislativa del FMLN, deben renunciar a toda prestación que no sea indispensable para un verdadero servicio al pueblo. De esta manera, hay que luchar con más fuerza para eliminar privilegios de cualquier tipo, dentro del país', dijo Gerson Martínez el 10 de marzo.
Cerén no es el primer miembro del 'colectivo' que mira hacia afuera para explicar la derrota. En la noche del lunes 5 de marzo, en un acto de celebración por la conquista de la alcaldía del municipio de Mejicanos, José Luis Merino, otro de los hombres fuertes del partido, líder de las empresas Alba y miembro del 'colectivo', culpó a los empleados públicos por la derrota electoral. 'Esos hijos de puta no entienden porqué están en los cargos de gobierno, hay que echarlos a la mierda inmediatamente', dijo.
Los cambios vendrán otro día
La convocatoria y el anuncio de la reunión del Consejo de Ministros fue anunciada por el secretario de Comunicaciones, Eugenio Chicas, el martes por la mañana, en una entrevista concedida al estatal Canal 10. Los funcionarios se reunieron con el presidente alrededor de cuatro horas, y a las siete de la noche, Sánchez Cerén salió a dar a conocer los resultados... O una promesa de resultados para los próximos días.
Luego de las declaraciones que el presidente había dado el domingo, en las que señaló a la ANDA y al Ministerio de Economía, los nombres de los titulares de dichas carteras figuraron como candidatos a la destitución. Las críticas hacia esos dos funcionarios no son nuevas. En 2013, el ahora expulsado alcalde de San Salvador, Nayib Bukele, incluso acusó a Fortín Huezo de malversar 200 mil dólares de un proyecto de aguas para abastecer el municipio de Nuevo Cuscatlán. En aquel año, Bukele era alcalde de dicho municipio, y cuestionaba que ese proyecto no hubiese llegado pese a la existencia de los fondos. Fortín Huezo se defendió diciendo que el proyecto no había sido puesto en marcha porque costaba más de 900 mil dólares, no los 200 mil que aseguraba Bukele.
Más reciente, el 8 de marzo, el alcalde de San Marcos Fidel Fuentes -quien fue reelecto el 4 de marzo- dijo a El Faro que Tharsis y Fortín Huezo debían ser removidos de sus cargos. Fuentes responsabilizó al presidente de la ANDA de que el servicio de distribución de agua en San Marcos fuera mediocre; y a Tharsis Salomón le reclamó una mala administración de los subsidios.
También Lorena Peña, diputada, de la Comisión Política del partido y del 'coletivo', apuntó contra esas dos carteras. Cuatro días después de la jornada electoral, Lorena Peña dijo en el programa de radio Pencho y Aída que el gobierno cometió errores en la restructuración del subsidio a la electricidad y con el cambio del tarifario de los recibos de agua. 'Hay cosas que hay que corregir... Mis peticiones son que tienen que revisar y restaurar el subsidio a la energía. La focalización se llevó a un nivel que no era correcto y que afectó a familias de escasos recursos. Tiene que corregir y normalizar el cobro del agua, la facturación', dijo.
En su intervención, Peña también mencionó un mal funcionamiento en Aduanas, dependencia del Ministerio de Hacienda, dirigido por Carlos Cáceres, otro funcionario no orgánico del partido. De hecho, es curioso que Sánchez Cerén y dirigentes del FMLN cuestionen la focalización de los subsidios (cuya responsabilidad directa recae en el ministro de Economía) pero no mencionen con nombre y apellido a dos funcionarios que también participaron de las discuciones para maniobrar y detener, a través de esa focalización, un impago en octubre de 2016: se trata del ministro de Hacienda Cáceres y el secretario Técnico de la Presidencia, Roberto Lorenzana, otro miembro del 'colectivo'.
Entre el 25 de abril y el 6 de mayo de de 2016, una Misión del Fondo Monetario Internacional se reunió con Lorenzana, con Carlos Cáceres y con el ministro de Economía, para discutir medidas para atender la salud de las finanzas públicas. Una de ellas era ahorrar un 0.4 % del PIB focalizando aún más los subsidios. En septiembre de 2016, la oficina dirigida por Lorenzana decía que 'la focalización de subsidios no iba a afectar a familias de bajos ingresos económicos', en referencia a cambios en la distribución de subsidios de la electricidad y el gas propano que incrementaron el cobro en las facturas.
Tras cuatro horas de reunión en el Consejo de Ministros, fue el mismo presidente quien se encargó de enterrar todas las expectativas de que ese día se produjera un mínimo cambio simbólico en su gabinete económico.
'Con la reunión del gabinete ampliado empezamos el proceso de cambios tanto en políticas como a nivel de miembros de gabinete. Vamos a iniciar lo más pronto posible esos cambios que vamos a ir realizando en estos días y las medidas que vamos a llevar adelante', dijo Sánchez Cerén.
Para revisar esos cambios, el presidente explicó que se creará un comité ejecutivo integrado por el vicepresidente Óscar Ortiz; el secretario técnico, Roberto Lorenzana; el secretario privado, Manuel Melgar y el secretario de comunicaciones, Eugenio Chicas. Ellos, liderados por el presidente, evaluarán los informes recibidos por cinco gabinetes: el económico, el social, el de gobernabilidad, el de sustentabilidad y una evaluación de la secretaría de comunicaciones.
A las puertas de la elección presidencial, el FMLN rema contracorriente. De tener 31 diputados, finalizará su periodo presidencial tan solo con 23 diputados en la Asamblea Legislativa. Por ello, a partir de mayo corre el riesgo de convertirse en un partido irrelevante para la aprobación de decretos que necesitan mayoría simple (43 votos) y mayoría calificada (56) votos.
Si los partidos de derecha se ponen de acuerdo y votan juntos, podrán decidir - sin consultar al FMLN- quiénes serán los próximos magistrados de la Sala de lo Constitucional, si elegirán a un nuevo fiscal general o a reelegir a Douglas Meléndez, y aprobar nuevas leyes como la Ley de Aguas, propuesta en 2017 por una alianza de diputados de derechas.